Los chicos de Fira Fem estrenaron el casillero de su discografía personal hace apenas unos meses con “Aedificatoria”, un heterogéneo trabajo repleto de personalidad en el que se funden con total acierto la electrónica elegante y el rock experimental, todo ello condimentado con pequeñas pinceladas que suenan cercanas al shoegaze e incluso al kraut-rock, dando como resultado un álbum repleto de frescura y netamente pop, entendiendo siempre dicho término de la mejor manera posible, al que debemos calificar como de totalmente recomendable.
Después de haber caído rendidos ante la sinceridad y categoría de su propuesta durante éstas últimas semanas, no nos quedó más remedio que ponernos en contacto con ellos para que, como inmejorable anticipo de su concierto de ésta noche en la sala Moby Dick, nos hablaran de todo lo relacionado con “Aedificatoria”; el primer disco de una trayectoria que en un futuro no muy lejano continuará deparándonos muy buenos momentos. ¿Apostamos algo?
Fira Fem surge a finales del año 2010, después de que dierais por finiquitada vuestra aventura en proyectos de lo más diverso. ¿Podéis contarnos cómo y de qué forma nació Fira Fem?
Óscar: Colgamos unos temas a internet, que tuvieron muy buena acogida desde el primer momento. La subida en la red nos obligó a llamar al proyecto de alguna manera, y nos decidimos por Fira Fem. A partir de ahí salimos de la producción casera y nos trasladamos a un local de ensayo. Adquirimos una formación de banda con carácter más orgánico y enérgico, y trasladamos esas canciones caseras al local. Así empezamos la andadura de Fira Fem; a base también de improvisaciones y experimentación más abierta hasta llegar a un repertorio que no deja de transformarse y que se acerca cada vez más a un sonido sólido y más nuestro.
Dos años de aprendizaje y escuela en los que os dio tiempo a moldear definitivamente vuestra propuesta y repertorio, y que os sirvieron para editar dos maquetas, “Mascot Human Disco” y “Old Man´s Jacket”, las cuales reportaron a Fira Fem cierta notoriedad, llegando a tocar en bastantes festivales de renombre. ¿Qué valoración hacéis de todo lo que os ha ocurrido?
Manuel: Una valoración claramente positiva. Hemos tenido la suerte de ir dando pasos como banda de forma natural. Sin grandes saltos, de forma continua, de manera que hemos podido disfrutar y asimilar cada fase. De la época “do it yourself” con demos autoproducidas disfrutamos del proceso artesanal de producción y de las reacciones que despertaron nuestros temas. “Mascot Human Disco” fue seleccionada por MondoSonoro entre las tres mejores demos del año, lo cual nos dio una mayor visibilidad y nos permitió participar en las Fiestas Demoscopicas, a partir de lo cual pasamos a formar parte del Red Bull Tour Bus (FIB, Monkey Week….). Gracias a los temas de “Old Man´s Jacket” estuvimos entre los semifinalistas del Proyecto Demo y también fuimos elegidos por Myspace para tocar en su escenario en el Primavera Sound. La demo “Old Man´s Jacket” se la entregamos a Sergio en el PS y ahí empezó nuestra relación de amor con Aloud…¡Pues eso, todo positivo! (Risas)
¿Creéis que dicha experiencia ha sido fundamental a la hora de hacer madurar vuestra propuesta?
Óscar: Toda esa experiencia es la que ha formado realmente el grupo. A base de directos, y más directos. Hay canciones que antes funcionaban genial pero ahora no, y aquella que flojeaba un poco ahora es una parte fundamental. Todo eso nos ha servido para ver las reacciones de quien nos escuchaba, y formar un disco a partir de éstas sensaciones, no únicamente de las nuestras. Nos ha servido para salir juntos a tocar y para disfrutar de un festival, pero desde dentro.
Hace unos meses vio la luz “Aedificatoria”, un trabajo muy heterogéneo, cercano a una electrónica elegante y al rock experimental, sin embargo la palabra que mejor lo definiría sería pop, por la frescura e inmediatez que encierra, algo que le hace completamente adictivo. ¿Estáis de acuerdo con nuestra afirmación?
