Por: Txema Mañeru
La pizpireta pelirroja lo ha conseguido y ha firmado su mejor y más personal disco hasta la fecha.“Real” (Bloodshot Records / Bertus) es su cuarto disco hasta la fecha y el tercero para el sello de Chicago, Bloodshot, tras los también muy recomendables “Indestructible Machine” y “Somewhere Else”. La revista Spin hace unos años la definía como si Stevie Nicks, de Fleetwood Mac cantara el "Born to run" de Bruce Springsteen. También se hablaba demasiado a menudo de Lucinda Williams, Steve Earle o Loretta Lynn, pero ahora cada vez más, Lydia Loveless es ella misma, es real y suena real.
Del hillbilly-punk con corazón de honky-tonk de “Indestructible Machine”, pasó al puro rock’n’roll de su anterior y espléndido “Somewhere Else”. Y ahí sigue, haciendo rock’n’roll y hasta puro pop-rock sin fronteras. Respaldada por una gran y amplia banda en la que vuelve a destacar Todd May y sus guitarras, quien además aporta voces y teclados. Jay Gasper también está muy bien en estas facetas y se sale con una sublime, en bastantes ocasiones, pedal steel guitar. Pero es que en el sexteto hay incluso otros dos guitarristas más.
Pero vayamos a las nuevas canciones que tienen mucha miga y que son tan personales y “reales” que al mismo tiempo son temas en los que cualquiera puede verse reflejado. Arranca de manera enigmática y con gancho pop-rock al estilo de The Pretenders en "Same to you". El potente bajo de Ben Lamb lleva el poderoso ritmo y a veces se acercan a los más agresivos Fleetwood Mac. "More than ever" es un precioso lento impregnado de romanticismo, pero cargado con su rabia punk en la voz y con unos estupendos y apropiados punteos. "Out on love" sigue por esos derroteros y también con su confesional letra. Es un tensionado y crepuscular lento cantado y sentido como nunca, con unas guitarras dignas del mismísimo Robert Quine (Lou Reed) y bien secundadas por unos muy buenos coros.
En temas como "Midwestern guys", con sus alucinadas narraciones, es inevitable acordarse de grandes como Patti Smith o Rickie Lee Jones. No olvida sus raíces más country como demuestra en la potente "European", con un sorprendente tono optimista y otra vez destacados punteos. Cierra con la acústica "Clumps" y con un espléndido single como es "Real", que tiene un gran gancho comercial. Hasta titula un tema "Bilbao". Definitivamente puede dar un gran y merecido salto cuantitativo. Cualitativo y de personalidad ya lo había dado antes y ahora lo refrenda un poco más.