Entrevista: Marea

"Yo no creo en la inspiración, sino en las ganas de hacer las cosas, hace más el que quiere que el que puede” 

Por: Sergio Iglesias 


Marea han vuelto. Siete años después de terminar su última gira, los de Berriozar regresan con "El Azogue", un disco en el que la banda navarra mantiene sus señas de identidad: textos cargados de poesía, melodías potentes y, sobre todo, actitud. Este nuevo trabajo será presentado en una extensa gira en la que se comprometen a tocar en todas las provincias del estado en lo que poddría ser la última oportunidad para verles en activo. Para hablar sobre este nuevo trabajo, hemos tenido la oportunidad (y el placer) de charlar con el gran Kutxi Romero.

Para comenzar, una pregunta obligada: ¿Por qué parasteis hace más de seis años y por qué volvéis ahora? 

Kutxi Romero: Pues es algo muy sencillo y muy complejo a la vez; nosotros no somos un grupo al uso porque, para nosotros, la música es algo secundario que llega cuando nuestras cinco situaciones personales y nuestras vidas están perfectamente equilibradas. A partir de ahí, nos juntamos para tocar sin saber si van a salir canciones y, posteriormente, si salen canciones, hablamos de grabarlas y de hacer una gira… imagínate la de astros que se tienen que alinear para que todo eso suceda, así que por eso es tan difícil. Nosotros no somos profesionales en ese aspecto porque nunca hubo un proyecto con los Marea y lo que es increíble es que hayamos hecho tantos discos… o a lo mejor, precisamente por eso lo hemos podido hacer, porque nunca hubo un proyecto y sigue sin haberlo. 

Ahora este disco llega algo más tarde de lo que debería; acabamos en 2012 la última gira y dimos un paso atrás hasta finales de 2015, que empezamos a juntarnos de nuevo para tocar; pero lo que pasó fue que entramos en los 40 años como se entra en los 80, con una serie de desdichas catastróficas que hizo que a Alén le operaran unas cuantas veces del corazón, Kolibrí tuvo una otitis que se convirtió en una infección terrible y a mí me salieron unos pólipos de los que me tuvieron que operar, por lo cual 2016 se fue a tomar por culo. Ya en 2017 nos pusimos a ello con fluidez pero sin matarnos, hasta que hicimos 13 canciones y decidimos grabar estas 10… Como te decía, así de sencillo, pero así de complicado porque, insisto, nosotros para hacer algo tenemos que estar todos guay porque yo no creo en la inspiración, sino en las ganas de hacer las cosas, hace más el que quiere que el que puede y eso es así de toda la vida. 

¿Crees que esa falta de presión y tomarse el grupo como un divertimento puede ser la clave de vuestro éxito? 

Kutxi Romero: Exactamente, tío. A mí me preguntan si tengo trabajo y yo siempre digo que no, que a mí me pagan por ejercer mi hobby… es como si a ti te gusta el gimnasio y un día viene un tío y te dice “¡qué bien levantas las pesas!, cada vez que pase por aquí te voy a dar 20.000 duros por hacerlo”… de puta madre porque yo iba a hacerlo igual, o cuando te ponen una tapa con la caña (risas).

Entiendo, por lo que me decías antes, que ahora habéis sacado este disco, vais a hacer la gira, pero nadie sabe lo que va a pasar después con el grupo ¿no? 

Kutxi Romero: Pues sí, lo más probable es que desaparezcamos y que no volvamos a aparecer… aunque lo mismo dijimos la última vez y aquí estamos. Ojalá volvamos a aparecer, pero cada vez es más complicado volver a la escena porque el tiempo va pasando y, a partir de los 50, no sólo en la música, sino en la vida, lo único que se hace es el ridículo, toda persona que siga viva después de los 50 es un verdadero idiota… pero yo quiero transformarme en uno ¿eh? (risas). 

Durante estos siete años, habéis estado ligados a la música de una u otra forma, pero ¿qué cambios habéis notado en este tiempo en la industria musical? 

