Por: Clara López Vallejo
En los veinticinco años que lleva en pie, el Festival Internacional de Benicàssim ha ido cambiando su enfoque contando con diferentes estilos musicales en su repertorio. Aunque trata de quedarse siempre dentro del entorno Indie, tan amplio como éste puede llegar a ser, y aunque suele predominar en él la presencia de grupos de origen británico, durante estos años son muchos los grupos y estilos que han visto el mundo a sus pies desde el conocido escenario Maravillas.
El cartel de la edición de 2019 puede parecer a primera vista menos atractivo que el de ediciones pasadas, pero hay que destacar que este año lo grande del FIB no son solo los cabezas de cartel. Merece la pena este año echar un buen vistazo a la letra pequeña y acercarse a escuchar esos grupos que no llaman tanto la atención por el gran tamaño de sus caracteres pero que tienen, no obstante, mucho que ofrecer.
El jueves el festival apuesta sin lugar a dudas por la música electrónica con Fatboy Slim. Para aquellos que prefieren otros estilos, Kodaline y Marina son buenas opciones para dar comienzo a la fiesta.
El viernes el cartel da un pequeño cambio de contenido. Empezamos con Belako. Traídos desde Eusakadi, Belako es una apuesta segura para los apasionados del punk con guitarras eléctricas y matices psicodélicos. Con sus letras que hablan de un cambio social y ritmos acelerados, Belako lleva desde 2011 creciendo y ganándose la confianza de un público cada vez más apasionado. Ése mismo día, La M.O.D.A, con sus melodías desenfadadas harán sentir al público que se avecina un gran festival. The Hunna aportan al viernes ese trocito de indie británico que, por supuesto, todo FIB debe tener. El plato fuerte del día viene por la noche: Lana del Rey aporta al día el toque pop que cada vez triunfa más en los festivales veraniegos.
El sábado encabezan el día Kings of Leon, pero hay muchos artistas antes a los que es vital acercarse a ver aunque sea al menos unos minutos. Blossoms repiten este año en el cartel, tras haber formado parte del mismo también en 2017. Indie con guitarras mezclado con dream pop que incita a bailar y a corear sus letras. Yellow Days es algo más relajado pero tiene también mucho que ofrecer, y trae desde Surrey matices psicodélicos que los más nostálgicos no pasarán por alto. También de Surrey, pero con unas melodías deliberamente más rockeras, You Me at Six merece una escucha. Aunque desentona un poco con la habitual línea del festival, La Zowi aporta al FIB ése toque trapero por el que ya se ha apostado otros años. Y, por supuesto, Carolina Durante, que ha visto crecer su fama de forma exponencial a lo largo de los últimos meses, es un "must".
Vetusta Morla y Franz Ferdinand ponen fin al festival el domingo, pero antes hay un par de grupos para los que hay que tener unas reservas de energía aunque se trate del último día de música. Para los que se decantan por el rock, George Ezra es una apuesta segura que trae sonidos nuevos a un género que no cesa de renovarse. Matices de blues y folk inundan los temas del británico, que tiene, además, un gran talento a la hora de transmitir su música al público, tal y como ha demostrado recientemente en el festival Glastombury. Destacan también Black Lips, más rock pero traído esta vez de Estados Unidos y aproximándose mucho al garage rock y al punk. Los grupos nacionales tienen también peso en este último día y son la mejor forma de continuar con la fiesta. Cupido, otro de los grupos cuyo nombre es cada vez más conocido y que mezcla de forma fresca e innovadora la música trap con matices indie merece definitivamente una visita.
Veinticinco años después de su primera edición, el FIB se ha convertido ya en un elemento clave del verano para todo amante de la música. Este año tendrá lugar del 18 al 21 de julio, en Benicàssim, por supuesto.