Por: Txema Mañeru.
Sabemos que la música de Frank Zappa no es la más fácil de digerir, aunque ha hecho prácticamente de todo. Tiene algunas joyas asequibles para todos los públicos y otras más para seguidores irredentos. Pero sus letras son una joya para todo aquel que tenga algo de sentido del humor y también para quien esté aburrido de políticos y de espíritus domesticados por la máquina, en general. Por eso es una genial sorpresa tener aquí estas 608 páginas de amplio formato y con portadas duras como ya sucedió con los volúmenes similares sobre Nick Drake o Van Morrison que sacaron sus colegas de Malpaso Ediciones. Lugar en el que salieron dos libros sobre Zappa absolutamente freakies y recomendables. Ya en Kultrum salió otro igual de recomendable y de características similares como es el también gigante volumen con las letras de Nick Cave.
Sí, Zappa era un auténtico freakie y también era un ser “absolutamente libre”, y lo puedes comprobar con la excelente traducción del experto en la materia Manuel de la Fuente , que se merienda las letras de 41 de sus discos, porque prolífico lo era con ganas, como lo eran sus queridos Edgar Varese o Joseph Haydn. También son divertidos freakies muchos de sus más acérrimos seguidores aquí y en otras partes del mundo. Por eso no nos podemos resistir a reproducir las opiniones de algunos de los más populares aquí y que aparecen en la faja que recubre la portada del libro. Comenzamos por las de su fan número uno aquí, El Gran Wyoming: “La obra de Zappa es inabarcable, compleja, espectacular, genial. Era un ser de otra dimensión. Provocador, cachondo, incorruptible. ¿Único en su especie? No existe tal especie.” Seguimos por Kiko Veneno: “La libertad y la irreverencia de Zappa construyen un relato muy vivo y único del mundo que le tocó vivir, y a la vez una obra de arte muy sofisticada y en permanente revisión”. El amigo de Wyoming, Pablo Carbonell dice lo siguiente: “Este libro es un momento histórico, poder disfrutar de las traducciones de las canciones de Frank Zappa es la redondez que los hispanohablantes necesitábamos. ¡Gracias! ¡Nuestras plegarias han sido escuchadas!”. Juan Soto Ivars opina esto: “Las letras de las canciones de Zappa, como su música, son un derroche de inteligencia, libertad y sentido del humor no apto para orejas embrutecidas ni pieles de cutis de monja. Recopilarlas y traducirlas solo puede ser el trabajo de un masoquista o un genio”. Ya por último no podemos dejar de transcribir las de Julián Hernández (Siniestro Total) que, además, firma un gran “Prólogo” titulado “¿Qué Leía Frank Zappa?”. “Frank Zappa […] tuvo una capacidad asombrosa para aparecer en el momento más inesperado a fin de poner en peligro, cuando más hacía falta, los cimientos de la cultura, la política, la moral y las costumbres occidentales”.
¡A que te entran ganas de salir corriendo a por él! De la Fuente es un experto en Zappa con varios libros escritos sobre el bigotudo y también encargado de las traducciones de esos que te habíamos recomendado antes de Malpaso Ediciones, incluido el de su secretaria, Pauline Butcher, “¡Alucina! Mi Vida con Frank Zappa”. Pero el mejor de todos es “Frank Zappa. La Vida Se Resiste A Morir. Biografía No Autorizada”, que ya pasó, muy merecidamente, por las páginas de El Giradiscos.
Pero este libro actual nos permite, realmente, contemplar en toda su amplitud el universo creativo del genio bigotudo. Y es que las letras de sus discos constituyen un documento esencial para reconocer su enorme valía. Letras que aparecen en ambos idiomas, por supuesto y que demuestran lo ágil, concienzudo, sarcástico, irónico, crítico y muy divertido hasta poder hacerte reír al leer algunas de sus letras preñadas de inteligentes ocurrencias. Tenemos esos 41 discos con sus respectivas portadas fotografiadas desde el debut en el 66 como The Mothers Of Invention, con “Freak Out!” hasta el también muy interesante y destacado ‘Civilization Phaze III”, del 94. Discos conceptuales como "Joe’s Garage”, melódicos y asequibles como “Broadway The Hard Way” o mi querido disco doble “Sheik Yerbouti” del 79 que fue el primero que tuve en vinilo. Humor salvaje en “We’re Only In It For The Money” o “Does Humor Belong In Music?” y rescates como “The Lost Episodes”.
A lo largo de estos centenares de temas Zappa recrea sus vivencias en un oficio poblado por ejecutivos avaros, músicos quejicosos y periodistas ignorantes. Para ello inventó mundos disparatados con montañas parlantes, cerditos vanidosos, arañas gigantes o princesas galácticas. Todo ello con el fin de atizar y ridiculizar a políticos y empresarios mezquinos, sindicalistas, fundamentalistas embaucadores, gurús charlatanes, jipis pretenciosos, grupis lascivas, adolescentes asilvestrados y padres de familia alcoholizados. Sí, usando un lenguaje procaz, y hasta soez, y un humor corrosivo, para sacar a la superficie los aspectos menos ejemplares del American way of life, sin ningún tipo de pelos en la lengua ni autocensuras de ningún tipo.
Son muy destacables igualmente los textos introductorios y notas explicativas de Manuel para situar el contexto de cada disco y canción. Descubrirás su voz deudora de Rabelais, Jarry y el dadaísmo. Provocación y reflexión con gran manejo del sarcasmo más ácido. ¡Sí, estamos ante una de las obras musicales y literarias más importantes de la historia y cuya vigencia no deja de crecer! ¡Viva el mundo "zappiano" y el genio bigotudo!