Kutxi Romero: Industria por ponerle un nombre… nosotros somos de la vieja escuela, del pleistoceno, y vemos que ahora la música se consume de otras maneras. Pero tampoco creo que sea para tanto, porque una canción es una canción, se escuche en un iphone, en un CD, o en un vinilo, no hay máquina que haga canciones guapas porque, para eso, es necesaria la sensibilidad y eso todavía no lo tienen los aparatos. Aparte, nadie en el mundo sabe cómo se hace una buena canción, simplemente sale un día y no sabes cómo… es maravilloso que sea tan intangible el rollo de la música y por eso es el arte supremo. 

Pero como toda la vida, cada vez el mundo gira más deprisa y todo es más efímero, más de usar y tirar, y la gente ya no consume discos, que sólo nos gustan a la gente de la vieja guardia, que lo vemos como una obra en sí misma desde la portada hasta el sonido; ahora la gente se hace sus listas de reproducción y se ha democratizado más el asunto y la gente no escucha discos enteros, sino que puede escoger los temas que quiere y decir “ya no me tengo que comer tus mierdas de artistazo, esta sí, esta también, esta para tu prima (risas)”. Pero, aunque a nosotros todavía nos gusta el concepto de “álbum”, por lo que me cuentan, cada vez es más habitual gente que va sacando canciones sueltas mientras sigue tocando y tocando para que no pare de funcionar la máquina registradora… allá cada cual, yo no soy juez, soy cantante de rock and roll. 

Centrándonos en “El azogue”, siempre que se hace un disco supongo que la intención es hacer el mejor trabajo del grupo, ¿lo habéis conseguido? 

Kutxi Romero: Yo creo que sí. Como tú dices, yo no he oído todavía a nadie, y llevo unos cuantos años en esto, que vaya al estudio diciendo que va a hacer un disco de mierda (risas). Yo pienso que nos ha salido un disco muy muy muy bueno y es con el que más contentos nos hemos quedado los cinco en toda la historia del grupo… con eso ya es suficiente. Dentro de unos años igual la percepción es distinta pero, como te digo, nunca nos habíamos quedado tan contentos, sí que cada vez que sacábamos un disco, evidentemente, para nosotros era el mejor hasta ese momento, pero nunca nos habíamos quedado los cinco satisfechos al 100% con el resultado por pequeños detalles o matices, pero con este sí. 

Después de tantos años sin entrar juntos en el estudio habéis asumido el riesgo de grabar el disco en directo, ¿por qué tomáis esta decisión? 

Kutxi Romero: Yo, al principio, era reticente… pero esto fue una cosa de Kolibrí que, finalmente, me demostró que era una idea cojonuda. Hicimos cinco tomas de cada tema y fue una gozada porque el batería ya graba con el grupo y no tocando con un cencerro, el bajista y el guitarrista ya no graban sólo escuchando una batería… ya no estás grabando, estás tocando, y esa magia de tocar juntos se nota y está de puta madre. No hay ningún artificio ni ninguna trampa y eso se va a poder ver en el directo, porque yo veo entrevistas de algunas bandas que dicen “el disco ya está hecho, ahora a ver cómo lo llevamos al directo”… pues para eso es mucho más sencillo llevarte un directo al disco ¿no? (risas). 

Bueno, eso es lo que debería ser el rock ¿no? 

Kutxi Romero: Totalmente, eso es el rock: directo, con sus imperfecciones y con sus grandes virtudes, que son muchas. 

En cuanto a las letras, como siempre, encontramos mucha poesía, la seña de identidad de Marea… 

Kutxi Romero: Sí, ahí no hay mucha sorpresa, es mi interpretación de los sentimientos como letrista y que yo creo que ya es muy identificable después de tantas y tantas cosas que he hecho; es mi manera de contar las cosas y parece que a la gente todavía le sigue atrayendo, con lo cual mi hijo está muy contento porque va a poder ir a la universidad (risas). 

También hay varios homenajes en forma de canción como “Pájaros viejos”; dedicada a todos esos cantaores que tanto te han influido… 

Kutxi Romero: Más que influir, que eso seguramente lo han hecho otros, es un recuerdo a todos los que han sentado las bases de lo que es el flamenco, porque he metido al gran revolucionario que fue Morente, a Farruco, Paco de Lucía, algunos copleros, poetas… gente que todavía no había nombrado en mis discos, donde siempre hay guiños al flamenco que tanto me apasiona. 

