Por: Txema Mañeru
Las despedidas son generalmente tristes, pero la del prolífico Caballero Reynaldo es alegre musicalmente porque él siempre lo ha sido. Seguro que no estará quieto demasiado tiempo y bien sea con Los Visionarios o en otras historias a inventar, Luis González volverá a la carga más pronto que tarde.
Su titánico proyecto ha durado 26 años y han sido un total de 36 discos con 674 canciones publicadas. La despedida tenía que ser con temas propios y lo ha hecho culminando la trilogía comenzada hace dos años con “Cromos” y que tuvo continuidad el pasado año con “Cronos”. Entre todos ellos compila 34 canciones con sus correspondientes versiones instrumentales. El primer disco fue retro-surf y muy romántico. “Cronos’ tenía dos partes: la primera más pop y la segunda más intimista. “Cosmos” viaja más lejos, como su título indica, y es un repaso a todo el universo Reynaldo. De nuevo con una preciosa portada interestelar en amplio formato y con 12 temas que suben hasta 24 con las versiones instrumentales.
No podemos dejar de hablar en su despedida de sus discos de versiones “botijiles”, con el reciente “The Fascinating World Of Depeche Mode And The Jugs”, disco que como casi toda su discografía puedes encontrar en www.halloffame.es. Llegó este mismo año tras múltiples y recomendables discos en los últimos tiempos junto a The Grand Kazoo, recuperando la obra de Frank Zappa, sobre todo en directo y hasta añadiendo DVDs en varios casos. En sus “Botijos”, así llamados por la presencia de esos vetustos artefactos en las cuidadas portadas de estos discos de versiones, había sacado ya a King Crimson, The Beatles, Prince, Ringo Starr, Yes, Motörhead u otras perlas sueltas de otros autores en otros discos como sus “Antojos”. No esperábamos que se fuera a atrever con los Depeche Mode., pero lo hizo y los resultados han vuelto a estar a la altura con temas muy divertidos y otros más “serios” pero siempre con buenos hallazgos tanto en los temas más techno-pop de los comienzos, como la siempre saltarina "Just Can’t Get Enough", o en hitos posteriores que no podían faltar como la grave y oscura "Personal Jesus", la lenta con toques orientales "A Question Of Time" o una alegre "Master And Servant" más transformada que otros temas. ¡Encantará tanto a los seguidores de Reynaldo como a los de los Depeche Mode!
Pero ahora es momento de profundizar un poco más en “Cosmos”. Un disco en el que cabe todo el cosmos personal de Luis y los suyos. Comienza con un instrumental, con algunas voces, marca de la casa, como "Papá, Papá". Coros guapos y buena melodía pop con juguetonas guitarras encontramos en "La Luna y El Sol". No faltarán sus habituales aires a Zappa tan habituales y divertidos como los de "Fanáticos del Planeta Enano" y sus logrados teclados muy ocheta. Repite en el estribillo eso de “Sois del planeta enano” y suena de miedo. Por cierto, que Reynaldo estará muy contento con la aparición al unísono de su disco del libro definitivo en castellano sobre Zappa, “Frank Zappa: La Música Se Resiste A Morir. Biografía No Autorizada” (Alianza Editorial) de casi 500 apasionantes y también divertidas páginas. Tenemos también tonos de swing-jazz en "La Tierra, Que Pena Das" y Manu Vicente aporta su composición, "El Capitán Espacial De Los Zapatos Verdes", en la que además mete su guitarra acústica. No podía faltar tampoco alguna voz de la habitual Rebeca Ibáñez, en este caso presente en "Tiempos de Reflexión, Tiempos de Equivocación". Precioso pop melódico, que suena a clásico de Randy Newman, asoma en una "Me Han Echado De La Wikipedia" que tiene una de las mejores letras realizados por el autor, y eso que muchas veces las clava. También es buena y con mucho humor y fina ironía la final "El Tonto de Platón en Plutón", rock setentero pero con buen estribillo pop riéndose hasta de Platón. En este tema tenemos además los mejores solos del disco del siempre “Cardinal” Manoel Macía.
Dice tener al menos otros 50 temas entre descartes, rarezas o temas para recopilatorios, y esperemos poder escucharlos algún día. Le estaremos esperando con los brazos abiertos jugando con nuestros “Cromos”, viajando por el “Cronos” y volando hasta su último “Cosmos”. Fantástica y más personal que nunca trilogía de despedida. ¡Hasta pronto, amigo!