Por: Javier González
Fotos: Óscar Carriqui
Fotos: Óscar Carriqui
Quince años han transcurrido desde que Josele Santiago comenzara una más que notable carrera en solitario, dejando atrás el paraguas de Los Enemigos el madrileño se lanzó a la aventura, para seguir regalándonos canciones y letras marcadas por la personalidad de un autor cuyo signo más característico siempre ha sido su voz y la certeza de su prosa.
En estos días el artista capitalino anda revestido en novedad, la que supone la publicación de "Conde Duque en Directo", el primer trabajo grabado en vivo que firma con su nombre, donde encontramos a un Josele segurísimo en las labores interpretativas, secundado por una magnífica banda que arrastra las canciones hacia devaneos jazzísticos, sin por ello perder la esencia y el poso rockero de unos temas siempre brillantes.
Nos citamos con el artista en las céntricas oficinas capitalinas de Spanish Bombs, donde desde la cercanía y el humor más socarrón nos desentraña los secretos de otro trabajo brutal que nos devuelve una vez más al mejor de los Joseles.
Se cumplen quince años de tu debut como solista y pareces celebrarlo con "Conde Duque en Directo". ¿Cómo surgió la idea?
Josele: ¿Son quince años, ya? No me había dado cuenta. Realmente los discos en directo suelen responder a algún tipo de consideración de índole logística. Hace quince años, veinte, que te vas a separar o que vas a cambiar de rollo, pero ese no es el caso, palabra, porque no se me ocurrió a mí (Risas). Había fantaseado con la idea de hacer un directo más que nada por dejar constancia de la evolución de alguna de las canciones. Dejar grabados los cambios que en algunas canciones son bastante radicales. Además de demostrar los diferentes escenarios por los que he pasado como solista. Alguna vez he fantaseado con la idea pero no había pasado de ahí. De pronto me llamó Carlos Mariño, el jefe de Spanish Bombs, para que aprovechando el ofrecimiento del Conde Duque lo hiciéramos. Le dije que si estaba seguro porque hacer algo así vale una lana. Y él me dijo que sí, que había un compromiso para facilitárnoslo y tal. Evidentemente le dije que para adelante. Pero vamos que no fue idea mira, no se me hubiera pasado por la cabeza y menos en un escenario tan chiquitito, cuando para estas cosas se buscan otro tipo de recintos más grandes, porque aquí no teníamos ni técnico de monitores. Aún así ni qué decir tiene que yo estoy encantado con haberlo hecho.
¿De qué forma comenzaste a trabajar en el listado de cortes a grabar? ¿Cuál ha sido el método de selección de los mismos?
Josele: Como me puse a ello y no había manera de cuadrarlo, tomé la decisión de hacer el repertorio que estaba haciendo en aquella época, porque si no me vuelvo loco (Risas). Sin vacilar ni nada por el estilo, la realidad es que la semana que viene podría grabar otro disco con un repertorio totalmente distinto. Hay algunas fijas como "Ole Papa" y otras más, pero la realidad es que era realmente difícil ponerse a elegir. Tiré de pragmatismo. El repertorio que estábamos haciendo en ese momento era muy chulo, ya que veníamos de presentar "Transilvania", por eso quizás haya quien me acuse de que se me haya ido la mano al seleccionar temas de ese disco. De todas formas creo que el listado no va muy desencaminado.
Creo que el tema de formar una nueva banda te dio más de un quebradero de cabeza, ¿verdad?
Josele: Sí, hubo un cambio radical de banda a ultimísima hora, a dos semanas vista. Por suerte uno tiene una agenda de contactos más o menos amplia. Todo se solucionó rápido y con unas jornadas de ensayos maratonianas pudimos sacarlo adelante.
Visto desde fuera, suena a todo un salto sin red.
Josele: Había tocado con todos, a todos les conocía. Son grandes músicos de solvencia más que demostrada. Estaba preocupado pero solo hasta cierto punto, porque tenía confianza en lo que sabíamos hacer. Íbamos muy justitos de tiempo pero mira el resultado final.
En el disco se te nota muy seguro y mucho mejor interprete. Si te soy sincero, cuanto más escucho en directo, más creo que eres uno de nuestros mejores interprete, al menos de los más personales. ¿Hasta qué punto han sido importantes tus giras con David Krahe para que tu concepción de artista en directo haya cambiado?
