Es tiempo de Navidad y de regalos. Tiempo en el que importan más los encuentros entre amigos, en el que dejamos que brote una sonrisa si estamos dispuestos a que se impongan los buenos momentos. Iván Ferreiro está en eso también. En entender la Navidad como un tiempo en el que agradecer por los que tenemos cerca y ofrecer lo mejor de nosotros mismos. Y así lo ha hecho él, lanzando un fantástico disco en directo que recoge su actuación de hace casi un año en el Wizink Center de Madrid, justo cuando sus “Trincheras” están a punto de bajar la guardia. Ferreiro se tomará un respiro tras estas fechas, pero volverá a la carga con más conciertos el año que viene, demostrando que está más orgulloso que nunca de su “Trinchera Pop”, disfrutando de uno de sus mejores momentos a nivel artístico y personal y agradecido por la tremenda banda que le acompaña, que en este disco en directo se muestra en estado de gracia.
Además, y por si lanzar un disco en directo no fuera suficiente, el vigués nos sorprendió a todos con una versión de “Fairytale of New York” de los Pogues interpretada junto a Guadi Galego y un montón de amigos más, en esa demostración de la camaradería y el disfrute con los suyos que siempre le ha caracterizado. Su versión en castellano tiene a Madrid como protagonista y a su compinche Guadi como camarada para regalarnos un exquisito dulce navideño, este “Cuento de hadas en Madrid”, que es mucho más que un ejercicio de estilo, quizá la mejor versión de un tema navideño de nuestra gran cultura pop.
Inmerso en plena promoción de estos dos lanzamientos, Iván nos atendió vía telefónica para regalarnos otra de esas charlas que guardamos como un gran tesoro, porque compartir la filosofía de Iván Ferreiro (que ahora sabemos que hereda del mismísimo David Lynch) siempre es un placer, y hablar con él es sentirnos en casa, como si esta entrevista fuera más una conversación a la luz de las velas.
El pasado 5 de diciembre tocaste en la Riviera dentro de tu gira “Trinchera Pop”. Hablabas de la Riviera en tu disco “Casa” como un sitio muy especial para ti. Territorio conocido. ¿Por qué fue especial este concierto, que algunos entendimos como el fin de tu gira?
Iván Ferreiro: No fue el fin de gira en la Riviera. Hay más gente que pensaba que éste era el último de la gira, pero me quedan dos conciertos más en Valencia y Murcia en un par de semanas, y después uno en Barcelona y otro en Vigo, donde ahí sí que terminaré la gira.
Terminas la gira en casa, entonces.
Iván Ferreiro: Sí, eso es.
En esa misma fecha lanzabas un disco en directo grabado en el Wizink Center el pasado mes de enero. ¿Grabaste el disco ahí porque quizá fuera ese el concierto más especial de la gira? Porque muchas veces se dice que cuando se va a grabar un directo es cuando más presión se tiene y se disfruta menos.
Iván Ferreiro: Yo grabo todos mis conciertos desde hace muchos años. Hace tiempo que las mesas de mezclas te dejan grabar el disco por pistas sin que te enteres, así que yo voy grabando todos los bolos que hago. Y ese día en el Wizink fue muy especial. Era un recinto muy chulo, estaba petado, la gente estaba como muy arriba y alguien de Warner me dijo: “¡Qué pena que no lo hayamos grabado!” Y le dije: “Pues sí que lo hemos grabado”. Como grabo todos los conciertos nunca tengo esa presión, así que con este disco ya me encontré todo registrado en pistas.
En Warner se quedaron un poco tristes porque no había imágenes, porque no lo habíamos grabado en vídeo, cosa que a mí me alegra mucho porque es lo que más me come la cabeza, así que saqué las pistas y ya solo quedaba mezclarlo. Y aprovechando esto, para la edición especial tenía también grabado el de Barcelona en la Razzmatazz, que también fue súper bonito, así que lo metimos también. Fueron dos días emocionantes, tanto el Wizink como la Razzmatazz. Además, hacía tiempo que pensábamos sacar un disco en directo y no sabíamos cuál elegir, así que el hecho de que David Bonilla lo propusiera en Warner hizo que aprovecháramos para sacar estos dos en concreto.