Manuel: Sí, la verdad que sí. Somos más amigos de las etiquetas estructurales y duraderas como rock, pop o electrónica. Hay un punto experimental, cierta voluntad de riesgo y pinceladas estilísticas. Pero dentro de ese envoltorio hay una base pop en el sentido más generalista. Las canciones se edifican (o aedifican) a partir de la superposición de capas sosteniendo líneas melódicas que de alguna forma dirigen el crecimiento y desarrollo del tema. Nos alegra que opinéis esto, porque, a pesar del trabajo cerebral que hay detrás del disco, queríamos mantener la frescura de los temas que, al fin y al cabo, se originaron a partir de la improvisación en un local de ensayo.
Aunque si de etiquetas hablamos, por el camino nos dejamos componentes cercanos al kraut-rock, el shoegaze e incluso tropicales, patentes en “Cine Azteca”. Por lo que la pregunta está servida. ¿Cómo surge un álbum tan marcadamente abierto?
Manuel: Somos consumidores exhaustivos de música. En este tiempo de andadura hemos crecido juntos musicalmente, descubierto bandas, etc. Hemos ido juntos a conciertos que nos han influenciado y hemos compartido vivencias que de alguna manera deben hacerse patentes en nuestra interpretación de los temas. Queríamos que el disco fuera una “foto” del estado de la banda, eso incluye un crisol de estilos y referencias. Nuestro trabajo es cristalizar y unificar ésta amalgama con coherencia y naturalidad. Del resto depende valorar si lo hemos hecho bien.
También es muy llamativa la producción del disco, muy limpia, buscando potenciar el sonido de todos los instrumentos y considerando a la voz como uno más de ellos; haciendo que las canciones fluyan en busca de una dirección común, pero a la vez diversa y juguetona. Una labor que recae en vosotros, con la ayuda de Luca Petricca y Sergio Benito. ¿Por qué os decantasteis por ellos como productores? ¿Qué creéis que han aportado al sonido final del disco?
Luis: Nunca tuvimos la sensación de tener que hacer un trabajo de producción en concreto. Sí es cierto que por la naturaleza de las canciones era necesario, y en especial con los instrumentos acústicos, que tuvieran un sonido limpio y bien definido. Nuestras composiciones conllevan la superposición de muchísimas capas y debemos colocar con cuidado cada una de ellas. Necesitamos que los sintetizadores y los samples convivan en armonía con la batería, las guitarras, los órganos, etc…y este ha sido uno de los retos en “Aedificatoria”. A parte del trabajo como técnicos que han realizado, Luca y Sergio han sido una pieza clave para que las canciones ya que consiguieran la solidez y la envergadura que tienen. Además de aportar una visión externa (como de si nuestros tutores se tratasen), que ha sido necesaria, sobre todo, para poder terminar el disco…si no aún estaríamos mezclando “Cine Azteca”. (Risas)
Debemos aclarar que la aportación de cada uno de ellos aparece espaciada muy claramente. Dotando a “Aedificatoria” de dos ambientaciones muy marcadas que hacen las veces de cara A y B, siendo una más luminosa y quizás la otra más introspectiva. ¿Era esa vuestra intención a la hora de colocar las canciones de la forma en que lo habéis hecho?
Óscar: Le dimos muchas vueltas, como a todo (Risas), antes de tomar una decisión. Pero es cierto que en el disco coexisten dos mundos muy diferentes, de los cuales no podíamos, ni queríamos prescindir. Era difícil poder unirlos en un único trabajo con coherencia, pero creo que lo hemos conseguido y es una de las cosas que más nos gustan de “Aedificatoria”. Finalmente optamos por separarlos sin miedo, en vez de ir mezclándolos con sutileza. El resultado, creemos, es un disco en constante movimiento.
Desde fuera da la impresión de que para vosotros la letra parece tener un componente totalmente secundario a la hora de realizar canciones, algo que nos parece un signo muy personal. ¿A qué se debe?