Josele: Y las hechas con Pablo Novoa y yo solo, todas han sido importantes. Con eso que me dices ya me has alegrado el día macho. ¿Sabes qué ocurre? Que los acústicos curten mucho. Si bien es verdad que en primera instancia los motivos que nos llevaron a plantear giras en formatos más reducidos, hablo en plural porque es una situación que le ha ocurrido a muchísima más gente, más manejables y baratos fueron tristes luego han traído cosas buenas. La crisis hizo que no pudiéramos costearnos llevar una banda de acompañamiento lo que generó una vuelta a los bares. Esto sobre todo curte mucho vocalmente porque te obliga a dar la nota, ya que no tienes ningún instrumento tapándote. Los primeros son un desastre, te deprimes y todo eso, pero mira a partir del tercero, cuarto, la cosa va saliendo mejor. También es cierto que tuve un problema de cuerdas vocales que me obligó a operarme, por lo que tuve la oportunidad de orientar la rehabilitación hacia el canto. Me imagino que todo eso se notará bastante. Esos dos factores tendrán mucho que ver en la evolución. Ahora mismo me puedo permitir no solo estar pendiente de cómo sonamos sino también de cómo es mi interpretación.
Esto te lo dice alguien que es muy fan de Jaime Urrutia.
Josele: Yo también soy muy fan de Jaime. Me tengo por un entusiasta seguidor de su forma de cantar. El hecho de tener una forma de cantar identificable juega a tu favor. Me dicen que soy reconocible cantando, y ha habido mucha gente que se me ha acercado a contarme que han querido versionar un tema mío pero que no han podido conseguir. (Risas)
"Conde Duque en Directo" me resulta por momentos muy cercano al universo Mastretta y también al jazz. Es reposado y elegante aunque no exento de fuerza. ¿No sé si estarás de acuerdo?
Josele: Con Nacho aprendí muchísimo porque aquella fue la época de mi primer disco en solitario. Yo salía muy desorientado pero él me enseñó muchas cosas de las pocas que sé. Seguro que aquella influencia sigue vigente y se tiene que notar. En cuanto al tema del jazz sí que es cierto que escucho bastante en casa, aunque no me tengo por ningún experto, pero me interesa por la forma que tienen de jugar con los silencios. Viniendo de una banda de rock donde suele haber miedo al silencio te das cuenta que si vas a un concierto de jazz no ocurre eso. Ves al tío del saxofón tan tranquilo hasta que le toca intervenir. En una banda de rock duro es impensable. Como cantante es algo que se agradece y que le da forma a la canción. Nunca entendí ese pánico al silencio.
Aunque también tenéis arreones rockeros como la segunda parte de "Ole Papa".
Josele: Hombre, rockeros somos. El rock and roll está ahí, es la base de todo. Y además es mi escuela. No voy renegar nunca de ella porque me sigue encantado. Sigo escuchando mucho rock en casa.
Otra cosa a resaltar es que te has dado el gustado de contar con músicos invitados.
Josele: Aquí sí que hubo algo de conflicto porque yo era bastante reacio a meter invitados. A mí no me gusta ese rollo. No es que me disguste el hecho de contar con invitados, sino el de hacer duetos, se me diluye la canción. Algunos funcionan de puta madre pero no soy muy amigo de esto. El caso es que el jefe es muy persuasivo y acabé accediendo a cambio de que no me diera más la barrila. Lo único que le dije fue que me dejara elegir a quién invitar.
¿Cómo decidiste a quién invitar y cuáles fueron los motivos?
Josele: Johnny de Burning era obvio porque además venía de colaborar con él en un momento en que me vino muy bien. Me dio una joya como "Esto es un Atraco". Era la segunda vez que colaboraba con Burning, aunque la otra vez fue para el homenaje a Pepe Risi y canté "Chueca", era una canción que me encantaba porque yo viví en la Chueca pre-gay, hablaba de sitios que yo conocía, aunque luego descubrí que no era una canción de Risi sino de Toño (Risas). Volviendo al tema de la colaboración con Johnny, no me gusta usar esta expresión pero tenía que estar, ya que quería devolverle el favor. Bueno, realmente el favor me lo hace él a mí. Le ofrecí varias canciones pero me permití el lujo de aconsejarle "Tragón" porque creía que estaba hecha para él.
