Por: Àlex Guimerà
Apenas tienen 26 años y ya van para su cuarto elepé -no nos engañemos, "From The Fires" (2017) no era un simple EP- y a pesar de la pandemia llevan a sus espaldas un buen trote de conciertos alrededor del mundo. Marcados para lo bueno y para lo malo por las omnipresentes (y cansinas) comparaciones con Led Zeppelin, podemos decir que el cuarteto ha logrado alcanzar un altísimo nivel instrumental y vocal maximizado por lo compactos y coordinados que suenan en sus directos.
Lejos quedan los formidables hits como "Safari Song" y "Highway Tune" o la sensacional revisión de "A Change Is Gonna Come" de Sam Cooke, entre medio publicaron "Anthem Of The Peaceful Army"(2018) y "The Battle At Garden' s Gate" (2021), magníficos trabajo que quizás adolecieran de singles fáciles que les hubieran encumbrado como el "hype" del momento. Aunque a decir verdad, son malos tiempos por el rock.
Para su nueva entrega, "Starcatcher", los tres hermanos Kiszka, junto con el batería Danny Wagner, fueron a Los Angeles con la intención de grabar bajo las órdenes de Josh Kiszka (también con Jason Isbell y Chris Stapleton) unos doce cortes con los que han querido refinar su sonido a través del rock americano. Un sonido propio que han ido buscando en cada paso que han dado y que parece que con la nueva entrega están alcanzando.
Abre las puertas la creciente "Fate Of Faithful", enmarañada entre teclados y solos, con esa aurea misteriosa "made in Led Zep". Es la entrada a todo el imaginario sonoro de los de Michigan, que nos ofrecen de todo y más. En ese itinerario hay espacio para desgarradoras baladas (" Waited All Your Life"), fulminantes riffs y solos de harmónica ("Falling Sky"), ampulosidad a los violines ("Scared The Threat"), punk-blues acelerado ("Runaway Blues"), ritmos Black Sabath ("Frozen Light"), rock celta explosivo ("The Archer") o despedidas abrasivas ("Farewell For Now"). Y por destacar alguna, diría sin duda "Meeting The Master", con su carga de pomposidad y delicadeza a partes iguales, resulta estremecedora.
Mucha controversia ha habido y hay en relación a esta banda. Sin ir más lejos, Steven Wilson les ha tildado de banda de tercera, otros consideran que han recibido una cantidad desproporcionada de atención mediática en comparación con otras bandas emergentes más originales. Son opiniones y todas son respetables, faltaría más. Por parte nuestra compramos y abrazamos esta propuesta en alza basada en el enorme talento juvenil del cuarteto y en su amor ilimitado por el rock de los setenta.