Por: Txema Mañeru
¡Dos músicos, dos discos, dos aciertos totales, dos dianas en nuestros sentimientos! Dicho esto tengo que decir que no me gusta el nombre de este dúo porque creo que puede desorientar sobre la música lograda y las historias serias que nos cuentan en sus trabajadas y particulares canciones. Pero bueno, esto no deja de ser mas que una anécdota porque lo que realmente importan son las canciones. Conocía al dúo formado por Alberto Octavio y Paco Barco con su espeluznante debut del año pasado, "Palabras Para Flores y Serpientes". Me pareció una gran combinación entre la pureza y apego a las raíces de Los Hermanos Cubero, junto a los aromas fronterizos de Calexico pero en castellano. Buena prueba de esta mágica combinación la ponían canciones como "Árboles y Ruinas", con su fascinante historia, o "Las Mesas de la Mundial" con más aires latinos aún. También había preciosa baladas para fans de Andrés Calamaro o de Ariel Rot como "Olvido" y un final prodigioso y emocionante como sigue siendo "Lo Que Queda En La Cuneta", con frases tan cargadas de sentimiento como "Seguir la dirección de los que nunca han llorado".
La verdad es que tienen sentencias y momentos musicales mágicos que te pueden llevar hasta el llanto. Los vuelven a tener en un espléndido "Venganza" (Kint Música / Red Shoes) que llama la atención desde su magnífica presentación. La portada es el cuadro del mismo título, lleno de serpientes y flores coloristas, de Mercedes Bellido. La idea era hacer un EP en torno a esta obra, pero el proyecto fue creciendo, la inspiración no dejó de crecer y así han creado un segundo LP con canciones totalmente nuevas. Otra decena de ellas para seguir amándoles y con las que caer nuevamente rendidos a sus pies. Desde la venganza se marcan unos textos que tratan sobre la soledad, la incomunicación y la depresión, pero que también aportan varios momentos para la esperanza. Andan ya presentándolo y puedes enterarte de próximas fechas o conseguir sus discos en www.canichemacho.com.
Comienzan con "Los Invitados" diciéndonos que algo se había quebrado. Al igual que ellos son capaces de quebrar nuestros sentimientos. Tienen un punto Corcobado y otro del gran Pablo Und Destruktion. Luego llega el single de adelanto con el título de "Trinidad" que realmente es un crudo relato sobre la depresión y en el que vuelven con ese estilo cantautor fronterizo entre Jackson Browne, Ry Cooder o los ya citados Calexico. Tienen buenas ayudas instrumentales y mejores aún, vocales. Es el caso de "Breve La Humedad" en las que los coros engrandecen una melodía dirigida por el piano de Alberto. En "Félix Palmer" tenemos la gran voz de Javier Álvarez y unas guapas guitarras gatillo entre Johnny Cash y Willie Nelson. Gustará tanto o más a los fans de Los Hermanos Cubero que a los del propio Javier Álvarez.
"La Luz" es un genial y emotivo lento y deja paso a la solemnidad de "La Nueva Ciudad". En este tema o en otros momentos como "Motivos Para Matar" nos acordamos mucho y para bien del estupendo disco de Nick Cave, "Murder Ballads", por arreglos y temática. De hecho, "Motivos Para Matar" es un dueto con Ariadna de Los Punsetes que puede evocarnos a los de Cave con PJ Harvey o Kylie Minogue. En "2000" se sumergen de nuevo en territorios aún más oscuros que vuelven a mirar hacia Asturias y hacia artistas personales como Nacho Vegas o Pablo Und Destruktion. Tras "Huang", basada en una leyenda urbana y que estará en la banda sonora de "El Vampiro Chino de Usera" llega el solemne y grave colofón de más de 6 minutos con "El Caos y La Transformación". Final ideal y algo épico con un fabuloso y emocionante in crescendo que supone todo un grito de esperanza. El cambio es posible. Caniche Macho quizás no sea un nombre demasiado apropiado pero han vuelto a hacer un disco para estar entre los mejores del presente año.