Por: Txema Mañeru
Tras unos años un tanto dispersos la super estrella canadiense Bryan Adams parece que anda con ganas de dar guerra y seguir haciendo su particular rock’n’roll. El pasado año tuvo mucho movimiento. Primero fue la lograda y recomendable reedición de “Reckless – 30th Anniversary DeLuxe Edition” (A&M / Universal) que además de una gran remasterización añadía unos destacados bonus tracks y un segundo compacto con un magnífico directo del 85.
Pero es que poco después llegó el turno para un bonito capricho de Bryan que también satisfizo a sus fans. Se trataba de un “Track Of My Tears” (Polydor / Universal) con estupendas versiones de sus favoritos entre los años 50 y los 70 y con magnífica presentación en formato disco-libro de tapas duras. Estaba, como indica el título, Smokey Robinson, pero también The Beatles, Ray Charles, Bob Dylan, Chuck Berry, la Creedence, Jimmy Cliff o los Beach Boys.
El caso es que sigue animado y enamorado (al menos en la portada) y quería hacer un disco con nuevas canciones y aquí está “Get Up” para seguir yendo para arriba.
Arranca recuperando esa pasión por el rock’n’roll de los años 50 que siempre le ha caracterizado. ‘You belong to me’ tiene garra y velocidad, pero también tiene ese toque característico de este tipo de temas de la Electric Light Orchestra. Casualmente o no, me di cuenta de esto antes de pararme a mirar que el productor del disco es el mismísimo Jeff Lynne. Eso es otro punto de distinción en el sonido del disco, más aún cuando toca un montón de instrumentos y también hace coros. Hasta contribuye en la composición de ‘Do what ya gotta do’ y eso también se nota. Por cierto, que con múltiples guitarras este otro monstruo del instrumento, y colaborador habitual de Adams, como Jim Vallance aporta la otra ayuda compositiva en ‘That’s rock and roll’, un más
que posible single con un estupendo riff y un gran estribillo a lo John Cougar (antes de convertirse en Mellencamp). Y ya que hablamos de riffs de guitarra, son una gozada la crudeza de los de ‘Go down rockin’’, firmados por Keith Scott y Rusty Anderson.
No falta tampoco su lado más épico, en especial en ‘We did it all’, uno de esos majestuosos lentos que sólo él sabe hacer tan efectivos. Recupera fuelle para ‘Yesterday was just a dream’, otra vez una gran melodía lenta, con buenas guitarras y un pegadizo estribillo. Despide el disco con otro single épico y con garra como ‘Brand new day’. Una delicia para los fans de Adams, pero también para los de John Cougar o el Bruce Springsteen de los 80.
Como propina o golosina nos entrega además cuatro buenas versiones acústicas. ‘Don’t even try’ emociona más que la eléctrica. No ocurre lo mismo con ‘We did it all’. Suena también rockera y con tonos entre Woody Guthrie y el
Boss acústico la de ‘You belong to me’. También tiene magia en acústico ese efectivo estribillo del ‘Brand new day’.
Y si hablamos de golosinas tenemos que decir que hay edición en vinilo para coleccionistas. Además también hay una versión DeLuxe con un packaging especial en caja dura y dos compactos en el que se añade una entrevista con Bryan y una selección de 4 maravillosas fotografías laminadas. Para los más amantes o adinerados. ¡Seguro que se anima a defender este buen disco en una larga y esperada gira!