“Creemos que manejamos un concepto pop, muy
sencillo de hacer llegar a la gente”
Conocimos a Varry
Brava un año atrás, cuando estaban a punto de dejarse caer por nuestra ciudad
para presentar las canciones que conformaban su primera maqueta, “Ídolo”,
recibida con un sin par entusiasmo por parte de público y crítica, siendo éste
hecho el principal culpable de la presencia de la banda en grandes festivales como
el S.O.S 4.8 y Sonorama, en aquel momento ya nos anunciaron que sus planes de
futuro pasaban por acabar de dar forma a lo que finalmente ha sido “Demasié”,
su
debut discográfico.
debut discográfico.
Un álbum en el que se han remozado parte de las
canciones que ya conocíamos, dotándolas de pequeños matices y de una potencia
inusitada, y a las que han sumado nuevas composiciones que siguen la línea hedonista
y alegre, cargada a la vez de sofisticación, a la que poco a poco nos han ido
acostumbrando estos murcianos enamorados del pop, la música de baile y la new
wave.
Como no podía ser menos a su paso por Madrid
concertamos una cita con ellos para que nos hablaran de todo lo relacionado con
esta primera entrega. El encuentro tuvo lugar en un céntrico restaurante
capitalino en el que compartimos mesa y mantel, en el marco de una conversación
de lo más distendida que fluyó libremente, dando como resultado una entrevista,
que sin temor a sonar arrogantes, pensamos que habrán concedido a muy pocos medios,
por lo cercano de la misma y por la cantidad de anécdotas, alejadas de la
rigidez promocional, que salieron a relucir.
Sin más preámbulos os dejamos con los chicos de Varry Brava.
Hace unos meses con motivo
de vuestro concierto en el Wurlitzer Ballroom tuvimos la oportunidad de
ponernos en contacto con vosotros, en ese momento nos comentasteis que andabais
inmersos en la preparación de “Demasié”, el que a la postre ha sido vuestro
primer disco, al que aún le faltaban unos cortes. ¿Qué ha ocurrido durante todo
este tiempo? ¿De qué manera fueron surgiendo esas composiciones postreras?
Óscar: Básicamente hemos estado preparando las nuevas
composiciones. Vimos que la maqueta estaba funcionando muy bien, por lo que
queríamos hacer era seguir currando e investigando. Queríamos que las composiciones
siguieran la misma línea que teníamos en “Ídolo” que fueran frescas, que
sonaran pop y que invitaran al baile. Nos gusta jugar con nuestras influencias,
poder desarrollarlas en el local y en el estudio de grabación.
Aarön: También nos encontramos con algo que no habíamos
podido hacer hasta ahora. Poder componer desde el estudio de grabación. Hubo
varios temas que nacieron de unos bocetos que teníamos y se cerraron allí. El
proceso de trabajo ha sido distinto en ésta ocasión.
Como decís las nuevas
canciones, a pesar de los dos años de diferencia respecto a algunas de sus
compañeras, no parecen pertenecer a un período distinto. Siguen esa línea
“hedonista” que parece ser la marca de fábrica de Varry Brava.
Óscar: Hay que tener en cuenta que compositivamente están
muy cerca. Además todavía no hemos terminado de explotar esa forma de hacer
canciones. Podríamos decir que los diecisiete temas que hemos grabado, entre el
disco y la maqueta, forman parte de la misma intención de hacer. Quizás por eso
no hay demasiada diferencia en la composición.
Aarön: También hemos encontrado entre todos un punto en que
nos sentimos cómodos con nuestras distintas influencias, de hacer la música e
incluso de tocar. Creemos que manejamos un concepto muy pop, muy sencillo de
hacer llegar a la gente, que además está funcionando hasta ahora. Es todo parte
de una misma idea, aunque hay diferencias porque las canciones del disco
muestran una producción muy cuidada, y las de la maqueta son producto de cinco
días en una casa rural… entre baños de piscina y barbacoa. (Risas)
Óscar: Quizás en unos cuantos años se nos acabe la fuente de
inspiración hedonista y hagamos yo qué sé… jazz (Risas). A nosotros nos
divierte este estilo y creemos que podemos hacer unas cuantas buenas canciones
de pop más en castellano, que es lo que nos gusta. Aderezarlo con otras cosas,
pero que la base sea el pop español de los ochenta. Lo que hacían Los Secretos,
Mamá o Nacha Pop. Que esa sea la base a la que se unan otras influencias que tenemos que van del disco, al rock o a la
electrónica.
Óscar: Dentro de esos dos años y medio como banda hay algo
que es fundamental. Siempre nos hemos planteado hacer canciones y formar un
grupo para divertirnos. Con “Ídolo” no había ningún tipo de pretensión, hicimos
canciones para nosotros que gustaron a la gente. Ahora con “Demasié” la
pretensión ha sido mejorar un poco el sonido y mejorar lo que habíamos presentado
en nuestra maqueta.
