Por: Txema Mañeru
La verdad es que me resulta algo difícil explicar porqué me gusta tanto la música y los discos del canadiense Chad Vangaalen. El caso es que le llevo siguiendo prácticamente toda la última década. Especialmente desde que fichó por el prestigioso sello de Seattle, Sub Pop, que aquí distribuye la gente de Everlasting / Popstock! Este luminoso y cargado de información, "Light Information" es ya su sexto disco para el sello que puso el grunge en el mapa musical. Quizás su trabajo más completo hasta la fecha, o al que más cariño tengo, sea "Diaper Island", del 2011, pero la verdad es que no tiene un solo disco flojo. En ellos tenemos el mejor pop lo-fi más o menos psicodélico, momentos más folk y siempre, todos ellos, prácticamente creados al completo por él en solitario. Incluso se encarga de los guapos art-works con los que engalana los habituales y ricos digi-packs, así como las ediciones en vinilos de carpeta doble. Además es productor de grupos como Women o Alvvays y ha dirigido coloristas y originales vídeos para Strand Of Oaks, Dan Deacon, Shabazz Palaces o sus compañeros de sello y paisanos, los fantásticos y salvajes punks, Metz, que por cierto acaban de entregar un pletórico tercer disco titulado "Strange Peace", grabado por Steve Albini y del que hablaremos en futuras reseñas como se merece.
En otras ocasiones hemos aludido a referencias como Pavement, Bob Dylan o Neil Young, pero esta vez Vangaalen ha ampliado su paleta de colores mucho más. Últimamente ha sido padre en dos ocasiones y se ha encaprichado con antiguos y analógicos sintetizadores como el Korg 770. Por estos nuevos caprichos quizás este disco suena más ochentero que nunca y la dark wave o la cool wave, e incluso momentos techno pop, campan por los surcos de un disco que comienza con una preciosidad absoluta como es "Mind hijacker's curse". Locura cálida y con su psicodelia lo-fi pero con una magia a lo The Cure por la relativa oscuridad y el poderoso bajo marcando el ritmo. Luego entran sus teclados aportando más luz y unas destacadas guitarras. "Prep piano and770" es un misterioso instrumental para una inquietante película de terror psicológico y sigue por ahí con "Host body", aquí ya con su voz en falseto, una buena guitarra rítmica y otros guapos arreglos ya no tan lo-fi.
Y es que ha mejorado hasta su habitual sonido en este trabajo. En "Mystery elementals" tiene la única colaboración instrumental del disco con el bajo de Ryan Bourne que le acompaña en su viaje a su pop alocado con aromas a Julian Cope. Vuelve a sonar arrebatadoramente cool wave en "Old heads" y un ritmo entre New Order e incluso Joy Division. Su lado más sucio y punk sale en "Golden oceans" y su faceta pop a lo Soft Boys regresa con "Faces lit". A continuación llega la joya del trabajo para mí y una de las canciones del año. Se titula "Pine and clover" y es un estupendo lento de arrebatadora melodía y fantásticos coros doblados en el guapo estribillo. Finaliza con el tema de aromas más techno, "Static shape", en el que casi se acerca a la luminosidad de The Human League. Transformación tremenda que hace que ahora mismo no sepa si este va a ser, a partir de ahora, mi disco favorito de Chad Vangaalen. ¡Y es que de él me gusta hasta su futbolístico nombre!