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Entrevista: Surfin' Bichos

"'Hermanos carnales' es un disco hijo del extremo"

Por: J.J. Caballero
Fotografía: Toni Villar

No todos los días se tiene la oportunidad de charlar con un personaje histórico del rock independiente de este país. Alguien que ha escrito algunas de las mejores y más osadas letras, muchas de ellas aún por descifrar, en cada una de sus encarnaciones artísticas que son la misma en esencia. Fernando Alfaro, líder además de proyectos tan fantásticos como Chucho y dueño de su propia carrera en solitario que está a punto de dar un nuevo fruto como él mismo nos confesó al final de la entrevista, es el alma de unos Surfin' Bichos igual de míticos (una palabra recurrente que a él no le gusta demasiado) en gira por la inmejorable causa de tocar íntegramente en directo un álbum casi perfecto como fue aquel "Hermanos carnales" que puso patas arriba los conceptos musicales de mucha alma cándida que aún hoy sigue sin entender la revolución que supusieron en un mundo aún no tan dominado por las radio fórmulas. Con él hablamos horas antes de actuar en Córdoba, una de las recientes paradas de una gira igual de mítica. Y perdón por la reiteración.

Os saca de gira la recreación de un disco mítico como ‘Hermanos carnales’, y la etiqueta de “mítico” se la ponemos nosotros porque no sabemos, aunque lo suponemos, si vosotros también lo consideráis especial por lo que significó en su momento. 

Fernando Alfaro: Antes te oía decir que si yo a mí mismo me consideraba mítico y no, porque te imaginas por ejemplo yendo al cuarto de baño y no eres muy mítico ahí (risas). No quiero comparar “Hermanos carnales” con un cuarto de baño, pero es cierto que tampoco fue muy cotidiano. Mítico por lo menos por el tiempo en que pasó, por lo que significó ese disco para nosotros y para la gente en su momento y después, porque es un disco que creció luego con el tiempo, y eso que ya en su día tuvo su impacto. Sí que tiene un carácter como especial ese disco, es verdad. En toda nuestra discografía y particularmente dentro del total de la mía es de los señalados por la razón que sea.

Echando la vista atrás, a veinticinco años vista de su publicación y aunque el tiempo pasa muy rápido, ¿recuerdas cuáles fueron las motivaciones, los hechos vitales o emocionales que te llevaron a escribir esas letras y componer esa música que hoy significan tanto?

Fernando Alfaro: En realidad a la hora de componer las canciones o escribir yo las letras es lo de siempre, una especie de necesidad extraña, supongo que una mezcla entre diversión y miedo a la muerte, una cosa así (risas). Y por decirlo suavemente, intentar ligar. Lo que hacemos todos los que hacemos música, por escapar un poco del pantano. Es cierto que ese disco en concreto lo que sí que tiene son motivaciones especiales en su concepción, es decir, a la hora de hacer un disco reuniendo todo y poniendo toda la carne en el asador. Canciones que yo tenía desde hacía tiempo las traje al grupo entonces, porque además era el momento, el grupo había crecido emocionalmente. Lo emocional influye mucho en nuestra relación musical, y también técnicamente; de repente éramos un grupo que nos sentíamos capaces de cualquier cosa, de tocar lo que fuera. Si era una bossa nova tocábamos una bossa nova, si era un tema ultraambiental como "Harto de tu amor" pues también, si queríamos power punk extremo también. Es un disco hijo del extremo, en el sentido de que yo como decía quería poner toda la carne en el asador por circunstancias personales, en el grupo nos sentíamos con ganas de hacerlo y ya era como una especie de poder. Es un disco que me gusta por el punto extremo que tiene.

¿Por qué se ha mitificado un álbum que en su día no fue tan apreciado? Aunque llegó a sonar en sitios como los 40 Principales, lo cual hoy puede resultar bastante paradójico.

Fernando Alfaro: Bueno, eran los tiempos de Nirvana y todo eso que estaba sonando en los 40 Principales y tiene un poco de sentido en ese contexto. No era tan raro… (silencio) Bueno, sí era raro (risas), pero no tanto, eran los años en que la industria musical que entonces era poderosa todavía pues vio que había un crossover de ciertas bandas, encabezado por Nirvana pero había más, que de repente abrían el campo y traían como aire fresco a lo que era el propio mainstream, entonces en esa lógica un poco psicópata entramos los Surfin Bichos.

El espíritu de aquel disco se ha mantenido hasta el extremo de que hoy en día, y aunque después vuestros seguidores nos enganchamos a Chucho, Mercromina y las respectivas carreras posteriores de los miembros de la banda, sigue siendo algo muy especial y se podría decir que su germen sigue estando ahí, en todo lo que habéis hecho después. Sobre todo en tu caso.

Fernando Alfaro: Sí, somos nosotros. Igual que lo que hace cada uno de ellos: Burrito Panza, Joaquín… No es que se parezca, porque además concretamente Joaquín, aunque somos los dos, cada vez se parece menos a lo que hacíamos Surfin Bichos, pero se nota en ese espíritu que formábamos parte de algo. Hemos formado y formamos una especie de hermandad y se nota, yo veo conexiones y yo me siento muy cerca de lo que ellos hacen. De siempre, además. Y les pasa igual a ellos.

La gira de 2006 fue ya un intento de reunión, pero en principio parecía tener principio y final. ¿Aquel momento fue el detonante para este?

Fernando Alfaro: Hicimos una gira de reunión pero claro, con carácter temporal. Desde el principio queríamos hacer una serie de conciertos nada más, y esta que estamos haciendo ahora tiene un carácter parecido. En este caso todavía con más razón digamos, y es la celebración de los veinticinco años de “Hermanos carnales”. Por lógica, y como todas las fiestas pues tiene que acabar, incluso las fiestas gitanas acaban.

