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“Me encuentro mejor desnudo, es el verdadero traje del canalla”
Por: Javier González
Han sido meses intensos para Kike Turrón no cabe la menor duda. Afectado como medio país por la palabra ERTE, el de Hortaleza tomó la firme decisión de no cruzarse de brazos, lanzándose de lleno a la escritura, una de sus artes fetiche, dando los retoques finales a la biografía oral que firma a medias con su compadre Kike Babas, “Sol y Sombra: Los Rodríguez”, y dando forma a una maravilla en formato disco-libro titulada “Bailar, se trata de Eso”, un relato de absoluta libertad que nos roba el corazón al contarnos los sentimientos de dos personajes tan luminosos como son Ámbar y Ciro, en compañía de su actual banda, Turrones.
Ante tantas novedades y de tan buen tino, tuvimos que ponernos en contacto con Kike con objeto de dar un repaso por su actualidad más inmediata, la cual nos detalla, contradiciendo de camino aquella frase punk que decía “No Future”, puesto que nos deja con el colmillo retorcido anunciando novedades a no mucho tardar que esperamos con muchas expectativas.
¿Qué tal, Kike? ¿Cómo andas sobreviviendo a estos tiempos tan duros y convulsos como los que nos ha tocado vivir?
Kike: Reconsiderando y enfocando, sin pánico. Desde que entré en ERTE (la mitad de mi nevera lo llena eso) tengo más tiempo libre, y ese tiempo es más largo que antes. Si la música en directo ha parado, pues habrá que enfocar a otras facetas de la música que también controlo o donde me se defender: escribir, video realizar... hasta que volvamos a poder a ese formato. En definitiva, trato de exprimir más al cuentista que llevo dentro y sacar a relucir los años de oficio acumulados.
Desde fuera da la sensación de que pese a la incertidumbre no te ha dado tiempo a andar parado, durante este tiempo ha visto la luz vuestra biografía oral sobre “Sol y Sombra: Los Rodríguez” y “Bailar, se trata de eso”, un maravilloso disco libro que es toda una joyita. ¿No está mal para un tipo de barrio, verdad?
Kike: Pues hubo dudas, claro, para una cosa y para la otra, en lo que se refiere a lanzarlo a la venta, ¿será el mejor momento? ¿esperamos a que esto se pase un poco? Enseguida me di cuenta que esto no iba a ser cuestión de un par de meses, así que sacamos la bio de Los Rodríguez y la presentamos en el palacio de la SGAE con los mismísimos Rodríguez en persona... Con el cuento/disco que he sacado como Turrones, que se titula “Bailar, se trata de eso”, incluso me dio tiempo a componer, grabar y meter en el disco que acompaña al cuento... sí, la “Rumba libertad” es una de esas canciones del confinamiento. Por otro lado, debo apuntar que se cayeron otras muchas cosas que tenía programadas el pasado 2020 y que, por el virus, se cancelaron.
Vayamos por partes si te parece, comenzando por la biografía. Se nota que os habéis quedado a gusto con el libro de marras. Intenso, milimétrico, no exento de cierta polémica y que además ha servido para curar posibles heridas entre la banda. ¿Qué ha sido lo más difícil y lo más gratificante de llevar a cabo un proyecto así?
Kike: No es la primera bio que firmamos Los Kikes, creo que cada vez nos quedan mejor o espero que así sea. Esta bio tiene todos los ingredientes imprescindibles: sexo, drogas, muertos, rockanrol, desencuentros, descubrimientos, y sobre todo, ese final feliz que apuntas, el de haber curado ciertas heridas que no se habían cerrado bien entre los tres Rodríguez vivos... hicimos de diván para Ariel, Germán y Andrés y eso es gloria bendita y hace este trabajo más bonito aún si cabe. La primera edición se está agotando ahora mismo, ya estamos a punto de entrar con la segunda a imprenta, lo que significa que a la peña, también le está gustando, cosa que me alegra.
¿Cuál creéis que es la principal aportación que puede hacer dicha biografía a un fan de la banda?
Kike: Al ser una biografía coral, o sea, que la historia la cuentan los tres Rodríguez y además noventa y muchas personas que formaron parte de su entorno durante sus años de existencia: runner, técnicos, productores, compañeros de gremio, managers, y un largo etcétera, uno se da cuenta y tiene la oportunidad de poder ver que la verdad no es solo una. Creo que ellos, Ariel, Andrés y Germán, han puesto mucho alma, corazón y vísceras en sus declaraciones, y les ha encantado descubrir lo que opinaba o cómo les veía su entorno más cercano. Estoy seguro que el fan de Los Rodríguez que no tenga este libro no se le puede llamar fan ni mucho menos.
Os habéis currado mucho el texto y habéis buceado en la memoria de muchas personas, que para nada han dado opiniones políticamente correctas en determinados aspectos. ¿En algún momento hubo dudas de incluir algún pasaje?
Kike: Por nuestra parte no, más allá de quitar cosas que no viniesen al caso. Es una bio autorizada, es decir, hecha con el permiso de Los Rodríguez, de modo que antes de publicarla, les pasamos a ellos el texto final... Y la verdad es que no cambiaron ni una coma. Es normal que en una bio de verdad existan cosas políticamente incorrectas, enmiendas al pasado, y que, por supuesto, existan diferentes puntos de vista y versiones sobre un mismo asunto, como digo, la verdad no es única y si todos estuviesen de acuerdo es que todos mentirían.
Por otra parte, salváis de maravilla las ausencias de Julián Infante y Pato Zamora, imagino que eso habrá sido algo realmente complicado.
