Por: Txema Mañeru
Cuando fallecen algunos de los más grandes siempre hay algún punto positivo alrededor de ello. Generalmente viene marcado por la aparición de trabajos perdidos o temas inéditos que a veces tienen gran interés. Eso es lo que está sucediendo con David Bowie, grande entre los grandes. Pero es que además ha sido uno de los cantantes que mejor ha salido parado en el campo de la interpretación en el cine. Gracias a ello ahora se recupera al completo la destacada banda sonora del film de culto de Nicholas Roeg, “The Man Who Fell To Earth”. Aquí se conoció con un título que le va como anillo al dedo al carácter alienígena y mutante de Bowie, “El hombre que vino de las estrellas”. Se cumplen ahora cuarenta años de la película y hasta se ha reestrenado en los cines por ello. Para muchos es el mejor papel de Bowie en el cine, aunque a mí también me gusta mucho el film y lo que hizo en“Merry Chistmas Mr. Lawrence”.
El caso es que está banda nunca se publicó al completo en su día. Además está la anécdota de que se usó como música temporal para el film el “The Dark Side Of The Moon” de Pink Floyd. Finalmente los encargados de elaborarla fueron John Phillips, líder de The Mamas & The Papas y un gran instrumentista todo terreno como Stomu Yamashta. En el libreto de 16 páginas del doble compacto tenemos un montón de guapas fotografías de la película, además de su cartel. Tampoco falta la habitual edición de lujo con los LPs y los compactos, a los que acompañan un libro de 48 páginas con un gran ensayo del especialista Paolo Hewitt sobre la película.
Bowie hizo el papel del alíen abandonado en la tierra, Thomas Jerome Newton, y su música estuvo perdida hasta que se han encontrado ahora las grabaciones originales, apareciendo así al completo por primera vez y con una muy buena remasterización. La casi hora y media comienza con la música eminentemente cinematográfica de un experto como Yamashta. No es “The Dark Side Of The Moon”, pero tenemos muchos pasajes realmente brillantes de él. Es el caso de la experimental "33 1/3", de los sonidos tribales de "Mandala" o de la apacible "Wind words". También en el segundo LP o compacto ese inicio con la calma extraterrestre y galáctica de "One way" o de la sublime guitarra eléctrica de "Memory of Hiroshima".
El genio de The Mamas & The Papas, John Phillips , se da una serie de garbeos musicales por los más diferentes estilos como indican sus títulos de canciones: "Rhumba Boogie", "Jazz" o "Bluegrass breakdown". Además en "Boys fronm the south" se marca un estupendo tema entre el folk y el ragtime, en "Window" nos abre una ventana al espacio y en "Alberto" factura buen jazz melódico. Una de sus mejores aportaciones es el animado folk-rock de "Liar, liar" y también hace una buena versión instrumental del "Hello Mary Lou". Además se despide inmejorablemente con maneras de crooner entre Neil Diamond y Burt Bacharach en el tema central, "The man who fell to earth".
A estos dos bloques fundamentales hay que sumar el hermoso clásico "Blueberry Hill" a cargo de Louis Armstrong. También el ancestral folk vocal de The Kingston Trio. Tenemos también la encantadora y alegre voz femenina de Genevieve Waite y el villancico clásico "Silent night" a cargo de Robert Farnon. La guinda la ponen dos buenos fragmentos de música clásica a cargo de la Bournemouth Symphony Orchestra. ¡Merecía la pena que una música así no se hubiera perdido definitivamente!