Por: Txema Mañeru
Por fin ha llegado un pedazo de LP completo de este sexteto que te engancha desde la espectacular portada con guapa y oscura ilustración a cargo de Adrián Bago. Era algo ya muy necesario tras varios años de parón, 2 EPs y un chulo 10”. Els Morts han ampliado sus espectros sonoros cercanos al garage-punk y al más crudo rock’n’roll y pshychobilly de The Cramps. Así se atreven con destellos soul, ritmos bailables cargados de swing y varios enfoques psicodélicos. Todo eso manteniendo su habitual temática alrededor del ocultismo, el tenebrismo y hasta la mismísima muerte.
Pero el cachondeo y la diversión también siguen asegurados con sus coros ricos, un saxo tenor súper presente, jugosos y variados teclados y esas guitarras eléctricas años cincuenta y muy garageras. Mossén Bramit Morera i Els Morts no estaban muertos, estaban de parranda. Se han marcado unos cuantos buenos y originales temas propios en cuyas composiciones ha colaborado hasta el ex muerto Marc Argenter.
A esto hay que sumar adaptaciones (al estilo de las que hacen sus compañeros de sello, The Daltonics) de clásicos de Flamin' Groovies ("Teenage Head"), Sonics, Fuzztones ("She’s Wicked"), Downliner Sect ("Glendora"). Así hasta a acabar con el flamante "Louie, Louie", de Richard Berry & The Kingsmen, convertido en un guapo "Sang i Budells" donde bordan su estribillo, que es cuando más recuerda al clásico original, aunque también se acuerdan de Iggy Pop y de los abusos policiales. Al rockabilly-garage se le suma esa ya citada temática truculenta y el logrado espíritu frat. Claros herederos de los Cramps, pero también del espíritu teatral terrorífico de Screaming Lord Sutch. Mossén Bramit Morera canta que da miedo,en el mejor sentido. Edu Rocket sopla su saxo tenor como si no hubiera un mañana y es protagonista casi continuo en la mayoría de los temas. El arte gráfico de MaliceGo (Alicia Gómez) es una gozada y todavía mejor la producción de Fil Espectre que toca guitarras, percusiones y aporta voces dentro del sexteto.
Como ya hemos dicho, observamos más variedad que nunca, comenzando por las guitarras graves y la oscuridad psych-garage de "Testa de Donzell" ("Teenage Head") para llegar hasta los ritmos swing de "Swing Dels Morts". La cara A cierra con el "Es Bruixa", de los de Potrudi, con su buena historia narrada, ese citado saxo y la oscuridad a raudales. La cara B la abre el rock’n’roll desenfadado para bailar de una "Margalída" de rotundo estribillo. Estos dos temas son los únicos que superan los 5 minutos de duración pero tienen motivos musicales y literarios para ello.
Oscura, pero bailable y con toques italianos se presenta una "Glendora" de chulos coros que popularizaron Downliner Sect. Aquí se atreven hasta con versos de Quevedo, Bécquer o March. Mucho saxo también tiene cabida en la pegadiza y bailable "No Tingues Por De La Foscor". Razones más que sobradas para que se hayan unido para la edición del disco L’Esglai Produccions, La Casa Esquerra y los locos de Family Spree Recordings. Todos ellos y la banda están de enhorabuena por los buenos resultados logrados.