Por: Txema Mañeru
¡No te hagas con este genial compacto en directo si no quieres arruinarte! Es que este directo en acústico en el mítico Carnegie Hall trae 10 de los mejores momentos de las dos noches del noviembre pasado. Pero es que hay una edición de 6 LPs y casi 4 horas de música con todo lo que interpretó en esas inolvidables veladas. ¡Seguro que cuesta un pastón, pero por lo escuchado aquí también lo valdrá!
Ryan Adams siempre ha sido muy irregular en estudio, aunque discos como "Heartbreaker" o "Gold" suscitan la unanimidad total entre los buenos aficionados al mejor rock americano. También logró acuerdo generalizado en su disco del pasado año, "Ryan Adams" (PaxAm / Sony Music), su mejor trabajo en mucho tiempo. En directo también ha dado muchas de cal y otras tantas de arena. Pero esta ocasión en el Carnegie Hall era muy especial para él y lo borda. En las buenas notas interiores por él firmadas nos cuenta como la primera vez que acudió a este magno escenario fue para ver y escuchar a Chavela Vargas.
Se abre el compacto con la hermosa 'Oh my sweet Carolina' y ya quedamos prendados de su gran voz y del magnífico y puro, pero apabullante, sonido. Con sólo voz y acústica emociona con 'Nobody girl' y me hace acordarme de Murray Head. No podía faltar su más popular éxito, 'New York, New York' que suena a pelo también de miedo. 'Silvia Plath' es magia pura al piano y voz. En este celestial momento y en algunos más es fácil acordarse del mejor Neil Young y de su 'Unplugged' o sus discos más desnudos. Sus arpegios de guitarra en 'This is where we meet in my mind' los firmarían Leonard Cohen o Townes Van Zandt.
El gran y reciente trabajo, "Ryan Adams", está muy bien representado aquí. Buena prueba es 'My wrecking ball' con su voz llegando desde el cielo con gran profundidad. Sobrecogedora. Sigue con el 'Give me something good' del mismo trabajo. Además el tipo estuvo especialmente simpático y acertado con sus comentarios. Así las risas previas
a 'Kim' son continuas, aunque luego lo transforma en emoción y devoción al interpretar el tema.
El cierre es para otro de los mejores temas de "Ryan Adams". Se trata de un 'Come pick me up' y también se muestra certero con la armónica. De nuevo es fácil acordarse del mejor Neil Young acústico. ¡Gran artistas, de nuevo en plena forma y todo un pedazo de emocionante y sublime directo!