No Line On The Horizon

¿Qué se puede decir a estas alturas de “No line on the horizon”? Han pasado apenas dos meses desde que empezamos a escuchar el primer single del álbum “Get on your boots” y no ha cesado de surgir polémica en todos los frentes, algunos dijeron que era un acercamiento al Rock duro (El País) otros dijeron que era más de lo mismo (El Mundo) pero lo cierto es, que no ha dejado indiferente a nadie.
Cinco años han pasado desde su anterior álbum de estudio y la espera ha suscitado mucha expectación, quizá demasiada para lo que nos ha traído esta vez el cuarteto irlandés. No deja de ser un disco agradable que cuando uno ha terminado de escucharlo apetece volver hacerlo, pero no supone ningún salto, ningún estallido de sorpresa, aunque ahora si nos recuerdan a los U2 de los 80, con discos como “War”, aunque sin llegar a ser tan brillante como aquel, ya con el álbum en la mano, se puede decir que es un BUEN trabajo.

No podemos hablar de él sin decir que la portada del álbum, fotografía impresionante de Hiroshi Sugimoto ya fue utilizada como portada del “Specification fifteen line” de Richard Chartier, imperdonable error. También cabe destacar, que por esta vez Brian Eno y Daniel Lanois, participan por momentos como compositores e instrumentistas.

Dicho esto, toca colocar la rodaja negra sobre el plato y pincharlo:

Da comienzo la canción que da titulo al disco “No line on the horizon”, una de las mejores, habla de los límites y contiene connotaciones sexuales, esta plagada de distorsiones y de oh oh ooooh que a buen seguro serán muy coreados en los estadios de todo el planeta.

“Magnificent” comienza con el bombo de Larry, marcando el pulso acompañado de un sonido de guitarra sucia y oscura, hasta redoblar creando una explosión que desemboca en las guitarras tan características de The Edge. Sí, esto es U2 y es magnífico tenerles de vuelta, un canto al amor (Sólo el amor, sólo el amor puede dejar una marca…Pero sólo el amor, sólo el amor puede curar una cicatriz).

Ahora toca el momento de calma con “Moment of surrender” la canción más larga del álbum, con siete minutos en los que no sobra una sola nota, un medio tiempo rabioso y tierno al mismo tiempo, en la que la gran voz de Bono puede enternecerte con sus falsetes o puede levantarte desgarrándose la garganta. Llega el momento de disfrutar del hipnótico tempo de Larry y Adam, con maravillosos adornos vocales en los coros de The Edge, que se empastan a la perfección con la virtuosa voz de Bono.
Cantan los pájaros para abrir el cuarto tema del álbum “Unknown Caller” evocando una mañana soleada de primavera, un tema dedicado a la libertad y a la felicidad (Grita de alegría si tienes la oportunidad).

Pasamos a “I’ll go crazy if I don’t go crazy tonight”, una canción con un sonido mas típico del grupo, ambientes de guitarras con el sello de The Edge, una apasionada letra acerca de los retos, de vivir intensamente, de atreverse. Voy a volverme loco si no me vuelvo loco esta noche. Nos convencen y acto seguido nos volvemos locos, pero con las botas puestas.

Con un sonido más sucio más distorsionado nos presentaron el álbum, “Gets on your boots”, es la canción más dura y más cruda y también la más rápida de todo el trabajo. Letra cargada de sutilezas acerca de las guerras, es la continuación sonora de “Elevation” y “Vertigo” con vistas al sonido del futuro más próximo.

Es imposible hablar de”Stan up comedy” sin mencionar a Led Zeppelin, riffs de guitarra que recuerdan a Jimmy Page, sonido sucio de nuevo para una canción cargada de arrogancia que deja a la vista el manejo de The Edge en las seis cuerdas. Excelente.

“Fez- being born” está claramente dividida en dos, una introducción de más de un minuto, sonido ambiental con voces árabes de fondo, instrumental made in Eno. La segunda parte es una peculiar, narración de un parto, volvemos a un sonido ambiental.

La canción con menos presencia de sintetizadores y en la que menos presente está la mano de Eno es "White as snow" una canción conmovedora, en la que se puede distinguir el sonido de una mandolina, todo un acierto después de tanta electrónica y canciones muy producidas, un poco de paz y de sencilla belleza. Preciosa.

“Breathe” contiene letras sobre el amor y lo que ello conlleva: dudas, miedos, alegrías, felicidad, etc. Un sonido de rock and roll para el penúltimo corte del álbum (Cada día muero de nuevo, y de nuevo vuelvo a renacer… Cada día tengo que encontrar el valor).

Llegamos al cierre, “Cedars of Lebanon” es una canción lenta en la que Bono recita (esta vez su voz esta muy por encima de la música) desde el punto de vista de un corresponsal de guerra. Nos dice cosas como: Lo peor de nosotros es que somos una sonsacada confesión - Un soldado dando las naranjas que saca de un tanque - Elige cuidadosamente a tus enemigos porque te definirán.

Al final, buen sabor de boca es lo que nos dejan Larry, Adam, Edge y Bono, vuelven con letras de las mejores de sus casi treinta años de carrera, tan sensitivos como uno de esos complejos mecanismos que miden seísmos a 10.000 km de distancia para plasmar las sensaciones y los sentimientos en canciones.
Últimamente les hemos podido ver subidos en tejados o inaugurando una calle con su nombre en NY.
Tan solo llevamos tres días disfrutando del álbum cuando ya se rumorea que para el próximo noviembre la salida de un nuevo trabajo, también de la mano de Brian Eno, aunque se presume que el sonido será más ambiental y más eléctrico.
El día nueve de Marzo tendremos la confirmación de la próxima gira, que les llevará por prácticamente todo el planeta. Esperemos suerte en nuestro territorio. Por el momento darán comienzo a su tour en Junio de este 2009 en Barcelona.

Por Vanvan "EG"