Marvin Green: “La Soledad del Sheriff Kane”

No, claro que no. “La Soledad del Sheriff Kane”, el segundo trabajo de los sevillanos Marvin Green, no es un  disco cualquiera. Apenas unos instantes de escucha son más que suficientes para ser conscientes de que nos estamos enfrentando a un álbum que debemos calificar como de muy serio, pues se trata de uno de esos discos que hacen chasquear los dedos y asentir con la cabeza de manera afirmativa desde los primeros compases. 

Los aspectos positivos de “La Soledad del Sheriff Kane”, son múltiples y variados, yendo desde la capacidad incontestable para captar tu atención durante todo el minutaje, comenzando a través de la inicial “Sheriff Kane”, donde muestran algunas de sus cartas en una composición de ritmo trepidante, repleta de groovie y con una actitud que supura rock por los cuatro costados. Constante que se reafirma en cuanto comienza a sonar “Perdón Mamá”, capaz de transportarte a un ring imaginario en el que te espera un golpe de derechas con destino a tu mentón. Un paso más allá parecen ir con “Maldito Invierno”, orgánica, visceral y tremendamente hipnótica, sobre todo gracias a ese componente de alma negra que le dota un Hammond efectista y brillante, elementos que aparecen una y otra vez para dotar de calidez y cuerpo a esta impresionante obra. 

Otra de las facetas de Marvin Green es la introspección y el recogimiento, una vertiente que muestran en “Al Fresco”; una canción reposada en su origen y de apariencia desnuda con la que parecen querer dar un respiro al oyente que acaba por romper en un rock and roll de clara herencia setentera, demostrando que están capacitados para abordar lo que se le antoje a la perfección, sin perder de vista que lo que les gusta en realidad son los decibelios y la electricidad, algo que queda patente un poco más adelante en cortes muy de ese estilo como “No es Tarde” o “Gordo”. 

Las composiciones siguen pasando en el reproductor y con ello continúan las sorpresas, en este caso de la mano de “No soy un Rey”, quizás la que tendría más posibilidades de convertirse en un hipotético single, más que nada por que se trata de un corte inmediato a más no poder, que podría gustar tanto a un rockero militante como a un oyente de radiofórmula, capacidad que creemos es digna de resaltar pues no muchos grupos consiguen unir calidad y comercialidad a partes iguales sin perder por ello un gramo de credibilidad. 

El cierre viene de la mano de “Rollin´ Stone”, otra canción repleta de músculo y fuerza con la que Marvin Green dan por finalizado de manera brillante un personalísimo segundo trabajo. 

Muchas son las cosas que sabemos que hemos dejado de resaltar en este texto, entre ellas que la grabación del disco se hizo en directo, para dotar a su sonido de un premeditado espíritu de crudeza y realismo, en los estudios que Paco Loco, productor del álbum, tiene en el gaditano Puerto de Santa María, algo que con cualquier otra reseña hubiéramos tenido que citar en el primer párrafo, pero que aqui no es necesario. Y no lo es, simple y llanamente, porque las canciones de Marvin Green hablan por sí solas de un grupo con garra, descaro y actitud a raudales, que deja entrever en “La Soledad del Sheriff Kane” que son parte de ese selecto grupo de bandas que han optado por buscar un estilo propio a través de unas letras valientes a las par que sinceras. Siendo capaces de pasar por su tamiz a unos referentes claros como son el rock de miras setenteras y la música negra de raíces, bailable y con alma, que funden a la perfección para dar vida a un trabajo mayúsculo. 

Por: Javier González/javi@elgiradiscos.com