Entrevista: Boni

"Estamos anestesiados y bastante acostumbrados a las barbaridades"

Por: David Marsé

Tras la disolución de una de las bandas esenciales para comprender el rock -en su faceta más áspera- en castellano en las últimas décadas como era Barricada, uno de sus principales integrantes, Francisco Javier Hernández, más conocido como Boni, emprendió su camino en solitario. Ahora, con "Réquiem por el mundo",  presenta ya lo que es su tercer disco bajo ese nuevo status. Un álbum que mantiene ese característico sonido de los navarros callejero y crudo pero que no aparta ni las melodías ni concepciones más contemporáneas. Hablamos con su creador para conocer mucho más acerca del mismo...

"Réquiem por el mundo" llega tras tres años desde tu anterior trabajo, ¿ha habido una dedicación especial en estos temas o ha sido una simple cuestión de tiempo?

Boni:  Intenté sacarlo un poco antes, de hecho ya en julio del 2017 estaba todo preparado para entrar a grabarlo pero entre afianzar la banda y tomar la decisión de dónde y con quién grabarlo, llevó su tiempo. Si que le he dedicado una especial atención a la composición al igual que hice con "Incandescente", no me gusta correr cuando quiero dar forma a un trabajo que va a quedar para siempre en los oídos de quien me sigue, por eso no miro el reloj cuando estoy construyendo canciones. 

Estamos ante lo que es tu tercer trabajo en solitario, ¿a estas alturas ya te ves como el líder de un proyecto propio o todavía hay algo en ti de ese concepto de ser miembro de un grupo? 

Boni:  Sigo teniendo el concepto de banda, principalmente porque en el rocanrol lo que manda es el directo, aspecto que siempre me gusta cuidar, con lo cual rodearte de gente que te responda es vital para sentirte como una piña delante del personal y mostrarte sólido. Otra historia muy diferente es a la hora de componer, aquí sí soy yo quien lidera por dónde pueden ir los tiros, letras, acordes, o qué logo utilizaré, dónde ensayamos, cómo quiero afrontar el directo, etc. En esto más que líder soy el responsable…   

El disco lo has hecho a medias con el productor e instrumentista Jagoba Ormaetxea, ¿Buscabas en dicha colaboración la mezcla entre juventud y veteranía exacta para darle  a tu estilo de siempre una adaptación más contemporánea? 

Boni:  Lo que sí fue a medias es la producción que se realizó en aproximadamente un mes entre la supervisión de las canciones, grabación, mezclas y masterización. El grueso compositivo me llevó casi seis meses hasta dar con lo que quería para poder trasladarlo al estudio muy trabajado. Hasta que decidí con quién lo iba a grabar, no tenía claro de qué modo podía tratar lo que para mí son buenos temas. Lo primordial, que eran las canciones, estaban hechas y eso me tranquilizó como para decidir con paciencia. Tanto la oficina como la compañía, que lógicamente escucharon la maqueta, me propusieron buscar a alguien que supiera tratar estas canciones. Fue entonces cuando entra en escena Jagoba quien me demostró cómo trabaja además de ser un músico excelente, cosa que aproveché para las tomas de bajo y batería incluyendo algunos arreglos de guitarra. Efectivamente, el complemento dio frescura al proyecto, además de la implicación que tuvo con el trabajo en su totalidad. No dudaría volver a contar con él.  

A lo largo del disco se pueden observar temas con un importante valor melódico ("La trinchera", "Con razón corazón", "De hierro tu coraza") al igual que otros de una extrema dureza ("Legajos", "En su boca como el hielo", "Chulo"), ¿querías mostrar ambos extremos como definición de tu sonido? 

Boni:  Tal vez sea mi manera de hacer canciones, donde intentas que cada tema tenga su personalidad. Dentro de mi estilo musical, me gusta evitar la monotonía. Puede ser una manera de mostrar las dos caras de una misma moneda, que no surge premeditadamente y sí con espontaneidad, no temo a hacer cosas dispares si ello me satisface musicalmente. 

El único medio tiempo que decelera el ritmo del disco es "Esclavitud", ¿otro matiz que también querías introducir? 

Boni:  Me gusta crear ambientes musicales cuando considero que se necesitan. Es un juego compositivo muy interesante para mí. Hay canciones que van desde un principio claras y directas, pero en el caso de "Esclavitud" la temática me pedía un pulso como el que tiene. Una premisa que tengo a la hora de elegir este tipo de composiciones es que no pierda fuerza y tenga mucha carga emotiva. 

Las colaboraciones con las que cuentas en el disco son de renombre, Rosendo, Kutxi y Pedro de La Fuga, ¿has buscado precisamente rodearte de músicos afines en lo personal y musical? 

