"Tres minutos dan para contar muchas cosas"
Por: David Marsé
Suena a frase obvia, pero sí, estamos ante una banda que transmite "solo" el espíritu primigenio del rock and roll, pero nos gusta, o nos encanta. Los Penúltimos son precisamente eso, un conglomerado de todos esos ritmos que saltan a la mente al escuchar este tipo de sentencias. Tienen rhythm and blues, pub rock, rock, blues.. y algunas cosas más. Esas otras más que también se ocultan entre la aparente sencillez -en forma y fondo- de unas nuevas canciones que cogen "Carretera y manta" para dirigirse hasta todos aquellos que quieran disfrutar de los trepidantes viejos sonidos. La voz de la banda, Ernesto Ulibarri, es quien nos desvela aspectos del proyecto..
Este nuevo disco me ha transmitido la sensación de que ha ampliado algo su sentido musical más “negro”, no sé si es algo que habéis tenido en cuenta o si incluso creéis que se percibe esa sensación...
Ernesto Ulibarri: No, no es premeditado, aunque sí que es verdad que hay unas cuantas canciones de este disco que remiten directamente a clásicos del blues.
"Carretera y manta" mantiene la tradición de ser un disco relativamente corto, conciso, ¿se trata de una característica de la banda o es algo que sale así?
Ernesto Ulibarri: Crecimos escuchando vinilos, la mayoría de ellos de diez u once temas. La llegada del CD permitió ampliar contenidos, tanto en lo musical como en lo gráfico, y muchas veces se ha utilizado esa posibilidad rellenando con farfolla. Preferimos mantener la atención del oyente y dejarle con ganas de más.
Vuestro sonido pone el virtuosismo siempre al servicio de un sonido directo y contagioso. Dedicándoos a un sonido que suele ser proclive a extenderse, a caer en exhibicionismos, ¿es algo que no os gusta o no os parece lo adecuado para el formato disco?
Ernesto Ulibarri: No, no nos gusta, no está en el ADN del grupo; tres minutos dan para contar muchas cosas. No quita que en directo pueda haber momentos de darnos el gustazo de alargar un solo, si la ocasión lo requiere.
Sois un grupo que sonáis a las puras raíces del sonido americano pero también mostráis influencias de bandas que adaptaron a su terreno esa tradición, ¿de qué manera compagináis en vuestro resultado final clasicismo y actualidad?
Ernesto Ulibarri: Pues por intuición más que nada. No hay que olvidar que los sonidos clásicos en su momento fueron novedosos, y hoy en día se sigue haciendo muy buena música. Basta con afinar el oído.
Unos de los conceptos que define al grupo es su espíritu festivo, divertido, lo que es, supongo, también la reivindicación de la mejor tradición en ese sentido del rock n roll frente a un, en muchos momentos, elitismo que solo parece respetar aquello más rebuscado y "elaborado"…
Ernesto Ulibarri: ¡Pero si es que luego ese elitismo suele ser la cosa más simplona, rutinaria y obvia del mundo,! De cualquier buen blues te puedes tirar el pisto hablando de polirritmia y ambigüedad tonal, pero lo único que verdaderamente importa es que te haga mover las caderas.
Por otro lado "Busco un nombre (para una canción)" parece toda una declaración de intenciones con frases como "no tiene sentido callar, sigo cantando mi penar”", ¿también vuestras canciones son el resultado de una mirada reflexiva e interior?
Ernesto Ulibarri: Las canciones tienen que surgir de la necesidad de ser cantadas, como si estuvieran agazapadas esperando que alguien las descubra, tanto las más frívolas como las más "profundas". Esta canción surgió del estado de ánimo colectivo provocado por la gran crisis del 2008, que tanto nos afectó a todos. Ante aquella avalancha de miedo, lo primero era sacar pecho y reclamar dignidad.
"Aguilar de Campoo" expresa buena parte de esa tradición del sonido americano en forma y fondo… No hay complejos a la hora de situar toda esa iconografía en territorio castellano..
Ernesto Ulibarri: Las carreteras que realmente hemos recorrido y vivido están en la península; cantarle a otras sería impostura.
Adaptáis en "No aguanto más" a Elmore James, ¿por qué esa elección? ¿de alguna forma simboliza su música el espejo más certero de Los penúltimos, abarcando desde el blues al rock and roll..?
Ernesto Ulibarri: Ya nos gustaría, ya. ¡Qué bueno era el cabrón en todo! Como cantante, guitarrista, compositor y líder de banda. Sí, podría ser un buen espejo, que no el único; de todas formas, la canción nos eligió a nosotros. Pregúntale mejor a Elmore...
Un tema como "Deriva Continental" parece inspirada por la nostalgia típica de la canción italiana, ¿no solo del sonido americano se nutren Los Penúltimos?
Ernesto Ulibarri: Los ritmos jamaicanos, el folk irlandés, el folk de aquí, el flamenco, el son cubano y la salsa en general, el rebético griego, etcétera etcétera ¿Quién en su sano juicio le puede decir que no a todo eso?
En "Feliz cumpleaños feliz" tiráis de una muy trágica ironía, ¿el humor negro es otro ingrediente de la banda?
Ernesto Ulibarri: Somos más de ironía suave, pero los excesos también molan...
Una banda como Los Penúltimos, de qué se manera se organiza, quiero decir, ¿pertenece a todas esas bandas que el hecho de no vivir de la música les supone un trabajo extra importante para compaginar grabaciones, giras..?
Ernesto Ulibarri: Siempre es un esfuerzo, tenemos que compaginar con nuestros trabajos y familias y andar arañando tiempo. Pero se hace con gusto.
¿Y os veis abocados a autoproduciros o es un camino elegido libremente?
Ernesto Ulibarri: Nadie ha llamado a nuestra puerta, y a las pocas que hemos llamado no nos han respondido. Por otro lado, estamos cómodos así. Vamos, que hemos elegido libremente a la fuerza.