También aparece Jairo Zavala.
Josele: El tema de Jairo es una cuestión de admiración. Le admiro como compositor, cantante y instrumentista. Entonces fue de los primeros que se me vino a la cabeza, pese a que me daba bastante respetillo cantar con él ya que tiene un chorro de voz, parece José Alfredo Jiménez el hijo de la gran puta (Risas). Estar a su altura se me hacía cuesta arriba, al final quedó bien la cosa.
La cuota femenina queda inmejorablemente representada por Leonor Watling.
Josele: A Leonor la conozco desde hace años porque fuimos vecinos mucho tiempo. Me gusta su estilo y además tiene otra virtud que nadie resalta. Es una tía muy trabajadora, cuando todo el mundo suele resaltar su físico. Es una curranta y sabía que no me iba a defraudar. También tenía claro que le gusta lo que hago porque cuando éramos vecinos solíamos coincidir tomando café en el mismo sitio y hablábamos. Quería que hubiera una chica porque esto, fíjate, huele a gayumbo que apesta. Pensé en varias pero cuando me acordé de Leonor me dije a mi mismo "para de buscar".
De quedarme con una interpretación lo haría con lo contenido de El Niño de Elche en "Un Guardia Civil", sinceramente creo que corta el alma.
Josele: A El Niño de Elche, bueno a Paco, no le conocía. Es al único al que no conocía pero sí estaba al tanto de su obra. Me gusta la gente valiente y arriesgada. Se lleva la canción a un terreno acojonante. Además, debo confesar que no habíamos ensayado en el local porque él andaba liado. En la prueba de sonido no sabíamos muy bien qué nos íbamos a encontrar. Lo que nos encontramos fue algo maravilloso. Personalmente la disfruté muchísimo porque me encanta tocar para otros, algo para lo que no suelo tener muchas oportunidades. El hecho de apoyarle, ver dónde metía los acentos me parecío interesante. Como guitarrista no hago virguerías, lo primero porque no sé, además aquí no viene al caso, ya que es una canción de folk, así que lo que hago es seguirle. Al ser una letra muy concreta, no me cuadraba un dueto. Hablé con él por teléfono y le comenté que le hiciera a su aire. El viene del mundo del flamenco, que es más hippie, yo vengo de un entorno más cuadriculado que es el del rock. Creo que de la otra forma no hubiera funcionado, o quizás sí, vete tú a saber. Intenté que se sintiera cómodo y le gustara. Es una canción muy cinematográfica, lo suyo es que la cantara una sola persona.
Atendiendo a la selección de temas, encontramos cortes de todos tus discos en solitario. ¿A cuál de tus etapas te sientes más cercano? ¿A cuál te ha costado más encontrarle el pulso?
Josele: En realidad no me ocurre nada de eso. Hay un disco que me da rabia porque pagué la novatada de comenzar en una discográfica que es un mundo muy cerrado. Estoy hablando del primero que sacaba Javier Liñán con su discográfica, El Volcán, y es "Loco Encontrao". Es muy difícil de encontrar y hay muchísima gente que no sabe ni que existe. No tuvo buena distribución y no circulo para nada bien. Con éste la espina no es artística sino que es puramente logística.
El álbum tiene una presentación en formato disco-libro de magnífica elaboración. Con sus carboncillos e imágenes hasta cierto punto impactantes.
Josele: Te soy sincero si te digo que todo esto viene un poco impuesto. Yo no me lo esperaba tampoco así. El tema de editar un directo al uso parece que ya no se lleva.
La portada es brutal en el patio del cuartel del Conde Duque, da la sensación de ser la imagen de un condenado a punto de ser ejecutado a las seis de la mañana. ¿Has querido jugar con la sensación que tiene uno antes de ponerse ante el público?
Josele: La portada es una auténtica pasada. La idea es un poco jugar con la imagen de un condenado, un tipo al que van a fusilar. Entronca un poco con la idea del riesgo que representaba llevar a cabo este proyecto, esta grabación. El patio del Conde Duque se prestaba mucho a esto. Tiene una estética muy galdosiana. Yo sigo pasándolo muy mal los minutos previos a la salida al escenario, vamos que me cago (Risas). Siempre tengo mi fortasec cerca. Se me revuelven las tripas, me sigue pasando. Yo creo que es una muy buena señal porque de lo contrario sería un funcionario. Afortunadamente con el primer guitarrazo todo eso queda atrás.