“Cuando salimos al escenario a tocar y está todo el público con nosotros siempre siento que estoy en casa”
Titulas el disco “Puede que Madrid sea una trinchera pop”, pero lo que más me llama la atención es que tachas “mi casa” en la portada. No se si Madrid es también tu casa y por eso has querido reflejarlo en el título.
Iván Ferreiro: La verdad es que tengo que decir que Madrid es mi casa, Barcelona es mi casa, Sevilla es mi casa… Cuando salimos al escenario a tocar y está todo el público con nosotros siempre siento que estoy en casa. Me gusta eso que pasa en mi cabeza. Cuando escribí el disco de “Casa” pensaba mucho en mi hogar, en mi propia casa, en el edificio donde vivo y, de repente, te vas de gira y cada ciudad se convierte en tu casa. Dicen que uno es de donde le quieren y si es así, ese día mi casa era Madrid, hace un par de semanas era de Sevilla y dentro de poco seré de Valencia. Lo que tienen los conciertos es eso, que te encuentras con tu público y te hacen sentir como en casa siempre.
Has lanzado este disco solo en vinilo. No sé si llegará a las plataformas o ¿es ésta una manera de reivindicar el formato físico y cuidar al seguidor de siempre?
Iván Ferreiro: En principio no lo tengo pensado, aunque supongo que en algún momento saldrá en plataformas. Creo que es una forma de premiar al que compra en físico, como tú dices. Y también es una pequeña forma de protesta sobre cómo funcionan las plataformas. Si fuera cualquier otro negocio y le explicaras a la gente cómo funciona la cosa se darían cuenta de que para que gane el mismo dinero que gano cuando vendo un disco, en Spotify tendría que sonar 179.000 veces. Además también hay que premiar al que compra en físico. Creo que hay un tipo de comprador que colecciona, que le gusta tener las cosas en la mano y que curiosamente las escuchas que él hace no cuentan en ningún lugar. Así como las otras escuchas cuentan, las de él no, cuando a lo mejor está escuchando un cd en su coche mil veces y esas mil veces no aparecen en ningún sitio. En el fondo, esos son los que han sido mis fans durante muchísimos años y los que han ayudado a que mi carrera prosiga, así que me parecía que un concierto en directo era una ocasión especial para hacer una cosa de este tipo.
Otro de los aspectos a destacar de este disco es que el sonido es espectacular. Desde luego, la mezcla la habéis cuidado al máximo porque habéis grabado un concierto en el que se aprecian todos los matices. Es un lujo la calidad que tiene para el que lo escucha. Habéis conseguido que sea un pequeño premio para el seguidor, de alguna manera.
Iván Ferreiro: Sí, ese mérito es de todo el equipo técnico y de la banda maravillosa que tengo. Son un grupo que tocan increíble y el equipo técnico es espectacular, tanto Luis Antelo como Jordi Brugués consiguen un sonido fantástico. Ellos, los backliners y toda la gente que está trabajando. Así que es verdad, en mis conciertos hay mucho mimo por parte de un montón de personas que trabajan mucho para que eso funcione. Y es alucinante porque yo a veces me olvido de todo esto, pero cuando estaba oyendo las pistas para mezclarlas pense: “Joder, ¡qué equipazo tengo, qué suerte tengo de contar con toda esta gente!”.
En esta gira, tu banda, que siempre ha sido como tu familia, habéis sonado como un tiro. Os he escuchado varias veces en este último año y medio y siempre me habéis parecido tremendos. En el disco se potencia esto todavía más. Me encanta escuchar a Emilio Sáiz, que es muy protagonista en estas canciones. Se le oyen todos los detalles y filigranas que hace con la guitarra. Es una gozada. ¿Cuál es el siguiente reto que tienes con esta banda? ¿Qué escalón es el siguiente que queréis subir? Porque vuestra energía en directo es difícil de superar.
