Melomanía: Jean Paul

Raúl Bernal vuelve por El Giradiscos. Recientemente unos visitaba con una ENTREVISTA en la que nos contaba como trazó su último trabajo “Manqué”. En está ocasión lo hace mostrando su lado melómano sin reserva. Vuelve para explicándonos cuáles son sus cinco canciones y sus cincos discos favoritos, y como no podía ser de otra forma, lo hace con un gran derroche de estilo y elegancia. Una selección cargada de buen gusto y amor por la música. Sus explicaciones dejan

claro que estamos ante un melómano de verdad. Con la elegancia y la exquisitez que imprime en sus canciones hace una selección a la altura del nivel musical de Jean Paul.

Os dejamos con Raúl Bernal, no sin antes recordar que el próximo sábado 17 Jean Paul estará en la sala Boca del Lobo (Madrid), presentando las nuevas canciones de “Manqué”. Puedes comprar tu entrada de manera anticipada por el increíble precio de 6€ Pinchando Aquí.

Discos:

Eels “Daisies Of The Galaxy” (2000)

- Es posible que Eels sean mi grupo favorito, tienen a partes iguales el riesgo de la búsqueda y el punto clásico de los grandes. Sus producciones te dejan boquiabierto y la sencillez aparente de las canciones de E, la belleza de sus letras y por supuesto la apabullante honestidad que desprenden sus composiciones son de una calidad abrumadora. Me quedo con Daisies of the galaxy, el tercer disco de Eels, porque es una auténtica ópera contemporánea, una obra maestra en todos los sentidos. Creo que es el disco más inspirado de E, soy fan de todos sus discos pero Daiseis… es muy grande. Eels son un referente de primera línea para Jean Paul. Y el que no haya leído “Cosas que los nietos deberían saber” está cometiendo un grave error.

- Leonard Cohen “Songs From a Room“ (1969)

El maestro de maestros. Dylan reinventó el rock, pero Cohen reinventó el oficio de escritor de canciones, se convirtió en un artesano de la canción y aún lo sigue siendo y que esa extraña divinidad que nos protege o nos arrastra a la perdición lo guarde por muchos años.

Songs from a Room fue el primer disco que escuché de Cohen (el segundo en su carrera), el primero que compré de Cohen, que aún conservo, y el que me hizo buscar qué había detrás de esa sencillez y loca monotonía instrumental, de esa voz casi lineal e hipnótica…. Y descubrí la canción, ¡detrás de todo eso estaba la canción!. A partir de ahí me convertí en un auténtico enfermo de Cohen y cuando digo enfermo es E-N-F-E-R-M-O.

En cada escucha el disco crece de una manera asombrosa, al menos para mí. Es un disco crudo y aniquilante.

Cohen no quería hacer más discos ni tenía la moral suficiente, grabó el disco primero en Nashville con banda pero no le convencía la honestidad de su voz y lo destruyó, más tarde grabó de nuevo estas joyas de canciones y lo llamó “canciones desde una habitación”, no por Hydra como muchos creen sino por la habitación de un hotel de California, donde compuso gran parte de las canciones y donde vivió un tiempo.

“Canto esto para los grillos, canto esto para el ejército, canto esto para tus hijos y para todos los que no me necesitan”. Sólo por esa frase el disco merece un puesto en la historia.

- The Band “Stage Fright” (1970)

El espejo. The Band son el espejo en el que mirarse.Podría poner cualquiera de Dylan pero he preferido que sea de The Band, el grupo por excelencia.

Todos los miembros de Jean Paul somos auténticos seguidores de The Band, y yo en particular soy un fan absoluto del gran Richard Manuel, del Richard Manuel pianista, que moriría ahorcado el día que yo cumplí cinco años.

The Band fue el auténtico responsable del cambió de rumbo de Dylan, Dylan quería cambiar y aprovechó a la banda para electrificar el sonido. Anteriormente músicos de Ronnie Hawkins, forjaron con Dylan y más tarde como The Band una carrera intachable e imborrable.

Stage Fright, tercer disco de The Band como The Band. Sólo con “The shape i´m in”, “Daniel and the sacred harp” o “Just another Whistle stop” se pueden abrir conservatorios.

- Jesse Sykes And The Sweet Hereafter “Oh, My Girl” (2004)

Segundo disco de Jesse Sykes y perfecta continuación al “Reckless Burning”. Me gusta porque aparentemente es un disco luminoso que encierra desolación por todos sitios. Guitarras fronterizas, melodías pausadas y arrastradas, una personalidad aplastante y una elegancia sublime. Con una producción perfecta de Tucker Martine, que ya hizo lo suyo con Sufjan Stevens y Laura Veirs. De lo poco que me llama la atención de la música actual, una artista a la que deberíamos de pedir permiso para escuchar sus canciones. "Oh, my girl", "Tell the boys" son algunas de sus obras maestras.

- Tom Waits “Rain Dogs” (1983)

Para mí es el mejor disco de su carrera. El bueno de Waits ha tenido una evolución impresionante. Muchos “críticos musicales”, españoles sobre todo, intentan tachar a Waits de “no cantante” y a mí me parece un sobresaliente cantante.

Tal vez sea el disco en el que Tom Waits definió su carrera, me cuestan un poco sus discos anteriores y de los posteriores alguno me he saltado porque todavía no he logrado entender otros posteriores a Rain Dogs. En esencia creo que el verdadero Waits está en este disco.

Tango, blues, cabaret “bien hecho”, hondura emocional y la grandeza de un escritor – vividor de canciones.

“Big Black Mariah” o “Walking Spanish” te dejan exhausto.

Una auténtica joya.

CANCIONES:

- My god, my god (Micah P. Hinson)

De su último disco “Micah P. Hinson and the Pioneer saboteurs”, un disco oscuro y algo desordenado, pero terriblemente intenso, es absolutamente recomendable todo el disco, pero esta canción en concreto me emociona realmente, me parece bellísima y extraña. Sublime canción y maravilloso disco de Micah.

- Night Country (Magnolia electric co.)

Me encantan Magnolia… es difícil escoger una canción, elijo esta porque últimamente la pongo muy a menudo. Elegantísima.

- Pieces (Villagers)

Del disco “Becoming a Jackal”. Un gran descubrimiento. Es mi canción favorita del disco, es muy compleja y me descoloca mucho, sobre todo la inteligente batería y el final apabullante, es una canción a lo “Hitchcock” sabes que algo va a pasar, que va a llegar pronto, sabes lo que es, pero cuando aparece te sorprendes como si no tuvieras ni idea.

- A hazy shade of winter (Simon and Garfunkel)

De mi disco favorito de Simon y Garfunkel, el “Bookends”. Esta canción no es la mejor del disco, pero sí la más sorprendente, es rock and roll, es psicodelia, es pop… en esta canción no dejas de escuchar a Love y también, por qué no, a Calexico… Es un disco esencial.

- Put a penny in the slot (Fionn Regan)

De su primer largo “The end of History”. Anterior a su nada imaginativo segundo disco y antedecesor del que sería el tercero "100 acres of sycamore"y digna continuación de este gran disco. Put a Penny… es Dylan sin el peso de la historia.

Fionn Regan es uno de los elegidos para mantener la tradición que plasmó Dylan, Drake y hasta el mismísimo Erik Satie si hubiera tenido una guitarra acústica.