Texto y fotografía 2: Javier Capapé
Fotografía 1: Ana Benito
¡¡Puro Espectáculo!! Eso es lo que Sidonie nos ofrecieron a todos sus seguidores congregados una vez más en Zaragoza. Sin duda, una de las bandas más potentes en directo de nuestro país.
Hace menos de un año que el trío catalán había realizado uno de los últimos conciertos de su gira “Sierra y Canadá” en nuestra ciudad y a pesar de ello el público estaba deseoso de verles de nuevo en el escenario para saber qué nos ofrecerían esta vez al presentar su más reciente disco “El Peor Grupo del Mundo”. Y de un disco redondo salió un directo casi perfecto. Poco más de hora y media de verdadera energía y total entrega con su público donde pudimos degustar ampliamente su nuevo disco junto a una buena selección de sus mejores canciones abarcando casi toda su discografía.
La noche, incluida dentro del ciclo San Miguel Music Explorers, empezó con la potente “Os queremos” para mostrar su faceta de fans, como todos los congregados en la mítica Sala Oasis zaragozana. Las revoluciones no bajaron, pues encadenaron seguidamente sus éxitos “Nuestro baile del viernes”, “Costa Azul” y “Sierra y Canadá”. El trío (convertido en quinteto para sus presentaciones en directo) daba buena muestra así de que su repertorio está perfectamente ensamblado y sabe encadenar potentes temas pasados y presentes. Y evidentemente estábamos ahí para escuchar cómo sonaba ese último disco, al que volvieron con “Siglo XX”, que como dijo Marc era su canción favorita del mismo. La provocación de “Yo soy la Crema”, los ecos psicodélicos de “Fascinado” y la ligereza de “Atragantarnos” nos llevaron hasta el momento más íntimo de la noche. Marc Ros se quedó sólo para interpretar “Los Coches aún no vuelan”, una canción que enamora en el disco, pero que en directo se quedó a medias debido a la sobriedad de su interpretación, desentonando algo con el tono de la noche.
El maravilloso himno pop “Por ti” volvió a despertar el fervor de los asistentes al que seguiría uno de los mejores momentos del concierto: la interpretación de la emotiva “No sé dibujar un perro”, donde el propio backliner se prestó como original atril mostrando la letra del tema en cartulinas para que todos los presentes pudiéramos corear esta pequeña-gran canción. A partir de este momento saboreamos el crescendo de la noche afrontando con actitud festiva “El Peor Grupo del Mundo”, la delicada y muy celebrada “En mi garganta”, así como “Fundido a Negro”, que dio paso a la oscuridad de “El Bosque” y su explosivo final. Todo el público estaba ya enloquecido cuando tocó el turno de “Un día más en la vida” y la primera despedida con su nuevo clásico “Carreteras Infinitas”.
Axel Pi, Jes Senra y Marc Ros tenían en el bolsillo a todos los asistentes y afrontaron así una tanda de bises que empezó con el himno generacional “Un día de Mierda”, momento en el que Marc se paseó entre el público fundiéndose con los allí presentes sin abandonar su punto provocador. “El Incendio” volvió a sonar demoledora, como siempre, y el broche final vino de la mano de “Estáis Aquí”, donde el grupo al completo y los varios cientos de asistentes parecíamos uno. ¡¡Qué gran canción y qué bien funciona como cierre!!
Fin de fiesta con las piruetas características de Axel Pi al borde del escenario, abrazos y gestos de sincera camaradería, apretones de manos para las primeras filas y muchos guiños a su público, con el que Sidonie lo comparte todo y al que ofrece siempre la mejor versión de sí mismos, como si el concierto que les ocupa fuera el último.
Definitivamente presenciar un concierto de Sidonie es sinónimo de vitalidad y cercanía. Durante algo menos de dos horas puedes tocar el mismísimo cielo aunque estés en frente de “El Peor Grupo del Mundo”.