
Emoción es lo que se vivió en los momentos previos a la actuación de los Jayhawks originales en la madrileña sala Heineken. Una sala a reventar como hacia tiempo que no se veía, esperaba a la banda de Minneapolis. Los miembros originales que grabaron sus dos obras maestras “Hollywood town hall” y “Tomorrow the green grass”. Mark Olson volvía a la banda que creó a mediados de los ochenta junto con Gary Louris y Marc Perlman. No menos importante era la participación de Karen Grotberg a los teclados y maravillosos coros y el siempre eficaz Tim O´Reagan a la batería conformando la mejor alineación posible.
El repertorio de ensueño y la actitud la mejor de una banda emocionada de ver como respondían tanto a los clásicos (tocaron casi al completo sus dos obras magnas) así como unos excelentes temas nuevos que no desmerecían en absoluto junto a sus hits. Y es que su esperadísimo álbum de regreso "Mockingbird time" estará en las tiendas en septiembre y las canciones que tocaron huelen a clásicos “She Walks In So Many Ways”, “Black-eyed Susan” o “ Hide your colors” no decepcionaron.


Todo un lujo, solamente ensombrecido por el sonido no muy brillante de una sala que no termina de sonar bien, pese a eso y por ser la vuelta de uno de los grandes grupos de la historia, sin duda uno de los conciertos del año.
Texto y fotos: Jorge Bravo & Alberto Vicente