A finales del año pasado, casi coincidiendo con las
fiestas navideñas, los sevillanos Dardem publicaron “Inerte”, su segundo
trabajo discográfico después de que en 2010 viera la luz “Nada”, un álbum con
el que cosecharon una serie de críticas positivas por parte de la prensa especializada
y que además les sirvió para darse a conocer ante el gran público.
Ahora de la mano de “Inerte”, nos presentan una
evolución sonora respecto a aquel primer disco, que si bien no les hace perder
de vista muchos de los matices tan personales que se incluían en su puesta de
largo, que nos anuncia una búsqueda de nuevos universos musicales en los que
adquieren un claro protagonismo unas guitarras cristalinas que hacen que el
componente electrónico, habitual en la banda, pase a tener un papel que
podríamos calificar como de secundario, sin por ello desaparecer bajo ningún
concepto como tampoco lo hace una lírica preciosista y amorosa, repleta de
fuerza y sentimiento que era patente ya en su predecesor.
Para la producción del álbum han decidido contar con
los servicios de los archiconocidos Manuel Colmenero y Javibu Carretero,
encargados de la producción de los trabajos de los tricantinos Vetusta Morla
entre otros, cuya principal virtud ha sido la de haber sabido rescatar de la
oscuridad la belleza de cada uno de los arpegios de guitarra de Raúl Pacheck y
de haber dotado al cuarteto sevillano de la calma necesaria para facturar un
disco heterogéneo en cuanto a contenido, pero repleto de categoría y delicadeza
en su ejecución.
Porque si por algo se caracteriza “Inerte” es por
ser un trabajo que toca diversos palos, muy diferentes entre sí, pero con el
denominador común del efectivismo y la lucidez, tomados como bandera. Pues tan
pronto comienza a sonar una melodía que nos retrotrae a los mejores momentos
del rock andaluz, personificados en Triana, aunque casi los compararíamos más
con Medina Azahara, como ocurre en “La Bendición”, que atrapan tu atención con
la sublime limpieza de “La Noche de San Juan”, de lo mejorcito de todo el
minutaje, en la que es inevitable que a nuestra cabeza vengan los zaragozanos
Héroes del Silencio.
El toque más electrónico y moderno de todo el álbum
llega de la mano de “TV Net”, en la que es fácil rastrear su gusto por el rock
independiente que se está facturando en los ultimos tiempos y que sirve como
antecedente a otra de las grandes joyas que han incluido en su nuevo disco,
evidentemente estamos hablando de “En tus Ojos”, nuestra favorita sin lugar a
dudas. Dejando casi para el final su faceta más épica y oscura que sale a
relucir en la magnifica “El Tiempo del Ladrón”.
En definitiva en “Inerte” encontramos un álbum en el
que el rock es la guía, pero entendido de una manera ecléctica y sin ningún
tipo de sectarismo, en el que diversas épocas se cruzan, fusionándose
inclusive, para dar forma a un trabajo atemporal repleto de riesgo, cosa que
desde aquí aplaudimos sobre todo por no lanzarse a lo evidente, ya saben el
pop-rock independiente al uso, del que salen totalmente bien parados.
Solamente nos queda formular un último deseo: Que
tengan el reconocimiento del público, pues lo merecen. Quizás éste sea el único
miedo que me asalta después de la escucha reposada de su trabajo. El temor a la
ausencia de un público claro, es decir una escena, que pueda decantarse por una
obra y un concepto como el que ellos proponen. Eso es algo que ya les ocurriera
con anterioridad a otras propuestas interesantes que no lograron afianzarse del
todo, a la cabeza se me viene Babylon Chat, y terminaron por desaparecer.
Esperemos que ese no sea su caso.
Por: Javier González