Luis: Creemos que la música que escuchamos puede tener mucho que ver con esto, además, somos músicos, no poetas. Escribimos las letras a posteriori y tienen mucho más que ver con alguna experiencia personal conjunta que con una historia que siempre nos haya rondado la cabeza. En nuestras canciones no somos políticos, ni contamos historias de amor…nos interesa más que lo que decimos encaje con nuestras vivencias. Nos interesan que las letras tengan un carácter percusivo en el tema, o que ayuden a enganchar partes sin necesidad de usar samplers todo el rato; eso es, usamos la voz a modo de interludios, de pasajes entre partes dentro de una misma canción.
En algunos cortes como “Old Man´s Jacket”, “We Like Yoghourt” o “Goon Humour”, os hacéis acompañar de compañeros de profesión como Bikes&Girls o Calimä. ¿En qué sentido su participación ha modificado el sentido de dichas canciones?
Manuel: Bikes&Girls y Calimä son dos de nuestras bandas favoritas, nos sentimos muy afortunados de contar con ellos en el disco. En el caso de Bikes la relación es muy cercana y nos han acompañado en directo en alguna ocasión (y en más de alguna juerga antológica). Sus voces sonaban genial en los temas que colaboraron y le dieron un aire más pop a esas canciones. En el caso de Calimä les enviamos el tema y ellos añadieron sus soniditos de otro planeta, dándole a “Goon Humour” un carácter ultraterreno que nos encantó.
¿Qué más bandas de las que actualmente campean en nuestro panorama llaman vuestra atención?
Manuel: Como comentábamos antes, consumimos mucha música, nos intercambiamos temas casi a diario. En la furgoneta puede sonar desde James Blake a Stereolab. De los últimos tiempos destacaríamos por ejemplo los trabajos de Wooden Shjips, Connan Mockasin, Future Islands, Mount Kimbie, Caribou, Four Tet, Blondes, Burial. Por aquí se están consolidando propuestas muy interesantes como las de John Talabot, Pional, Oso Leone, Edredón, Bruna, GAF, Bikes & Girls.
Recientemente habéis estrenado el video-clip de “Cine Azteca”, con innegables referencias Wes Anderson. ¿Qué podéis decirnos del mismo?
Óscar: La gente de Modularestudio han sido los encargados de este gran trabajo, en una idea conjunta con nosotros. Desde esa estética acertada de la que habláis, planteamos un ambiente tierno, limpio y cristalino, pero a la vez sórdido, y un poco sucio a medida que todo se acerca al final. Eso es lo que refleja “Cine Azteca”, dos elementos dispares pero en este caso unidos. En definitiva, plantea nuestra visión del Romanticismo Intoxicado.
Esta noche estaréis tocando en la sala Moby Dick. ¿Qué se encontrará todo aquel que se acerque a disfrutar de vuestro directo?
Luis: ¡Sobre todo, una banda disfrutando de su propio directo! Eso es lo que más nos gusta, y lo que más nos interesa. Vamos a tocar temas nuevos, temas que estarán en nuestro próximo disco, también incluiremos algunos pasajes menos percusivos y más ambientales como contrapunto a nuestro set clásico. Además, tendremos la suerte de contar con la gente de Bikes&Girls en el directo, queremos reflejar lo mejor que podamos lo que ha supuesto este ultimo año para nosotros, y presentar el mejor “Aedificatoria” que tenemos guardado bajo la manga.
¿Qué planes de futuro manejáis para los próximos meses?
Luis: Queremos estar más ocupados en 2013 de lo que hemos estado este año si cabe. Nuestros objetivos mas cercanos son tocar en festivales como el Primavera Sound o el Sónar, grabar y publicar nuestro segundo disco. También tocar fuera de Españ, aunque es verdad que ya empezamos a tener la agenda cargada con conciertos, colaboraciones, remezclas, etc…2013 suena bien para Fira Fem.
Por: Javier González/javi@elgiradiscos.com