
La plaza de Carabanchel cuenta con capacidad para 15000 espectadores aproximadamente, aunque el de Vigo posee gran poder de convocatoria, no fue suficiente para completar el impresionante recinto.
En la plaza unas 6000 personas esperaban con impaciencia la llegada del ex cantante de Piratas, no en vano, es un personaje muy querido en Madrid.
Con canciones de "Mentiroso mentiroso", mas sus anteriores “Canciones para el tiempo y la distancia” y “Las 7 y media”, hizo entrar en calor a los fieles allí presentes, para proponerles posteriormente un placentero viaje al pasado interpretando temas como “Promesas que no valen nada” convertida casi en un himno generacional, la estremecedora “El equilibrio es imposible” y la cara B “Años 90”. Al final de la noche caras de satisfacción entre los fieles del galleg

Iván a conseguido a base de trabajo y de dos discos notables que su propuesta sea admirada por un gran cúmulo de gente, así como por compañeros de la talla de Quique González y Bunbury, quienes no se cansan de alabarle.