Kike: Imprescindible, más en el caso de Julián, que fue quién fundó la banda. Máximo respeto siempre en ese sentido, pues ahí sí que debemos ser los autores del texto quienes no caigamos en un amarillismo obsoleto o evitemos crudezas, las cosas fueron como fueron, pero en el caso de un muerto hay que tener cuidado y contrastar todo muy bien porque él ya no está aquí para defenderse.
Es un personaje que siempre me ha interesado mucho y más con el paso del tiempo. ¿Hasta qué punto es alargada la sombra de Julián Infante?
Kike: Cuando empezaron Los Rodríguez no eran ni mucho menos unos chavales advenedizos, en todos los sentidos (vida, música, drogas, amores) estaban de vuelta. Por lo que se ve, Julián mantenía una lucha constante con sus adicciones, y también, o en torno a eso, su vida alrededor era también en sintonía, un tanto caótica y caprichosa. Ariel también había pasado por lo suyo, pero imagino que ahí mandan las personalidades más que las sustancias.
Kike: El disco que acompaña al cuento, que son cuatro nuevas canciones y una revisión de una canción de King Putreak, hacen de banda sonora para el texto, para el cuento, así fueron pensadas, así fueron escritas. De todo eso que dices tratan las canciones del mismo modo que en el texto sale a relucir todo ello. Esas canciones no es que hablen de los protagonistas del cuento, los bailarines Ambar y Ciro, si no que hablan de lo que viven, sueñan y sienten.
“Diosecito” y “Como Tú” son el rock descarnado de toda la vida, mientras que el resto de compañeras, “Café de Flor”, “La Ingravidez (Cumbia del Alma)” y “Rumba Libertad”, en cierta manera nos muestran al Turrón más folclórico. ¿Con qué traje de canalla te encuentras a día de hoy más a gusto?
Kike: Está claro que algunos ritmos populares llaman mi atención y que soy del rock, de todo ese amplio racimo de posibilidades salen mis canciones, mis músicas. Yo me encuentro mejor desnudo, que es el verdadero traje del canalla.
Creo que la historia de Ámbar y Ciro es de lo más bonito que te he leído escribir. ¿Compartes la misma opinión?
Kike: Desde luego es la primera vez que escribo un cuento, quizá es que te gusten los cuentos, sea como sea gracias. Este cuento lo hice porque lo prometí como regalo a una colega y soy de los que cumplen promesas y les encanta hacer regalos. Nunca había hecho algo en este sentido, lo mío hasta ahora era más del tipo "yo y mi ombligo y las cosas que nos suceden", que me mola mucho, tipo Bukowsky o Knut Hamsun, realismo de barrio, algo muy entretenido... pero me acepté este reto a mí mismo.
Unas páginas que hablan de miseria económica pero que se contrapone con unas ganas de vivir y una sensación de libertad preciosa que surge a través del baile y de una capacidad de imaginar que no tiene límites.
¿Crees que falta mucho de eso en nuestros días? ¿Dependemos demasiado de los engranajes de ciertos mercados y de lo material?
Kike: Si, no solo falta, es que se está extinguiendo. Ámbar y Ciro descubren desde muy jóvenes que ellos son sus propios límites, que solo de ellos depende ampliar o reducir su felicidad, se la pela el dinero, el hambre, se la suda lo material, ellos solo quieren bailar y hacerlo mejor y más bonito, su propio baile. Son curiosos y audaces... lo que pasa es que el sistema (social, político, policial) no tiene cabida para este tipo de pensamientos y los condena, persigue y castiga por el propio hecho de ser.
Por si fuera poco, el libro está prologado por Benjamín Prado y Andrés Calamaro, con unas ilustraciones muy chulas realizadas por A Flaira. ¿Qué puedes contarnos de esas colaboraciones que son oro puro?
Kike: A Flaira es mucho más que una colaboración, es la mitad del libro, es quién ha creado las caras y cuerpos y los protagonistas, es quién hace que sea posible ver a los dos bailarines. A María la conozco desde que regentaba un bar en Malpica, A Roda, finales de los noventa, un bar precioso en el que, desde el váter, podías ver el mar. Un día vi que también pintaba y que lo hacía muy bonito, así que la propuse hacer esto y le encantó. No te quiero decir a mí cuando vi los resultados. Ha hecho unas ilustraciones preciosas, nadie mejor que ella podía haber captado la esencia del cuento.
¿Cómo podemos comprar “Bailar, se trata de Eso”?
Kike: Atendemos pedidos en: soyturron@hotmail.com, y también lo vende en su página la editorial: Ediciones Canallas.
¿Qué otros proyectos conjuntos andáis persiguiendo los Kikes?
Kike: Como he empezado diciendo, estos cambios a los que está obligando esta gripe nos obligan a centrarnos más que nunca en escribir... tenemos entre manos un ambicioso proyecto de biografías con el que llevamos ya trabajando medio año... en breve tendréis noticias.
Y a nivel individual, con el confinamiento pendiendo sobre nuestras cabezas de nuevo, ¿en qué andas trabajando Turronero?
Kike: Ensayamos menos por no decir nada, pero como decía Robe Iniesta: el exceso de trabajo no sustituye la falta de talento. Yo no paro de componer, siempre estoy con mis papeles, ideas, acordes, melodías... Tengo en mente, en breve, ir dando forma al nuevo pack de canciones... Y además, esta vez creo que voy a crear un poemario para que acompañe a esas canciones, voy en esa dirección, veremos que sale.
Muchas gracias por tu atención, ya sabes que eres uno de mis sinvergüenzas favorito. Un beso.
Kike: Otro, millón de gracias, besazo negro.
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