A día de hoy compaginas tus discos en solitario con Los Enemigos, con sus respectivas presentaciones, con banda, en solitario y hasta en formato reducido con David Krahe. ¿Cómo lo compaginas? ¿No es difícil tener que escribir con la idea de una cosa y otra?
Josele: No me lo tomo tampoco así. No me siento a escribir canciones pensando en una cosa u otra. Aunque a veces sí que salen canciones muy obvias para uno u otro proyecto. Otras son ambivalentes y dependen del momento con quien toque grabar. Piensa que "La Otra Orilla" o "Desde el Jergón" podrían estar en cualquiera de mis discos en solitario. Del mismo modo que "Saeta" podría ser del repertorio de Los Enemigos. Dentro del rock en castellano creo que Los Enemigos somos de las bandas más abiertas, de hecho al principio la gente no sabía muy bien dónde encasillarnos, sobre todo en los festivales de antaño que eran más sectarios. El tiempo por suerte nos ha colocado en nuestro lugar y lo que era un inconveniente se ha convertido en algo positivo. Un as en la manga. Hay mucha gente muy buena que se quedó por el camino. Hay muchos factores que intervienen y entre ellos está la suerte. También hay que saber tener cintura, coño, y esquivar los golpes. (Risas)
Por cierto. ¿Cómo va el material Enemigo?
Josele: Está por mezclar. Pero sí que es cierto que estamos los tres muy contentos, Fino, Chema y yo. Bueno, los cuatro, contando a David Krahe, porque Manolo se ha ido definitivamente con Porretas. Ha quedado muy rockero, casi punk. A falta de conocer la mezcla, aunque conociendo a Carlos Hernández, va a quedar muy rockero. Su producción era algo que teníamos pendiente porque fue técnico de P.A. nuestro y estábamos pensando quién podría ser el productor. Siempre nos gusta tener un productor externo, más que nada para no acabar a hostias. A veces tenemos puntos de vista distintos y no es que nos peguemos pero perdemos mucho tiempo.
A Fino debe ser difícil mandarle a tomar por culo, es muy buena gente.
Josele: No te creas que es tan difícil. (Risas)
Josele, estamos preocupados, vives cerca de Barcelona y nos da miedo que te caiga un palo o un cascotazo. ¿Cómo estás viviendo la situación actual de Cataluña?
Josele: Llevo diez años viviendo allí. Tranquilo que no vivo en la ciudad y no creo que me caiga ningún cascotazo. La situación me parece una puta mierda. No entiendo nada. Yo me fui allí a vivir en 2010, pues desde 2012 hasta ahora no entiendo nada. No soy capaz de meterme en la piel de ninguna clase de patriota y mira que lo he intentado. No me levanto cada mañana pensando en qué bandera me representa. Y en cuanto a los que manejan el cotarro no manejan nada, están más hasta el cuello de mierda que cualquier otra cosa. En un país que la mitad de la gente tiene falta de servicios de urgencia cercanos a su población, en el que no hay trabajo y la sanidad pública se va a la mierda que tengamos esta pantomima es demencial.
Hablemos de cosas más serias. ¿Cómo ves al Atleti este año?
Josele: He dejado de ver el fútbol. No me interesa una mierda. Un domingo sí y otro no, voy a ver al Moncada C.F. Creo que el fútbol se lo han cargado. A pesar de eso te diré que los del Atleti somos del Atleti aunque ya no nos guste el fútbol. Ahora se lo han llevado del barrio, así que no nos queda nada. Ya solo queda una grada.
Lo último de calidad que vimos allí fue el concierto de McCartney, aunque muchos le acusen de blandito, manda cojones.
Josele: Fue la hostia. Fino fue y dice que flipó. Ya quisieran muchos ser cómo él.
Con lo bien que se te da la escritura, ¿nunca se te ha ocurrido escribir un libro?
Josele: Estoy escribiendo un libro pero voy todavía por el comienzo. Trata sobre cosas mías, anécdotas. Sobre todo me ha costado dar con una estructura original. No quería una novela al uso. Hay saltos en el tiempo y demás. Creo que puede estar bien.
Por nuestra parte es todo, mil gracias, Josele.
Josele: Gracias a vosotros.