Iván Ferreiro: Este disco se grabó hace casi un año y a día de hoy lo estamos tocando totalmente de otra forma. Somos una banda que evoluciona en cada concierto. Es la banda de mis sueños. Con ellos nunca es igual un concierto que el del día anterior y cada día estamos tocando mejor, aunque siempre se puede mejorar y evolucionar, claro. Siempre se puede retorcer la canción y precisamente toco con ellos porque nunca hacen lo mismo. Cada día es una sorpresa, cada día disfrutamos más. Escuchando el disco me daba cuenta de que hay canciones que las estamos tocando de forma muy diferente en este momento, que han mutado. Si ahora cogiéramos una grabación de los conciertos de la última semana verías que son totalmente distintos. Eso es lo que tiene que ser para mí una gira. Una cosa que evolucione, que desde el primer concierto hasta el último haya un cambio grande. Igual el de fuera al principio no lo percibe, pero cada concierto sufre una mutación y cuando pasa un año y oyes lo primero que tocabas te suena raro, porque ya estás en otro sitio.
“Tenemos un repertorio que me deja muy satisfecho al acabar”
Sin embargo, el repertorio que habéis llevado en la gira quizá haya sido más cerrado que en otras. No ha variado tanto y es algo que también se ve en este disco. ¿Has encontrado justo en este setlist una especie de historia que se ajusta a lo que quieres y por eso te has sentido tan cómodo con este repertorio?
¿Dónde encontraste el punto al que te agarras para hacer de cada noche de esta gira algo único, algo especial?
Iván Ferreiro: Antes hablabas de Emilio, por ejemplo. Él nunca toca lo mismo. Cada día es diferente y como es una banda muy orgánica, Emilio hace una cosa y Ricky Falkner le responde de una forma diferente también con el bajo. Y Pablo Novoa está haciendo otra cosa distinta con el teclado porque acaba de escuchar lo que hace Emilio. Y yo, como mis máquinas no están programadas, sino que voy construyendo las cosas en el momento, cada día hago cosas diferentes con ellas, así que al final vamos cambiando. No utilizamos claquetas, a veces las velocidades no son las mismas, la energía que le pongo a la canción es otra y son matices que hacen que cada día sea diferente.
Las canciones de “Trinchera Pop” han sido las protagonistas al 100% de la gira, quizá porque es el disco con el que mejor te sientes. También aparecen “Turnedo” o “Años 80”, canciones que ya no puedes quitar de ninguna manera, pero en este disco nos presentas también sorpresas, desde “M”, que ha aparecido en todos tus conciertos, hasta “SPNB” o “Extrema Pobreza” ¿Crees que “Trinchera Pop” se va a quedar como un disco a reivindicar con una posición importante de aquí al futuro en tus directos?
Iván Ferreiro: Espero que sí porque es un disco que tiene unas canciones que da mucho placer tocar. Lo que pasa es que cada vez que saco un disco tengo que cargarme diez canciones del repertorio anterior, ¿sabes?. Cuando estábamos en la gira de “Casa” el repertorio era ya muy completo y nos gustaba muchísimo, funcionaba muy bien, pero luego tuvimos que eliminar diez canciones de ahí y meter otras diez. Y tampoco hubo mucha gente muy disgustada, así que estoy contento con el cambio. Hay que ver lo que nos depara el futuro y cómo nos sentimos. Las canciones van y vienen de los repertorios y no sabría explicar muy bien por qué. Simplemente pasa.
Estoy convencido de que algunas de estas canciones se quedarán, porque verte en el trance de “Miss Saigón” va a ser difícil de igualar.