Tampoco te olvidas de grandes del rock como Rosendo y Robe, presentes en “Jindama”... 

Kutxi Romero: Eso es, como dicen los hijos de puta de VOX, “vamos a dejar las bases claras desde el principio” (risas). Entonces, hay que dejar claro que el que no respeta a sus mayores no merece la vida, por eso me apetecía pegar un golpe en la mesa y dejar claro que la ciencia llegó desde Plasencia y Carabanchel porque nosotros siempre mostramos respeto absoluto a los manantiales de los cuales han salido estos ríos y me pareció que son los dos grandes genios de esto. Robe porque fue el que, verdaderamente, dignificó la literatura en castellano en el rock, si a Sabina le sacamos de la ecuación del rock propiamente dicha porque, aunque yo no soy muy “sabinero”, reconozco que, probablemente, sea el mejor letrista en castellano que ha habido. Y en cuanto a Rosendo, todos los que nos dedicamos a este segundo oficio más viejo del mundo, que es hacer de titiriteros, queremos ser de mayores como Rosendo y llevar una carrera con esa honestidad y esa calidad y humildad hasta que se ha jubilado, es para rezarle todos los días y no sé cómo todavía no hay una religión “rosendiana” (risas). 

 ¿Y ahora que se ha jubilado, qué nos queda? 

Kutxi Romero: Eso le dije yo después del último concierto: “¿Y ahora qué hacemos los demás, so cabrón?” y me dijo: “yo me independizo y me voy de casa, ahí os quedáis” (risas). 

Bueno, todavía quedáis unos cuantos ¿no? 

Kutxi Romero: No te creas que quedamos tantos, Rosendo se ha jubilado, Extremoduro no se sabe qué va a pasar con ellos, El Drogas ya ha pasado a transformarse en un género en sí y él mismo dice que no quiere hacer una cruzada por el rock and roll, él ya es un “artista” en el sentido positivo, ya superó la barrera del rock hace años para ser un músico y hacer lo que le salga de los cojones, que bien merecido lo tiene, porque es un currela como pocos, un trabajador incansable… Platero y tú no existen, Los Suaves tampoco… ¿y el relevo? yo me doy la vuelta y no encuentro a nadie a quien pasarle el testigo y que más quisiera yo, porque Marea seguimos siendo el eterno relevo y llevamos así 21 años, así que está claro que algo está pasando con el rock and roll; no quiero echar la culpa a la creatividad, a los nuevos, a si hay más o menos oportunidades… no lo sé porque no soy Nostradamus ni Iker Jiménez, pero el hecho es que seguimos siendo “los jóvenes2 de esto y a mí me da mucho que pensar. 

Y en medio de todo esto, Evaristo anuncia el regreso de La Polla Records… 

Kutxi Romero: Pues sí, que vuelva La Polla es una alegría, por lo menos para mí, que considero a Evaristo una de mis grandes pasiones por su integridad y por su manera de defender toda la vida su postura con argumentos, porque es un tío muy cultivado e inteligente. Me parece muy bien que hayan vuelto y que hayan vendido 200.000 entradas, pero que tengan que venir unos señores de 60 años a llenar pabellones y a lanzar el mensaje más contemporáneo de todos los jóvenes que hay ahora mismo diciendo cosas… yo creo que eso también dice mucho de esta sociedad, es algo muy significativo de cómo está el patio, y da todo para un debate. 

¿Y no resulta llamativo que vuelvan precisamente ahora, en el peor momento para la libertad de expresión y en el que muchas de las canciones que hicieron La Polla estarían prohibidas?

Kutxi Romero: Ahora, si Evaristo sacara “Salve”, estaría en la cárcel mañana mismo y no pasaría nada. Lo peor es que se está normalizando todo y que están consiguiendo lo que quieren como lo han hecho siempre: infligiendo miedo. Lo peor que puede pasar no es la censura, porque hijos de puta y censura siempre han existido, lo peor es que nos hacen sentir culpables por tener pensamientos propios y por lanzar nuestros mensajes de libertad, nos hacen creer que lo que tenemos que hacer es autocensurarnos y lo verdaderamente grave es que se normalice esa autocensura. 

