Por: Txema Mañeru
Ha pasado ya algo más de un año desde que en Universal comenzaron a “celebrar” el que hubiera sido el 50 Aniversario de la carrera de uno de los mejores músicos irlandeses de la historia , junto a Phil Lynott (Thin Lizzy) y The Pogues. Lo hicieron de la mejor manera posible, con la gran mayoría de su obra fantásticamente reeditada con buenas remasterizaciones y jugosos extras. Una obra que cuenta con más de 30 millones de compradores de sus discos. Nos trajeron todos los imprescindibles que grabó en vida, pero también algunos de sus más que estimables discos póstumos. Comenzando por su debut en solitario del año 71, “Rory Gallagher”, una joya absoluta, o con el que para muchos es su mejor disco, “Tattoo” del 73. En directo era una máquina absoluta y la mejor prueba es la versión doble ahora reeditada de su "Irish Tour ‘74”, sin duda alguna, uno de los mejores discos en directo de la historia. Recomendaciones personales y especiales también para “Calling Card” (76), “Top Priority” (79), “Jinx” (82) o el muy completo doble disco póstumo de 2011, “Notes From San Francisco”, con un compacto en directo y otro en estudio. La gran mayoría de estos trabajos aparecieron también en cuidadas reediciones en vinilo. Entre los póstumos queremos recomendarte el extenso doble “BBC Sessions” del 99. Un total de 22 canciones distribuidas en un primer compacto titulado “In Concert” y un segundo llamado “Studio”. Para los fans estamos hablando del mejor disco que se ha publicado de él en los últimos 20 años.
Este honorífico título de mejor obra póstuma puede pasar a ser ahora para este “Blues”, sobre todo en esa versión DeLuxe, con un triple compacto y con 36 canciones con su gran combinación entre blues acústico y eléctrico, a menudo con sus logrados toques de jazz. Además algunas actuaciones en directo son realmente una pasada total. Estamos hablando de material inédito en casi un noventa por ciento, algo que ningún seguidor esperaba a estas alturas. Entre ellas hay un montón de sesiones especiales con grandes músicos y amigos, pues Rory nunca se vendió ni se prestó a tocar con nadie por motivos estrictamente pecuniarios. Algo que le honra totalmente y por lo que ha sido tan apreciado después de sus dolorosa pérdida, además de por su gran legado musical, claro. Le podemos escuchar así junto a su ídolo, Muddy Waters, o con Albert King, Jack Bruce, Lonnie Donegan o Chris Barber. Todo esto incluyendo material que va desde 1971 hasta el 1994, fecha en laque falleció. Sí, se cumple ya un cuarto de siglo, pero nunca lo podremos olvidar. El álbum también tiene edición en doble LP, con 16 canciones, al igual que la de un único compacto.
Yo, personalmente, te recomiendo, además de la vinílica, la edición del triple compacto. Podrás gozar así de una gran distribución que consiste en un primer compacto eléctrico, un segundo acústico y un tercer para las bombas en directo. Sumado a una preciosa presentación en cuádruple digipack con un currado libreto de 20 páginas con montón de fotografías inéditas y un estupendo y extenso texto a cargo del muy premiado escritor de blues y rock, Jas Obrecht.
Es imposible detenerse en todos los temas. Pero tenemos jugosos outtakes de discos como el inicio rompedor con "Don't Start Me Talkin", de las sesiones de “Jinx”, o el estupendo lento "Nothin 'But The Devil", inédita de las sesiones del álbum “Against The Grain”, en la que también destaca el piano de Lou Martin. Buenos resultados logra también con "As the Crow Flies", sacada de las sesiones de uno de sus trabajos cumbre, “Tattoo”. "Should’ve Learnt My Lesson" es otro fascinante lento del “Deuce”, y se saldrá con la mandolina en el ‘Leaving Town Blues’ de Peter Green para su disco tributo. El primer compacto se cierra con una gran grabación para la radio del 72 de su poderoso “Bullfrog Blues”. Todo esto solo en el “Disco Eléctrico”.
En el segundo, el "acústico”, hay más jugosos outtakes de ensayos y varias grabaciones para emisiones radiofónicas que son pura magia y sentimiento. Parece un negro cantando "Who's That Coming" del “Tattoo”. Poderosos boogie blues también en acústico con "Secret Agent". Viaja hasta el Delta del Mississippi con el "Bankers Blues" de Big Bill Bronzy. Lo borda con la slide en "Whole Lot Of People", del “Deuce” del 71, y pone un genial final con una inédita "Walkin 'Blues" de Son House, pero más conocida por la interpretación de Robert Johnson.
La guinda al pastel la pone un tercer compacto en su hábitat natural, el escenario. Con un fantástico sonido en la mayoría de las actuaciones, comienza con tres inéditos de su concierto en el Apollo de Glasgow del año 82. Explosivo inicio con "When My Baby She Left Me2, una apasionante revisión del clásico "Nothin' But The Devil" y extensa, fulminante y lenta "What In The World" de Willie Dixon. Ya con esto sería la hostia. Pero es que hay más, como cuando borda el "Messin' With The Kid" arañando su Stratocaster en el 77. Del mismo concierto de Sheffield, encontramos una maravillosa "Garbage Man Blues", con genial piano de Lou Martin. Salvaje resulta "All Around Man" de Bo Carter y espectacular junto a Jack Bruce ("Born Under A Bad Sign"). Mejor aún cuando cede el protagonismo en "You Upset Me" a Albert King. Guapo trombón en "Comin’ Home Baby" y buenas, aunque no necesarias, explicaciones habladas de Rory en la despedida con "Rory Talking Blues".
¡Ojalá en un futuro próximo nos puedan satisfacer con alguna obra más de esta calidad y con tanto y tan buen material inédito! ¡Eso, además, significará que Rory Gallagher sigue vivo en muchos corazones y hogares de todo el mundo!