Iván Ferreiro: Totalmente de acuerdo. Creo que “Miss Saigón” y “En el alambre” han llegado para quedarse, o “En las trincheras de la cultura pop”. Incluso “Pinball” o “Dejar Madrid”. Son canciones que disfruto mucho, que lo paso muy bien con ellas. Estoy muy contento con el disco y creo que en directo brilla mucho y saca lo mejor de la banda.
En este directo contaste con algunos invitados que aparecen en el disco, Juno y Santi Balmes, que también son parte de tu familia de siempre. ¿Qué te dejaron esas colaboraciones imborrables que nos ofreces ahora? ¿Te hubiera gustado contar con algún invitado más?
Iván Ferreiro: Ese día coincidió que fueron estos y los disfruté mucho. Quería tener hermanos y hermanas a mi lado y la verdad es que he compartido muchas veces el escenario con Santi, con Zahara y con Martí. Lo que quería era tener a gente conmigo que es parte de mi familia, parte de mi entorno, amistad y amores. Y no sólo conmigo, sino con toda mi banda. Ya sabes que me gusta rodearme de los amigos a la hora de tocar. Igual ese día puede que echase un poco de menos a Leiva, que andaba un poco ocupado y no pudo venir, pero afortunadamente tengo muchas oportunidades para tocar con él en otras ocasiones, así que no lo sufrí especialmente porque con él tengo esa relación en la que tocamos tanto juntos, nos vemos tanto y disfrutamos de estar juntos que sé que siempre va a acabar pasando.
Tu banda es esa familia que comentamos, que espero que dure por muchos años, porque nos ha dado muchas alegrías.
Iván Ferreiro: Yo también lo espero.
Ahora que parece que vas poniendo fin a esta etapa de las “Trincheras”. ¿Hay algo que revolotea ya por tu cabeza para lo siguiente que esté por venir?
Iván Ferreiro: No, por ahora no, y además ya me están empezando a salir conciertos para el año que viene, así que ahora de lo que tengo ganas es de hacer esos conciertos que me quedan. Descansar un poco, un par de meses, y volver a la carga. Probablemente igual cambio algo del repertorio, tengo que decidirlo todavía, pero bueno, es que estoy bastante a gusto de gira y ya sabes que cuando me pongo con las giras al final acabo alargándolas todo lo que puedo porque disfruto mucho. Todavía no tengo ni idea sobre qué voy a hacer con mi disco nuevo ni por dónde voy a tirar. Mientras se me ocurre me voy de gira, que es la mejor manera de que después lleguen las ideas.
Vamos, que estábamos hablando de que cerrabas la gira y a la vez la gira sigue y por el momento, de cerrarla, nada de nada.
Iván Ferreiro: Eso es. Soy un enfermo, es un problema que tengo (risas).
“Este villancico era una gran excusa para juntarme con mis amigos”
Iván Ferreiro: Era una idea que nos rondaba la cabeza y que igual nos gustaba porque la gente no se lo esperaba mucho. Y además está esa canción preciosa de los Pogues, que es maravillosa y era una gran excusa para juntarme con mis amigos. Si te fijas, tiene bastante que ver con todo lo que hemos hablado este rato. Igual sacar una canción por cantarla yo solo no me hacía demasiada ilusión. Me apetecía más juntar a un montón de amigos en un estudio para tocar en directo, porque la canción está grabada totalmente en directo, no hay ni un solo recording. Somos nosotros, todos juntos en una sala, haciendo música. Me parecía precioso, ya que la Navidad en sí misma, a nivel religioso, no es lo mío, pero sí que me motivaba la idea de juntar a mis amigos, de contar con una canción maravillosa, de tener delante a Guadi Galego y poder cantarla mirándole a los ojos. Además de invitar a Pablo, a María, a Budiño, a Santi y a Julián, a Vega… a un montón de gente. Me gustaba mucho esa idea y pensaba que nadie se iba a esperar una canción de Navidad, pero en el fondo creo que es bastante coherente con lo que soy, con lo que me gusta y a lo que aspiro, que es a disfrutar de la música con mis amigos.