Extremoduro, Barricada, Los Suaves, Platero y tú… como hemos dicho, estos grupos ya no están, pero los que sí están y, además haciéndose de oro, son esos “grupos tributo”... por lo que te he leído en otras entrevistas, casi mejor no hablar de esto ¿no? 

Kutxi Romero: Lo que quiero es dejar claro, de una vez por todas, que ya vale con la tontería, porque esos sí que son como el VOX del rock ad roll, no se entiende que sean legales, que tengan sus seguidores y lo mejor que se puede hacer es, tanto al partido político como a estos grupos y sus seguidores, no mostrarles ningún respeto, porque son cómplices del asesinato, al igual que los promotores que les ponen ahí. Que no me vengan contando cuentos, porque no se puede justificar de ninguna manera. Es como cuando me hablaban de la piratería, tú te pirateas los discos porque son gratis ¡y punto!... a mí me da igual, porque lo que yo quiero es que se escuche mi música, pero que no justifiquen la piratería porque los discos son caros porque, normalmente, el que me venía quejándose del precio de los discos, estaba hasta arriba de cocaína… eso sí que es caro, colega, que cuando compras un disco tú has pagado 15 euros por dos años de mi vida, así que no me digas que cuesta mucha pasta. 

Los dos últimos homenajes de los que vamos a hablar son los que hacéis al gran Poli Díaz en el vídeo de “En las encías” y a la gente de Berriozar en “El temblor”… 

Kutxi Romero: Sí, el de Poli era evidente porque era el resurgir y la vuelta al combate de Marea y cuando hice el guion pensando a qué actor poner dije “¿por qué no poner al boxeador, al resiliente máximo, al ave fénix…?”. Fue un poco complejo localizarle, pero el tío hizo un trabajo súper profesional, está limpio, en forma… muy muy bien, la verdad es que se portaron bastante peor colegas nuestros que han salido en el vídeo (risas). De hecho, a raíz de aparecer con nosotros, creo que le están saliendo otras cosas y me alegro muchísimo porque la verdad es que descubrí un tío muy generoso, un tío de barrio que, para nada es un juguete roto porque hablaba abiertamente y conscientemente de lo que ha sido su vida… un verdadero resiliente y un guerrero.

¿Y Berriozar? Pues nosotros siempre tenemos presente nuestro pueblo, somos “berrionalistas” y por eso hemos sacado ahí a nuestros colegas y lo hicimos en la Plaza Marea, que no todos los días le ponen a uno una plaza con tu nombre y eso es la hostia… aunque, si esperan un poco, casi nos tienen que poner una plaza de aparcamiento para minusválidos (risas).

Supongo que estarán contentos en el pueblo con la vuelta de Marea ¿no? 

Kutxi Romero: Los del pueblo ya sabes que son unos cabrones. Como los Marea somos cuadrilla y nos juntamos casi más cuando no estamos de gira que cuando estamos por ahí, los de Berriozar siempre están “¿pero no os juntáis para hacer algo, que estáis todo el día de cena y de comidas con los niños?”. Así que, cuando se enteraron de que habíamos entrado a grabar, nos decían “joder, os habréis deslomado, ocho años para hacer un disco, por lo menos tendrá cien canciones”… la gente del pueblo, tío (risas) 

Para terminar con “El Azogue”, destaca la importancia que dais a aspectos ajenos a la música como el diseño y el arte… 

Kutxi Romero: Como te decía antes, la vieja guardia pensamos en que haya una conexión en todo, desde la portada hasta las ilustraciones del interior, incluso a que no haya faltas de ortografía en las letras, también me gusta que todo esté muy bien puntuado para que se puedan leer como poemas sin escuchar las canciones, y ahí me ha echado una mano Iñaki Uoho, que es un tío con unos conocimientos de gramática increíbles. En cuanto al arte, tenemos a Iosu Berriobeña que es un artistazo que dibujó lo que le sugerían las letras, y de puta madre porque está igual de loco que yo (risas). 

¿Hay ganas de empezar a presentar en directo estos nuevos temas? 

Kutxi Romero: Llevamos dos meses preparando el repertorio con esa inquietud que siempre hay antes de empezar y la verdad es que está todo muy bien programado y la gente lo va a disfrutar; además, estaremos en todas las provincias para que el que no nos vea, no pueda decir que es porque no hemos tocado cerca de su casa.