Melomanía Juan Alberto Martínez (Niños Mutantes)

Errante, su cabeza gira locamente en sentido inverso al que lleva la orbita terrestre. Este granadino además de tocar la guitarra y escribir canciones geniales es un buen poeta y un melómano empedernido.

Hoy Juan Alberto Martínez se une a la terapia Melomanía promovida por El Giradiscos con el fin de agravar y acrecentar la música-adicción entre nuestros lectores. Así tratamos de saciar su búsqueda de sensaciones a través de los distintos estilos musicales, y ¿Qué mejor manera que hacerlo contando con los músicos de referencia de nuestro país?

En este segundo capitulo, la voz de nuestros admirados mutantes nos desvela cuales son las canciones y los discos que más remueven su interior.

Canciones

LEONARD COHEN "Who By Fire"
Llevo toda mi vida yendo a conciertos, buscando ese momento en que te emocionas tanto que todo desaparece y sólo queda la música y su efecto en tu interior. Cuando vi a Cohen cantando esto tuve la emoción más grande que he vivido en un concierto, bendito sea por recordarme cuánto me gusta esto. Hay como diez canciones suyas que me vuelven loco, pero con esta me dio lo que le daba a Santa Teresa de Jesús.

THE MAMAS AND THE PAPAS "California Dreamin”
Esta canción me ha acompañado toda la vida, y me sigue llegando igual que cuando la oía en una casette en el Simca de mis padres. Sus coros y su melodía son perfectas para ponerte contento aunque sea una canción triste.

THE VELVET UNDERGROUND "What Goes On"
Esto es rock'n'roll puro, esto te mueve la pelvis y te hace creerte que eres un macarra en NY vestido de cuero negro y con gafas de sol, con ganas de llevarte a alguien a la cama.

WILCO "Jesus Etc"
No todas las grandes canciones se hicieron antes de 1970.... Esta te pone los pelos de punta y está hecha hace muy poco. La mejor canción de un disco enorme que supuso una revolución en la música americana.

GEORGE GERSHWIN "Summertime"
Esta canción la han tocado de miles de formas, desde grandes del jazz como Ella Fitzgerald o Nina Simone hasta Janis Joplin o el gran Brian Wilson, pero a mí la que me vuelve loco es la de The Zombies. Siempre digo que nadie grabó nunca tan bien una voz como lo hizo Colin Blunstone ahí.

Discos

PIXIES "Doolittle"
Si estoy en la música es por este disco. Un amigo del instituto me pasó su walkman en una excursión. Me dijo "Tienes que oír esto". Fue un impacto inmediato. Música que me hacía ver cosas y que se movía entre las vísceras y el sexo. Luego conocí "Surfer Rosa", que hoy me parece incluso mejor, pero como "Doolittle" fue mi bautizo en los Pixies, es el que elijo.

BOB DYLAN "The Freewheelin”
Hubo una época en que me hice de la religión de Dylan, pero la abandoné porque es demasiado exigente: demasiadas oraciones al día, demasiados discos, y demasiadas palabras. Me quedo con este: ¿cómo se pueden tener menos de 20 años y cantar como si fueras un viejo que lo ha visto todo y ha vuelto para quitarte la venda de los ojos y enseñarte cómo son el amor y el poder?

TRIANA "El Patio"
Le quité este vinilo a un tío mío de Sevilla, básicamente porque me llamaba la atención aquella portada tan horrorosa, y creo que tardé meses en ponerlo porque nada bueno podía haber con un envoltorio tan chungo. Nunca más se ha vuelto a acercar con tanto acierto el rock al flamenco. Pink Floyd de Triana. Jesús de la Rosa fue menos llorado que Camarón, pero su pérdida fue igual de grande.

FRANCO BATIATTO "La Voce Del Padrone"
Mis padres intercambiaban su casa en verano con la de otros profesores europeos, y así viajábamos por dos duros. Cuando tenía 12 años estuvimos en Italia, en una casa llena de discos de Batiatto. Melodías pop y cajas de ritmo mientras habla de Oriente y de filosofía. Menudo personaje.

SERGE GAINSBOURG "Histoire de Melody Nelson"
Este disco es otro verano más de 20 años después. Viajando en coche por los caminos de Cabo de Gata, entre chumberas y nubes de polvo, buscando la magia de esas playas mientras esperábamos a que mi hijo se decidiera a nacer. Esta fue la banda sonora, el mejor Gainsbourg, el que hizo Historia este disco en el que lo importante es el poder de la música, no el de las palabras.

Fotos: Iván González