La banda y los amigos que has nombrado, que tienes alrededor, son tus propios Pogues, pero luego tienes a Guadi Galego. Con ella te habíamos escuchado cantar, pero aquí hacéis una conjunción vocal que os va como anillo al dedo. ¿Siempre tuviste claro que era una cosa de los dos?
Iván Ferreiro: Sí, lo tuve claro. Cuando empezamos a hablar Amaro y yo de qué canción íbamos a hacer y de cómo íbamos a hacerla, siempre tuve claro que la adaptación sería de Ferrán Potón con Amaro. También llamamos a Santi Balmes para hacer la adaptación porque he hablado horas y horas con Santi sobre este tema a lo largo de nuestras vidas, pero él estaba más liado y no tenía tiempo, aunque esta adaptación era una forma de acercarme a Santi, a Ferrán… y sobre todo tenía claro que a la hora de cantar, Guadi era la compañera perfecta, la compinche ideal, porque es mi amiga, la quiero mucho, canta increíble, entiende el código del folk como nadie y sabía que iba a pasar lo que tenía que pasar. Guadi siempre fue mi única opción.
“Shane McGowan me ha dado muchas cosas y le debo mucho”
En cuanto a la letra, vuelve a aparecer Madrid como actor principal. ¿Ha sido esto un ejercicio de estilo, una reivindicación de esta ciudad o simplemente una forma de homenajear a Shane MacGowan?
Iván Ferreiro: Me gustaría pensar que son las tres cosas. Que esta versión primero tiene que ver con Shane y con todo lo que me ha regalado y lo que me va a seguir dando a lo largo de mi vida. Shane McGowan me ha dado muchas cosas y le debo mucho, como a todos los músicos que admiro. Por otro lado quería hacer un ejercicio de estilo al interpretar como nuestra una canción de Navidad. Y por último, creo que si Shane hablaba de Nueva York, nosotros lo hacemos de Madrid. Era la forma de poder hacer analogías entre las dos letras y divertirnos un poco por el camino. Ha habido un componente de diversión que ha sido muy importante. Diversión ligada a la emoción, porque ésta es una canción muy emocionante. La verdad es que fue muy divertido, emocionante… tiene todas las cosas que me importan de la música: Pasar un buen rato, emocionarme un poco y, de repente, ver cómo a alguien le robo una sonrisa. Me encantan algunos comentarios que he leído en internet de gente a la que no le gusta especialmente la Navidad y me dicen: “En general desde hace unos años las Navidades no son muy alegres para mí, pero oí la canción y me salió una sonrisa”. Eso me hace pensar que lo hicimos bien.
Es un poco como volver a la trinchera y decir que quizá con esta canción, esta época del año podría ser también una “Trinchera Pop”.
Iván Ferreiro: Reivindicar la Navidad desde el punto de vista de acordarnos de quiénes son nuestros amigos y de por qué les queremos. Y bueno, la Navidad son los regalos también y mis amigos me hacen un regalo estando conmigo. Ellos me dicen: “Gracias por regalarnos el formar parte de esto”. Al final nos estamos intercambiando regalos de forma alegre y amorosa unos a otros y también nos estamos dando, de alguna forma, algo por lo que disfrutar la Navidad, sobre todo a los que no nos gusta especialmente. Esta es una forma de encontrar un poco de alegría y que nos arranque una sonrisa.
Hay una referencia que utilizas en la letra que me encantó que son las leds, que están por todos los lados en Navidad. No sé si es una forma de hacer crítica a toda esta Navidad consumista en la que se han convertido estas fechas. En Vigo por supuesto, pero igualmente en Madrid o Zaragoza. En todas las ciudades parece que lo que manda ahora sea este festival de luz.
