Por: Txema Mañeru
¡Quizás lo mejor de este disco sea lo inesperado del mismo! El gran Alejo Stivel fue cantante y líder, junto a Ariel Rot, de los inolvidables Tequila. Vivió la vida de la fama y del rock’n’roll hasta el límite, pero vivió para contarlo y para gozarlo. Luego se convirtió en un cotizadísimo y comercial productor con cientos de trabajos, muchos de gran fama y popularidad.
El caso es que ahora ha querido hacer un disco a base de canciones propias y la verdad es que se nota las ganas que ha puesto en él. De hecho afirma haber puesto la ilusión de un principiante. Aunque es un gran seguidor de los Rolling Stones le ha quedado un disco muy americano. Gran parte de culpa la tiene la genial y omnipresente pedal steel guitar de Al Perkins, un monstruo del instrumento que ha tocado, sí, con los mismísimos Stones, pero también con Bob Dylan y The Byrds.
Por supuesto que él mismo se ha encargado de la buena producción, en la que además ha contado con un equipo de músicos y cantantes de casi veinte personas. De las mezclas se ha encargado Carlos Raya (Fito & Fitipaldis, M Clan) y la masterización la ha hecho en Nashville Richard Dodd, conocido por sus trabajos para Tom Petty, George Harrison y The Travellin’ Wilburys.
Como no podía ser de otra forma abre el disco con un pedazo de single como es "Yo era un animal". En él recuerda los buenos viejos tiempos y suena muy Rolling Stones, a la vez que Loquillo y Tequila. Ya brilla la pedal steel guitar de Perkins y el piano de un genio como es Luis Prado (Señor Mostaza, M Clan). El estribillo es goloso de verdad. "A tus pies" es un excelente medio tiempo muy romántico que recuerda a los Tequila cuando iban de ese pelo. Los aires country son indudables en una "Rubia" muy Calamaro. En "París con aguacero" se nos muestra feliz con sus goteras y con otro buen estribillo y el piano de Prado. Cierra la cara A (el disco saldrá en vinilo) con otro precioso lento que recuerda a los de nuevo Tequila y Andrés Calamaro, se titula "Dos en una". Aquí resuenan cálidas las guitarras acústicas y el violín de Diego Galaz.
La cara B comienza con la denuncia de "Ni una menos" junto a la rapera argentina Miss Bolivia y sigue mejor todavía con un precioso dueto junto a Guada Álvarez, con un guapo violín y fantástico solo del ya varias veces citado Perkins. En la desenfadada y pegadiza "Tocar y tocar" tiene hasta un guiño a sus-mis adorados The Clash. Tampoco podía faltar un tema futbolero como "Balones y palabras", donde aprovecha para juntar un all star total en el que entran Pete Thomas, Mauro Mietta en los teclados y los M Clan Ricardo Ruipérez y Carlos Tarque, que mete sus coros en algún tema más. Se despide con "La Biblia y el Calefón" en el que colabora en la composición Joaquín Sabina.
Quiero hacer especial mención a que, además de las estrellas invitadas, le acompaña su banda de directo, en la que brilla especialmente con las guitarras su paisano Julián Kanewski, habitual acompañante de Calamaro pero con muy buenos discos de blues bajo su propio nombre. Este verano hubo conciertos aniversario con los Tequila, ahora también quiero ver a Alejo defendiendo estas buenas y muy “americanas” canciones.