Por: Txema Mañeru
El kamikaze dúo catalán se ha convertido por derecho propio en la banda más importante de nuestro panorama de música electrónica. Con ellos sucede como con LCD Soundsystem o The Chemical Brothers. Gustan a los amantes de la electrónica pero también a los del rock. Ahora lo harán más aún al haber firmado su tercer y mejor disco y el más destacado del año 2015 con diferencia en su estilo. Si no, consulta las listas habituales de estas fechas.
Con su precioso nombre y tras el prestigio labrado también en directo y en grandes festivales como el Sónar, Primavera Sound o SXSW han llegado precisamente al sello del Primavera. Un sello que hace poco nos trajo a The Saurs y que cuenta con otras heterogéneas y diferentes propuestas que debieras seguir en www.elsegell.com.
Siguen siendo difíciles de clasificar aunque etiquetas anteriores como hardware electronics, drone music, post rock animal, avant garde, IDM o new noise no les van nada mal. Tampoco extraña que se citen influencias con cercanía al rock como Mogwai, Disco Inferno, My Bloody Valentine o Godspeed You! Black Emperor. Eso sin olvidar a nuestros Esplendor Geométrico o a Seefel, Fuck Buttoms y Flying Saucer Attack.
La vuelven a clavar con otro de sus títulos espectaculares como fue el anterior “Hope Only Brings Pain” (Irregular) que también estuvo al frente de las listas de música electrónica de hace dos años. También la clavan al arrancar con un "Amor de madre" luminosa, hermosa y espectacular. "Dysplasia" es ideal para una banda sonora de intriga y acción, pero también tiene el aire de unos Esplendor Geométrico actuales. En "Beware of the Fifth Column" o "Return to My Parents' Hometwon in Andalucia" sale su lado más pop ayudado por las voces de Louise Sansom de Animic. La primera empieza galáctica y planeadora para luego despegar hacia el baile. La segunda combina voces robóticas con un ritmo explosivo.
Otra de las joyas es la actual, aplastante y demoledora "Still Breathing But Already Dead" que ya protagonizó una anterior y recomendable 12” que ya hacía presagiar lo que se traían entre manos Juanjo y Miquel. "Headless Saints" suena épica y contundente con aromas entre industrial y post-rock. En "Drugs Bring Me Closer to You" te acercan otra vez a las pistas de baile hasta con el título y en "Wheat Fields" suenan más ambient y paisajistas con una preciosa melodía.
Se despiden con ‘La muerte no es el final’, ayudados por la trompeta de Pau, de Za! Con ella acaban muy arriba y potentes, conquistando de nuevo al público rockero y culminan más de una hora de “Suicidio de la Cultura Occidental”. ¡Vivos y totalmente en la cima con su gran inteligencia!