Aarön: Durante la grabación de “Demasié” teníamos muy claro
que no debíamos perder de vista los detalles que habían hecho que a la gente
nuestras canciones le parecieran divertidas y frescas. Si perdemos eso se
notará enseguida.
Óscar: Además que a nosotros nos apetece seguir por ese
camino. Nos divierte.
Unos temas que invitan a
asaltar la pista de baile buscando lo alegre, la despreocupación y en
definitiva pasarlo bien, sin perder de vista una estudiada elegancia que se
mueve entre las luces de la música pop
ochentera, la new wave y el rock más moderno. ¿Estamos en lo cierto?
Aarön: Lo estáis. Si acaso por completar faltaría un poco
ese toque un poco más elegante de la música de los años setenta.
Óscar: Yo veo videos de ese período y me parece increíble.
En cierta medida intentamos rescatar ese espíritu en la medida de lo posible.
Nos encanta la elegancia de esas bandas setenteras, las luces de neón e
inclusive ese romanticismo al estilo italiano de llorar por dentro y hacerte el
duro, como Toni Manero cuando se enamora de la chica rica pero no lo quiere
demostrar. Tampoco podemos olvidarnos de referentes como Bryan Ferry, Tino
Casal o Robert Palmer.
Eso es algo que me
interesa. ¿Qué bandas citarías como principales referencias para vuestro
sonido?
Óscar: Acabo de descubrir hace relativamente poco tiempo
una banda canadiense de los ochenta que se llama Men wihout Hut, son muy
electrónicos, elegantes, agresivos y bailones. Me llaman la atención porque son
muy precisos a la hora de hacer melodías muy concretas, creo que con ese
detalle hay un nexo con lo que intentamos hacer nosotros. Siempre buscamos que
la melodía y el estribillo sean claras, son muy importantes para el pop que
queremos hacer.
Aarön: También dentro de la movida había muchas bandas que
nos han influenciado.
Óscar: Hay una banda que a mí me parece muy curiosa. Estoy
hablando de Peor Impossible, donde militaba Rosy de Palma. Lo que hacían era
algo tremendo. Creo que hay rescatar ciertas dosis de descaro, quitarnos prejuicios
y dejar de seguir la corriente imperante.
Aarön: El punto que tenía Glutamato Ye-ye de música desenfadada
muy llevada al extremo. Algo que también ocurría con un personaje como Poch y
Derribos Arias, esa forma de estar en las entrevistas. Pequeñas cosas que
deberían ser rescatables hoy en día.
Una actitud de la que
hacían siempre gala bandas de aquella época dorada de nuestra música como
Golpes Bajos, Siniestro Total o Gabinete Caligari.
Óscar: Eso es Gabinete Caligari. Cuando salían al Rock-Ola
diciendo que eran “Fascistas”. A eso me refiero. Hay que valorar todo, incluso
al margen de la música. Son cosas que son impensables ahora pero en realidad
creo que a la música española le hacen falta ese tipo de cosas. Estamos cayendo
mucho en lo británico y lo americano.
Bueno en vuestro caso eso
no ocurre, más allá de las influencias nacionales que estáis citando, es
innegable un gusto por la melodía y la sensualidad de la música italiana, cuyo
rastro es fácilmente rastreable a lo largo de todo el disco, con referencias a
Pino D ´ Angio en “Disco” y unos fraseos que son un claro homenaje en “Miedo”.
¿De dónde surge esa pasión por una música que en nuestro país desde hace
décadas no tiene difusión?
Aarön: Yo creo que eso viene un poco de mi infancia. Me he
despertado muchas mañanas, gracias a mi padre, a ritmo de Giacobbe, Battisti o
Franco Battiato. Era una parte de nuestra infancia musical que tenemos muy
presente, que siempre ha estado ahí. Es una forma de hacer música que
desapareció cuando acabó la fiebre de los solistas, pero a nosotros nos gusta
mucho. Creemos que entronca mucho con
ese concepto de la elegancia y con una época en que las cosas que se hacían de
otra manera.
Óscar: También lo asociamos a melodías y canciones de
calidad y espectaculares de Battiato, Mina o Celentano. Temas que son joyas. Si
hubieran sido en inglés hubieran tenido la repercusión de las canciones de los
Beatles. Y de lo atrevido de todo aquello. Siempre intento escuchar y ver
videos, para ver el total. Yo no sé si es que la gente no les conoce o no les
dan valor. Quizás la gente le de más valor a Neil Young o Bob Dylan, que a
nosotros nos gustan muchísimo, pero siempre nos ha parecido más atrevida y
sorprendente la época de finales de los setenta o comienzos de los ochenta.