¿Fue una propuesta directa de la discográfica, os plegasteis a la llamada masiva de los fans o sentisteis la necesidad de volver a salir a la carretera con una excusa tan bonita?

Fernando Alfaro: Sí, había como presión por parte de los fans e hicimos un poco empujados por esa presión una serie de canciones juntos una vez que coincidimos Mercromina y Chucho, hace un par de años en el Contempopránea, y ahí ya fue un poco el germen. Luego yo a veces he explicado que lo que ya me lanzó a proponerlo al resto del grupo y hacer esta celebración fue cuando vi a Patti Smith con su banda prácticamente original tocando el "Horses" entero y me pareció genial, que tenía super vigencia todavía. Es un poco lo que nos inspiró más en el último momento a hacer esto de tocar este disco entero, que además resultaba exigente para nosotros, porque en primer lugar hay canciones que no tocábamos ni llegamos siquiera a tocar entonces cuando se presentó el disco. Era el tercer disco, teníamos material de sobra de los discos anteriores y tal, lo típico, los temas más tranquilos o más íntimos acaban cayendo del repertorio y terminas tocando lo más directo del anterior y del nuevo, eso suele pasar. Hubo canciones que tocamos poquísimo y otras que ni siquiera habíamos tocado, y ahora tocamos el disco entero, es súper exigente con nosotros y con el público también.

Esa es una gran novedad y un aliciente extra para veros ahora en directo.

Fernando Alfaro: Mola, es muy montaña rusa. Antes te decía que es como de extremos el disco, y lo es. En ese abanico de palos musicales si quieres, o de tempos o intensidades y tal, se mueve el concierto también. Lo que se dice siempre en estos casos de montaña rusa de emociones.

Has citado una palabra clave en la música: vigencia. Por el carácter de las letras sobre todo y por ese citado espíritu perturbador de vuestras canciones, ¿podrían ser Surfin` Bichos, hablando en presente, hijos de nuestro tiempo?

Fernando Alfaro: Sí, porque es como si hubiésemos estado hablando de una especie de mundo paralelo que sigue estando presente, sigue siendo real, una especie de realidad que no tiene demasiado que ver con el tiempo. Siempre están las cuestiones coyunturales, por ejemplo el escándalo que tenía la gente entonces con algunas de nuestras letras, y hablo del primer disco. Con "Malaventuranzas" a mí me sorprendía, me acuerdo, que se escandalizara tanto la gente, cuando en la motivación interna de la canción, en su acción inicial, no estaba el escandalizar. No sé si me explico, porque yo no entendía que resultara escandaloso eso, para mí era poético lo de esa canción que decía, según la gente, barbaridades. Hoy en día ya la gente está muy desvirgada de barbaridades, entonces no resulta así, pero la canción para mí sigue igual de vigente que entonces en mis motivaciones. De hecho es una canción que ahora no la tocamos porque tocamos el "Hermanos carnales" pero la he puesto como ejemplo, y con canciones de este disco pasa igual. Creo que sí siguen vigentes, tienen como una vida interna diferente a la coyuntura.

Recuerdo la primera vez que se escuchó "Gente abollada", que incluso sonó también en radiofórmulas, que hubo mucha gente que se echó las manos a la cabeza diciendo que era poco menos que una apología de las drogas o del suicidio. Era como remover un mundo interior que muchos tenían y tienen pero que vosotros erais de los pocos que os atrevíais a soltarlo.

Fernando Alfaro: Sí, luego nos hemos acostumbrado más pero, como decía, a mí me sigue afectando cero (risas) tanto entonces como ahora. Quiero decir, en ese aspecto o esa lectura digamos política o de realidad seguramente habrá canciones que hoy día si se ponen a mirar con lupa con ciertos remilgos políticamente correctos seguramente nos pongan a caldo. No voy a dar ideas ni voy a decir cuáles, pero seguramente las habrá. No lo sé, se me ocurre. Igual que entonces me la soplaba, hoy día también. Por razones diferentes, pero también (risas).

Volviendo al presente y saliéndonos ya del tema de la actual gira, tú tienes también una extraordinaria trayectoria con Chucho y tus propios discos en solitario y suponemos que una necesidad de seguir atendiendo a ambos proyectos. ¿Tiene visos de continuidad la vida musical de Surfin Bichos teniendo en cuenta que no hay disco nuevo?

Fernando Alfaro: La idea era y es hacer esta gira de celebración, y estamos celebrando el disco y los veinticinco años. De aquí a equis meses cuando acabe la gira, que durará lo que dura una gira, un año o año y poco, empezamos en mayo y estaremos hasta mayo del año que viene supongo o cuando sea, acabará la celebración. Seguiremos cada uno con lo suyo como seguimos aún, por cierto, que estamos a punto de sacar nuestros proyectos todos.

¿Podemos decir que se avecina el próximo disco de Fernando Alfaro entonces? 

Fernando Alfaro: Sí, sí, y el de Burrito Panza también lo tienen grabado, y Joaquín también está empezando a grabar ahora. Tenemos nuestras propias locuras personales cada uno. Hombre, nunca se puede decir “de esta agua no beberé”… Bueno, a veces sí se puede decir (risas), pero lo que quiero decir es que no, esto es así y así nos lo planteamos, era una celebración y volver a tocar juntos, que nos apetecía. Hemos seguido con mucha relación en todos estos años y no hay planteamiento de ensayar.

Ojalá el próximo ensayo juntos sea para celebrar el tropecientos aniversario de "Fotógrafo del cielo" por ejemplo, que tampoco estaría mal.

Fernando Alfaro: La verdad es que sería chulo porque es un disco también al que le tenemos mucho cariño.