Por: Blanca
Solà
Después de 5 des-esperados años, vuelven Los Planetas con un EP sincero, claro y directo: Dobles fatigas (El Segell del Primavera, 2015).
Cuatro temas; El Duendecillo verde, Motores de combustión, Estadística y Heroína (Bulería de El Torta) que deambulan y reflejan la trayectoria y esencia del grupo granadino por excelencia. Expectantes de saber los sentimientos y sensaciones que recorren por las cabezas de Jota y Florent, podemos captar la psicodelia que ya nos deleitó hace años con el pop y el flamenco que corre por sus venas.
El Duendecillo verde canta sin tapujos y con menos eufemismos al político, el que todos conocemos y que nos destroza día a día con sus absurdas palabras. Con las guitarras folclore a flor de piel, un bajo para chuparse los dedos y la batería llena de notas que se clavan en el corazón.
Lo bonito y lo que nos enamora de Los Planetas, aparece con Motores de combustión. Un tempo relajado con teclados que lloran a un amor roto con nostalgia y con promesas. La voz, la letra y la base instrumental llevan el sello planetario que nos invita a envolvernos de melancolía aplaudiendo de nuevo su arte. Una oda al desamor que, como en todas sus canciones, acaba con final infeliz.
Con Estadística viajamos literalmente a su querida Cádiz y nos acercamos a la letra de Manolo Caracol en su canción Salen a siete mujeres. Poco a poco van surgiendo las notas más flamencas para dar paso a su último tema.
Heroína (Bulería de El Torta), con las palmas en mano de Justo Malaguita e Ismael de Santa Fe, nos invade de felicidad a los amantes del flamenco recordando los palos tocados en La leyenda del espacio (2007). Un homenaje a Juan Moneo Lara, fallecido hace 2 años.
Y no podíamos olvidar el giro drástico que aparece en la portada con todos los miembros como si fueran superhéroes de Marvel ilustrados por el argentino Al Barrionuevo. Un estilo totalmente arriesgado para los que amábamos sus portadas noventeras como Súper 8 (1994) o Pop (1996).
Coged vuestras bonitas agendas y apuntad estas fechas, 15 de mayo en Ochoymedio, Madrid y 22 de mayo en la sala Apolo de Barcelona, porque, si realmente queremos enamorarnos de ellos, Los Planetas, no podemos fallarles.