Con la excusa de la presentación
de su nuevo trabajo, “Blue Jeans”, bajo el brazo; Borja Laudo Bigott) se
citaba con nosotros en Madrid escogiendo la Sala Ocho y Medio (Sala But) como
escenario del directo. Acompañado por Clara
Carnicer (Clarín), Paco Loco, Muni Camón y Esteban Perles (que han creado un grupo
sólido que acompaña al artista zaragozano), Bigott se disponía a materializar sobre el escenario un disco, que
grabado en la selva brasileña, prometía con agitar nuestros cuerpos de forma
violenta.
El que conozca un poco a este
artista (posiblemente todo el que se haya metido a leer esta crónica), sabe que
la cotidianeidad, la normalidad y la cordura no son adjetivos que se puedan
utilizar para definirle. Sin embargo, ahí reside el encanto de un cantante que
rompe todos los convencionalismos, pues defiende un producto que no entiende de
paralelos o comparaciones, pues ¿qué cantante espera a sus fans en la entrada
de la Sala de conciertos (minutos antes del espectáculo) y te acomoda en un
lugar “privilegiado” para disfrutar del espectáculo? ¿Qué artista se mezcla con
el público y empieza a vender sus discos y vinilos con la ayuda de su productor
(Paco Loco)?... En definitivas cuentas, nadie con el que me haya cruzado
anteriormente.
Tras esta larga introducción, toca hablar de un directo, que pese a comenzar con algunos minutos de retraso (algo que no es realmente cierto, pues el espectáculo había empezado nada más cruzar la puerta de la sala), tenía como principal objetivo ofrecer, no un repaso al tracklist de su último disco, el ya mencionado “Blue Jeans”, sino entregar una revisión tanto de este, como de sus trabajos anteriores (incluyendo algunos de los primeros y más desconocidos para muchos) a través de un sonido más sucio y afilado, fruto de guitarras eléctricas, un ritmo acelerado y, en definitiva, versiones más rockeras de sus propios temas. Aspecto este a reseñar, pues en la gira anterior se priorizaban las guitarras acústicas, los ukeleles y un sonido limpio, con más aire.
Tras esta larga introducción, toca hablar de un directo, que pese a comenzar con algunos minutos de retraso (algo que no es realmente cierto, pues el espectáculo había empezado nada más cruzar la puerta de la sala), tenía como principal objetivo ofrecer, no un repaso al tracklist de su último disco, el ya mencionado “Blue Jeans”, sino entregar una revisión tanto de este, como de sus trabajos anteriores (incluyendo algunos de los primeros y más desconocidos para muchos) a través de un sonido más sucio y afilado, fruto de guitarras eléctricas, un ritmo acelerado y, en definitiva, versiones más rockeras de sus propios temas. Aspecto este a reseñar, pues en la gira anterior se priorizaban las guitarras acústicas, los ukeleles y un sonido limpio, con más aire.
El concierto comenzó con “Mouse Mousse”, estupendo punto de
partida que inició la presentación de “Blue Jeans” y empezó a sacarnos del
letargo anunciándonos que teníamos que poner nuestro modo “rocker” en “ON”,
pues íbamos a disfrutar de un muy movido setlist que revisaría por un lado su
discografía (versionando sus propios temas), donde cabría hablar de “Cool single wedding” (un clásico en su
actual repertorio), “Oh Clarin” (casi
irreconocible e incluso frenética la “romántica” versión que Borja canta a su
chica), “She’s my man” (una de
nuestras debilidades) y “King of Demo”, “Little Octopussy” y “Aqaba”
(todos ellos temas alucinantes, que muchos de los ahora iniciados no deben
perderse); mientras que por otro lado se iban introduciendo de forma aislada
las nuevas canciones: “Find a Romance” (que
volvió loco al público), “Reno Poem” (una
de los temas que hace encoger tu corazón e idolatrar la barba y bigote de
su creador) o “Metropolitan Moog” y “Female Eunuque”. Con todo el público metido en el
concierto, la banda abandonó el escenario, pues requería de un corto descanso
antes de encarar un final que tomó como punto de partida algunos de sus hits
más potentes, que curiosamente están desperdigados en una prolija discografía
que cuenta ya con siete trabajos. Destacaron así “Cannibal Dinner” y “Good is
Gay” (cuyas ejecuciones perdieron en parte, su espíritu rompepistas y acústico, respectivamente),
“Blue Jeans” (genial en directo, que hace preveer no abandonará sus directos), “New York Seveille” (que nos puso firmes) y “Dead mum walking” (tema clave en su carrera, pues le puso en el punto de mira de muchos
medios de comunicación y radios hace ya tres años).
En definitiva un concierto
potente y espectacular (que sin embargo, siento decir que no hace sombra a sus
directos más acústicos) y que resultó ser en realidad un homenaje a los que le
seguimos desde hace años, pues profundizó en discos de su discografía más
lejana, así como versionó su propia obra, midiendo muy bien los tiempos
para incorporar y presentar sus canciones más actuales. Recomendabilísimo.
Por: Rubén López / ruben@elgiradiscos.com
Fotos: José David López y Rubén López