Volvemos a lo mismo. A lo
mejor sorprende más escuchar “Sangre Española” de Gabinete Caligari, hablando
del suicidio de Juan Belmonte, que en el fondo es más cercano a nosotros, que
oír hablar de un suburbio de Nueva York.
Aarön: A mí me encanta un punto de una entrevista que les
hacen en La Edad de Oro cuando Paloma Chamorro les pregunta que “si sois nazis”
y Jaime responde afirmativamente, saltando Edi Clavo al instante diciéndole
“no, no, Jaime, ya no”. Ese es el momento en que marcan un giro, dejando atrás
la etapa siniestra junto a Parálisis Permanente en Tres Cipreses. Marcando una
estética y un rollo más cercano a lo que somos, hablando de toros y con camisas
de lunares. En definitiva creando su estética propia. Su sello.
Óscar: Algo más real, más nuestro. Además que poco tiempo
después afirmaban que “Cuando nosotros hacíamos ese tipo de música no lo hacía
nadie. Luego nos copiaron todos”. Tú imagina que nosotros dijéramos eso de
cualquiera. Nos buscaríamos la ruina.
Con esa forma de entender
la música, con esa impronta, los grupos de esa generación lograron colarse en
el imaginario colectivo de la gente. Quizás vuelva a ser el camino a seguir.
¿No creéis?
Aarön: También es verdad, en favor de nuestra generación,
que ellos contaron con un espacio en TVE con el que nosotros jamás contaremos.
Nosotros tenemos Internet, de acuerdo, pero no es lo mismo ser atrevido una
sola vez “En la Edad de Oro” que serlo durante cinco años en Facebook, tiene
una repercusión mucho más grande.
Óscar: De todas formas no somos ni la mitad de atrevidos en
las entrevistamos para decir lo que pensamos de muchas cosas, simplemente por
respeto. Hay que quitarse complejos,
ser arriesgado, ser
atrevido y no tener miedo a la música.
Ese parece ser el lema, en
cierta medida, vuestra región de donde no paran de aparecer un montón de
grupos. ¿Qué tiene actualmente Murcia que son muchas las bandas de aquella
tierra que están saliendo a relucir?
Óscar: El público de Murcia se acerca a ver una banda de su
tierra y la trata con el mismo respeto que si vienen de Madrid o de Barcelona.
Eso es algo muy importante.
Aarön: Yo creo que lo más importante es que somos grupos
muy distintos. No puedes decir que Klaus and Kinski se parezca a Second. Igual que
ocurre con Analogic, Audio´s Pain o nosotros. Creo que eso es lo que hace que
desde fuera se vea con respeto y se catalogue de escena. Luego además hay
buenas salas y programadores, buen público, gente profesional en el sector,
prensa atenta a lo que hacemos. Se ha creado una especia de microclima en el
que parece que si te decides a montar una banda y tocar, habrá un montón de
gente dispuesta a escuchar y valorar tu trabajo.
Eso que comentáis es muy
cierto. Todas las bandas soís muy diferente entre sí. Si tuviera que buscaros
una semejanza lo tendría muy complicado, podría decir que “Demasié” tiene un
concepto que muy de refilón es parecido con el último disco de Second,
“Demasiado Soñadores”.
Óscar: Second es muy elegante, muy melódico, muy nocturno. Hay
pequeñas conexiones. Además la producción corre a cargo de Raúl de Lara en
ambos casos.
Aarön: Es un productor con mucha personalidad que ha
aportado grandes detalles al disco. Le encanta arriesgar y no busca lo
evidente.
Me vais a permitir una
maldad. En nuestra anterior entrevista nos decíais que íbais a facturar el
mejor disco de la década. ¿Nos gustaría saber si lo habéis logrado?
Óscar: Nosotros lo ponemos todo para hacer el mejor disco
de la década. Para mí lo es. Todavía tienen que pasar ocho años para ver qué
discos saca el resto de compañeros, porque todavía podemos sacar otro mucho
mejor (Risas). Es una manera de decir que siempre lo ponemos todo en el asador.
(Risas)
Vamos a ir terminando si
os parece, pero antes dos cuestiones que siempre me gusta formular. ¿Qué bandas
del panorama nacional destacaríais?
Aarön: Nos gusta mucho el Guincho, es una propuesta muy
bien hecha de mucha calidad. Personalmente me encantan Pony Bravo, me parece
que tienen unas pelotas terribles, su último disco es tremendo.
¿Qué planes de futuro
manejáis?
Óscar: Ahora nos planteamos ver qué pasa y tocar. Yo estoy
expectante a ver qué ocurre con la gira, ver cómo funciona el disco. Ahora toca
currar y esperar la respuesta del público.
Por: Javier González / javi@elgiradiscos.com