Paco Gené Cort: "¿Quién cojones son Buenas Noches Rose?"


Por: Artemio Payà.

Llevo mi mente hasta el otoño de 1994, hace justo tres décadas quien os escribe se disponía a estrenar curso en un nuevo instituto en mi barrio, la Alameda de Osuna. Mi mochila iba cargada de libros, mi carpeta forrada con fotos de guitarristas y estantería de mi casa estaba llena de cassetes de artistas que había ido descubriendo en los últimos años: AC/DC, Jimi Hendrix, Led Zeppelin, Metallica o Rage Against the Machine. Allí rápidamente congenié con otros chavales con gustos parecidos y que enseguida me pusieron sobre la pista: “Aquí en el instituto hay unos tíos que son la bomba, tocaron el año pasado en el gimnasio y se llaman Buenas Noches Rose”. Algo parecido a “Quien cojones son Buenas Noches Rose” es lo que debí pensar, y es así como se llama el fantástico documental de Paco Gené sobre estos tipos del instituto. Poco después pude verlos y aluciné al descubrir que los tíos que pululaban por el barrio, por los mismos lugares que yo, no sólo es que tuvieran unas pintas como los que iban en las fotos de mi carpeta sino que era verdad que eran la bomba en directo.

Es precisamente en ese destartalado gimnasio donde empieza la cinta. Aquel fue el punto de partida no solamente de la banda sino también el germen de un virus que se expandió por todo el barrio y que animó y empujó a muchos chavales de ese instituto a tomar sus guitarras. Un veneno que ellos tenían grabado a sangre y fuego y que les llevó a vivir todas las vidas de una banda de rock en muy poco tiempo, “Too Much, Too Soon” que decían los Dolls. Acogidos por una discográfica pequeña pero con gran distribución pudieron grabar un disco enseguida, su sensacional debut y pudieron presentarlo allá donde les dejaban. Visto con el tiempo está claro que eran demasiado rockeros para el mainstream a pesar de salir en los 40 principales y esto mismo no era visto con buenos ojos por el underground que no daba credibilidad a la banda a pesar de tener todo a favor: canciones, imagen y actitud. En ese sentido queda muy bien retratado en el documental su “affaire” con el Ruta 66 que poco menos les tachaba de broma. Es posible que ese fuera su primer chasco, pero no sería el único, el director cuenta con gran material de archivo para penetrar en el interior de la banda en aquellos años y con la visión en perspectiva actual, todos a posteriori coinciden que fueron exprimidos hasta la última gota de sudor en giras maratonianas, incluyendo aquel famoso tour tocando encima de una furgoneta que suscitó la atención de la prensa que que no paraba de preguntarse: ¿Quién cojones son estos Buenas Noches Rose?

Un segundo disco mucho más maduro y alejado de las canciones para-todos-los-públicos, el cansancio, los líos discográficos con venta a BMG incluida y por sorpresa, la juventud y las falsas expectativas llegaron a una situación que detonó el seno del grupo. El camino hacia la fama muchas veces lo disponen otros protagonistas, alejados de los instrumentos y para ellos, que contaban menos de veinte años fue demasiado. Todo explotó antes del tercer disco como se ve reflejado en el documental, una detonación complicada contando que eran cinco amigos de toda la vida que de repente habían tocado el cielo con las manos. Tema espinoso que está muy bien contado en la película y que con el poso que dan los años queda perfectamente narrado por sus protagonistas.

Es por ello este film un documento necesario para revivir o conocer a Buenas Noches Rose, visto sin amarillismo y dando voz a todos los protagonistas, con mucho material ignoto de aquellos maravillosos 90 en los que había cinco tipos que habían nacido para reinar, una estrella fugaz que para muchos debió volar más tiempo pero que acabó abruptamente y que dio paso a una banda tan exitosa como Pereza o esa otra joya llamada Le Punk (para más detalles se puede acudir al documental “Los Zapatos No vuelan” dirigido también por Paco Gené). Injustamente todo esto que os cuento todavía no se ha podido exhibir en salas ni festivales, espero que esto quede pronto reparado y mostrar la historia de una época, la de cinco amigos de barrio que se sentían estrellas de rock, que lo fueron durante un momento y que para muchos siguen siéndolo y que además editaron uno de los mejores discos de los 90 en España. No se pierdan “Quien cojones son Buenas Noches Rose”.