Boni:  He querido contar con ellos por diversas razones.. Cómo no Rosendo es un referente para mí, poder contar con él ha sido redondear una apetencia, además de tener en este disco su característica manera de tocar, todo un lujo. Las letras de Kutxi siempre me han gustado y tenía la canción destinada para que estampara en papel lo que él quisiera. Teniendo en cuenta que es muy cercano y dispuesto, no quise desaprovechar la oportunidad de compartir un poco de rocanrol con Romero. A Pedro le debía una invitación que no rechazó. Tener su voz en un tema de este disco, que estaba claro podría encajarle bastante bien, aportó también su frescura, aparte de ser un tipo genial. Con gente así da gusto compartir canciones. La casualidad me hizo un pequeño guiño juntando a cuatro generaciones en un mismo barco. 

"Lobo malherido" la dedicas al poeta Marcos Ana, ¿qué tiene su figura que te ha inducido a reivindicarla hoy en día? 

Boni:  Extremoduro en sus inicios incluyó en una de sus canciones un poema de Marcos Ana, "Decidme cómo es un árbol". En "Lobo malherido" trazo las sensaciones que me provoca un personaje como Fernando Macarro Castillo, su verdadero nombre. Vivió en sus propias carnes los rigores del franquismo muy joven como militante revolucionario y como persona, llamándome muchísimo la atención la actitud que tuvo ante tiempos tan difíciles y que sin embargo, tanto en sus primeros días de libertad como ya en su madurez, no mostró ni un atisbo de rencor y sí una actitud constructiva con su pensamiento y poesía. Lo convertí en lobo porque la figura de este animal para mí representa la fidelidad, protección y defensa de su entorno. Los estamentos oficiales ponen medallas a personajes de dudosa honradez, yo le pongo una canción a quién creo que debiera ser un referente en todos los planos. 

Si sumamos al mencionado "Lobo malherido" otro tema como "De hierro tu coraza" parece claro el interés por reivindicar esas figuras anónimas y luchadoras de la historia.. 

Boni:  Creo que son historias y personajes, que aunque ya van saliendo a la luz, han estado mucho tiempo en la sombra. Hay muchas cosas de las que aprender de esas vidas, para mí son protagonistas totales. Cada vez que topo con un acontecimiento o relato relacionado con gente que ha luchado anónimamente me sugiere muchas cosas como para hacer una canción. Soy de los que pienso que los relatos oficiales han aprovechado ese anonimato para meterlo debajo de la alfombra histórica. Estos homenajes a modo de canciones es mi reconocimiento desde lo más humilde de mi persona a quien yo considero un ejemplo. 

Hay un par de canciones como "La trinchera" o sobre todo "Chulo" que reivindican el no rendirse y seguir en la brecha, toda una declaración  de principios, supongo…

Boni:  Son canciones de ánimo y con algo de autocrítica, sacando lo bueno y lo malo de uno mismo, pero dejando evidencia del empeño en seguir, aunque la mochila cada vez esté más llena de recuerdos, ilusiones y proyectos, por eso lo llamo rockanrol. 

En el tema homóniom cantas: "Cuando un músico es acusado por cantar con desparpajo", una frase  por desgracia de nuevo de actualidad. Vivimos  malos tiempos para la lírica pero solo para algunos por lo que parece… 

Boni:  Quién lo diría, siglo XXI... De hecho eso es lo que perturba, que pasen por los juzgados las canciones… Muchos grupos antes más han pasado por ello, la lupa y los filtros no descansan para la gente que tiene como forma de vida la música. Más delito veo que un político te mienta en campaña y lo siga haciendo desde el poder que le otorgan los votos, jugando con la vida de millones de personas. 

¿En este réquiem hay espacio para la esperanza? 

Boni:  Siempre, más aún después de ver la reacción del mundo femenino en este último 8M, eso da mucha esperanza y con el deseo de que no se diluya. Por ejemplo esta demostración de fuerza me da esperanza. El título tiene cierta ironía, a grandes rasgos voy describiendo hechos muy generales pero que están incrustados en la sociedad mundial, es una obviedad, pero estamos anestesiados y bastante acostumbrados a las barbaridades, eso da un poquito miedo. Decir que el mundo está loco... no quiero dar a entender que está todo perdido, al revés, si tenemos que estar locos que sea por vivir, para gozar o solidarizarnos, no para aniquilarnos silenciosamente. 

Y a la hora de llevar al directo un trabajo de estas características.. ¿cuál es el plan? 

Boni: De entrada muchos ensayos para ser contundente en la escena y, por otro lado, incluir íntegro este nuevo trabajo para darle salida, en "Incandescente" hice lo mismo. Luego se va seleccionando qué funciona o qué no, también vienen conmigo los temas de Barricada junto con algún detalle del "Peligroso animal de compañía", que también tienen su sitio en este repertorio. Con todo esto pretendo llegar más o menos a las dos horas de directo. Tenemos algunas próximas fechas  como Madrid, Gurrea de Gallego (Huesca), el Bull Music de Granada, Cadrete (Zaragoza), Leyendas (Villena) y las que quedan por confirmar, que no pare ¡no es mal plan!