Iván Ferreiro: A mí me hacía gracia el hecho de que realmente no hay campanas ya en Navidad en ningún sitio. Pensamos que no podíamos hacer referencia a las campanas en la canción porque ya no hay campanas. Así que cuando se nos ocurrió lo de los leds nos hizo bastante gracia. Nos pareció por un lado un guiño, por otro una crítica y por otro un chiste. La verdad es que completaba muy bien la idea para que nos diera una satisfacción. Al final las canciones son para que el oyente haga con ellas lo que quiera en su cabeza, así que el que quiera ver una crítica, que disfrute de la crítica, el que quiera ver un guiño y un homenaje, que disfrute de su homenaje, porque realmente con la canción lo que queríamos es que cada uno hiciera con ella lo que quisiera y la disfrutase a su manera. Incluso a los que no les gusta, pues que la odien como quieran también (risas).
Nos cuadraría encontrarte en estas fechas más fuera de los focos, que es como siempre te habíamos visto, tranquilo desde Val Miñor o desde tu trinchera, pero precisamente ahora estás de gran actualidad con el lanzamiento del disco en directo y con la presentación del villancico. ¿Es un guiño para que no te perdamos la pista para lo que venga en 2025?
Iván Ferreiro: Está bien hacer que la gente se acuerde de que existes, ¿no?. Así que entre el villancico y el disco es una forma de seguir existiendo y, la verdad, es que ambas cosas fueron ideas de otro, de alguien que está a mi alrededor, porque hay veces que yo no pienso mucho en mi carrera, pero hay otros que sí que piensan en ella y es un regalo que me hacen, que me digan: “Podrías sacar un disco en directo o podrías hacer un villancico”. Como tú dices, estas navidades, que yo debería estar como escondiendo la cabeza, de repente estoy aquí contigo haciendo una entrevista (risas).
Quizá yo te haya visto en uno de tus mejores momentos personales y profesionales. En directo te he visto disfrutar como nunca porque tenías una sonrisa casi permanente en los conciertos, pero es verdad que se suele decir que en el rock se encuentra más la inspiración en los momentos de caída, en los momentos “en el alambre”, ¿crees que esta etapa más positiva puede hacer que tengamos que esperar más para que brote de nuevo tu inspiración?
Iván Ferreiro: No estoy muy de acuerdo con eso de que el sufrimiento ayude a la creatividad. Estoy más con la filosofía de David Lynch, que dice que hay que ser feliz siempre y que desde la felicidad se crea mucho mejor. Creo que mi vida ya ha conocido suficiente tristeza y suficientes bajonas como para poder hablar de ellas sin tener que volver a experimentarlas y creo de verdad en lo que dice David Lynch, que la creatividad es un espacio de felicidad. Yo hace ya un buen rato que tiro de eso. Tiro de mi felicidad para crear. De hecho, yo escribo y grabo cuando estoy contento, no cuando estoy triste. Hace bastantes años que escribo cuando estoy contento.
Desde luego que esa es la mejor filosofía.
Iván Ferreiro: Sí, lo otro ya lo conozco. No necesito estar experimentándolo todo el rato.
No quiero quitarte más tiempo, pero sí darte la enhorabuena por el disco, que lo he gozado muchísimo y estoy deseando volver a escucharlo como dices tú, tranquilo y como se tiene que escuchar, sin que me diga el wrapped de Spotify si lo he reproducido más o menos veces. Tengo también muchas ganas de escuchar el disco extra de Razzmatazz, que tiene un valor añadido, ya que son las mismas canciones pero en un ambiente distinto.
Iván Ferreiro: Sí, sí. Suenan diferente y está súper bonito también. La verdad es que estoy muy contento con los dos.
Espero que te tengamos presente pronto, que te volvamos a ver en gira el año que viene y desde El Giradiscos decirte que aquí tienes tu casa. Nos encanta saber que en algún momento ésta pueda ser también tu trinchera.
Iván Ferreiro: Muchísimas gracias. Te lo agradezco muchísimo.
Gracias por tu tiempo. Un abrazo, Iván
Iván Ferreiro: Un placer hablar contigo. Un abrazo enorme.