Peter Perrett: “Cleansing”

 
Por: Àlex Guimerà.

La redención nunca fue un asunto sencillo para Peter Perrett. Con The Only Ones lo tenía todo de cara para abrazar el éxito pero el destino quiso que se perdiera en el pozo de las drogas, luego tuvo varios intentos fallidos de volver a la palestra (como su proyecto The Ones de 1996) lo que no acabó de lograr hasta hace bien poco. Pues la grata noticia de su resurrección artística llegó en 2017 cuando nadie daba ni un penique por él, y lo hizo con aquel maravilloso "How The West Was Won", que tuvo continuidad dos años después con otra gema como fue "Humanworld".

Han transcurrido unos años desde entonces, y nuestro protagonista ha superado una pandemia y algunos problemas de salud, para publicar su tercer disco en solitario, "Cleansing", que ha llegado en formato de doble álbum y en donde se purifica emocionalmente, a la vez que reflexiona sobre el desgaste de la vida misma. A sus 68 años cumplidos, Perrett se embarca nuevamente en un viaje introspectivo en donde vuelve a exorcizar sus demonios y lo hace a través de una paleta con los colores más sucios del rock. Para ello, Peter se rodea de un buen equipo formado por sus dos hijos Jamie (guitarra y productor) y Peter Jr. (bajo) a los que añade la presencia de dos grandes leyendas del rock británico como son Johnny Marr (Smiths) y Boby Gillespie (Primal Scream) junto a Carlos O' Connell, de los emergentes Fontaines D.C.

Con tal elenco Peter pinta un disco magnífico formado por veinte canciones cantadas con su desgastada y frágil voz para enunciar sus luchas internas que logra convertir en universales, y lo hace encima de ese rock salvaje herencia del legado de Lou Reed y de la Velvet. La inicial “I Wanna Go With Dignity” es toda una declaración de intenciones, pues su letra nos habla sobre la lucha del hombre en búsqueda de una redención que le permita recuperar su dignidad. Además la pieza cuenta con la guitarra de Carlos O'Connell de los Fontaines D.C., aportando ese aire modernizado.

Si me hicieran elegir una de todo el paquete quizás elegiría "Fountain On You", un medio tiempo maravilloso de romántico estribillo. Le seguirían de bien cerca otras como “Secret Taliban Wife”, con esa guitarra desgarrada que se eleva mientras los coros rezan "always doing time", o la emotiva "Feast For Sore Eyes". Aunque con 20 canciones el veterano rockero tiene tiempo de todo: languidecer como haría el mejor Lou Reed ("Do Not Resuscitate"), experimentar con sintes ("Woman Gone Bad"), meterse en pantanos post-rock ("Kill A Franco Spy"), marcarse riffs imborrables ("World In Chains", "Less Than Nothing"), ponerse ceremonioso ("Crystal Clear")...

Marr aporta las guitarras embrutecidas en el pop de ultratumba "Back In The Hole" y Gillespie las segundas voces en el pop naif de cámara "All That Time", con esas atmósferas caóticas bañadas con violines. Algo parecido sucede en "Set The House On Fire", que podría haber firmado la versión deprimente de Eels.

Sin duda "Cleansing" es la culminación de ese camino que tomó Peter Perrett en 2017, pues quizás es el disco más completo y personal de los tres en solitario que ha firmado hasta la fecha, ya que a través de ese su particular sonido sucio y denso se deshace de sus fantasmas personales que en realidad también son los nuestros. Nos revolcamos en la tristeza y en la desesperación, para finalmente entrever un resquicio de luz esperanzadora. Y es que, como dice Perrett, siempre hay algo que esperar a pesar que a veces nos pueda parecer que lo único que queda es el polvo.

PD: el 28 de febrero Peter Perrett toca en la Sala Upload de Barcelona y el 2 de Marzo en la Sala Sol de Madrid.